El ministro del sector dice que se requieren millones de pesos que escasean en las arcas estatales para importar cinco productos básicos de la canasta familiar racionada.
Para el economista Pedro Monreal, la narrativa oficial tras el desastre de la producción agropecuaria en Cuba es 'novelería político-ideológica a espaldas de la realidad'.
En 2024, 'decrecemos en relación a la producción de alimentos importantes como los huevos, la carne de cerdo, la leche y la carne vacuna, así como los temas relacionados con los granos'.
'La línea de producción del picadillo La Favorita, destinado al mercado interno en divisas y a la exportación, continúa normalmente su producción', dice un trabajador a DIARIO DE CUBA.
La crisis estructural profunda requiere resolver su descapitalización, retraso tecnológico, sistema empresarial ineficaz y cuestionable esquema de planificación, alerta un economista.
La fiscalización al ministerio del sector achaca el decrecimiento de casi todas las producciones a 'la poca autonomía financiera' y el 'incremento de los precios de las materias primas'.
Para el economista Pedro Monreal, 'la principal inercia que mantiene encallado el sistema económico cubano es la obcecación con un esquema de planificación centralizada'.