'Nadie puede sostener con honestidad que Cuba sea un país patrocinador del terrorismo', dice la viceministra de Relaciones Exteriores, mientras líderes de un grupo terrorista se refugian en La Habana.
Colombia sigue inmersa en una espiral de violencia, en medio de crecientes y diversos grupos delictivos, que se han expandido en los dos años de mandato de Gustavo Petro.
Bruno Rodríguez expresa la voluntad del régimen de Cuba de contribuir a la paz en Colombia, luego brindar ayuda a los grupos armados de ese país durante décadas.
'Al contrario de ocasiones anteriores, donde su renuencia a seguir en diálogo venía acompañada de alguna respuesta violenta, en esta ocasión los guerrilleros evitaron referirse a la vigencia del cese al fuego.'
Aunque estudiosos de los procesos de paz en Colombia no son particularmente optimistas sobre el diálogo y eventual acuerdo con el ELN, Petro insiste en un mensaje optimista.
El ministro de Relaciones Exteriores del régimen, Bruno Rodríguez Parrilla, dice que La Habana acogerá en nuevo ciclo de negociaciones con 'responsabilidad' y 'esperanza'.
'No, no estamos pensando en sacarlo', dice Mark Wells, subsecretario adjunto de la Oficina de Asuntos del Hemisferio Occidental del Departamento de Estado.