El servicio, que se limita únicamente a transferencias de dinero de consumidores de Katapulk, ampara el envío de hasta 2.000 dólares por transacción.
También hablamos de una alerta emitida por Canadá para quienes viajen a Cuba y de la reanudación de los servicios de Western Union en la Isla.
La compañía regresa tres meses después de que 'inconvenientes' con los bancos de la Isla la obligaran a suspender el servicio.
Un empleado de la entidad estadounidense dice que el Gobierno cubano no ha cooperado para que pueda restablecerse el servicio.
No obstante, los cubanos siguen quejándose de problemas para recibir en sus tarjetas transferencias desde el exterior.
La medida temporal responde a problemas técnicos en el sistema bancario cubano, según empleados de la empresa con sede en Denver.
'Como siempre, el dinero de verdad, el físico, va a los militares de la transnacional GAESA, con sede en Panamá y no en Cuba. Los dólares ni siquiera van a la Isla.'
La Habana encuentra el mecanismo para que las remesas vuelvan a fluir directo a su bolsillo, mientras se queja del embargo y denuncia las sanciones contra GAESA.
Una 'prueba piloto' está en desarrollo en 'ubicaciones seleccionadas de Florida', con un límite diario de 2.000 dólares por envío.
La organización también solicita que las autoridades cubanas restablezcan las operaciones con Western Union u otro operador de envíos de remesas.
Durante la campaña presidencial, Biden prometió eliminar 'las restricciones de Trump a las remesas y los viajes' a la Isla.
La Gaceta Oficial de Cuba dice que REDSA gestionará las remesas, pero en un tuit el Banco Central 'ratifica' que FINCIMEX seguirá al frente.
Los cubanos han reactivado su arcaico pero eficiente sistema de 'mulas' en el puente aéreo Miami-Habana para mitigar el corte de las remesas familiares.
El economista habla con DIARIO DE CUBA el día que Western Union cierra sus oficinas en la Isla. La dolarización no vendrá desde el Gobierno, vendrá desde el exilio, es imparable e inevitable', dice.
Banco Central publicó una resolución que permite a la Aduana decomisar los dólares de quienes importen o exporten frecuentemente esa divisa.
La empresa asegura que no ha podido 'encontrar una solución' alterna para mantener su servicio en la Isla.
La compañía reitera que 'sigue estudiando las opciones para continuar operando en Cuba' después de que entren en vigor las nuevas sanciones de Washington a Fincimex.
Afirma que el 70% de los puntos de pago de remesas son de empresas en la 'lista negra' de EEUU, pero no aclara por qué no transfiere sus servicios al 30% restante.
La penalización de EEUU a FINCIMEX genera opiniones encontradas entre los cubanos, atemorizados y desinformados.
La información deliberadamente incompleta publicada por FINCIMEX crea confusión y temor entre muchos cubanos, mientras las oficinas de Western Union siguen abiertas.
