"El ELN ha escogido el camino de la guerra y guerra tendrá. Nosotros, el Gobierno, estamos al lado del pueblo", anunció el presidente de Colombia, Gustavo Petro, quien declaró el lunes 20 de enero el estado de conmoción interior y emergencia económica en el país, que sufre la ofensiva que ha emprendido la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN) contra una disidencia de las FARC en la región del Catatumbo, que ha dejado más de 80 muertos.
"Se declara el estado de conmoción interior y el estado se emergencia económica. Espero del poder judicial su apoyo", expresó el mandatario en la red social X.
En una extensa publicación, Petro indicó que "lo sucedido en el Catatumbo no es sino una demostración más del tránsito de las guerrillas insurgentes hacia las organizaciones narcoarmadas. (...) Crímenes de guerra por doquier, que son crímenes contra la humanidad".
"Como lo anunciaba antes, el ELN se apartó de la teoría del 'amor eficaz' de su fundador, el sacerdote Camilo Torres Restrepo, del que aún guardo su sotana, y transitó hacia los caminos de Pablo Escobar, al que escogieron como su guía permanente", enfatizó.
"Conocí muchas personas militantes del ELN cuando estaba en la cárcel o cuando estaba en mis noches de amor y de guerra; siempre me admiró de ellos sus principios, su entrega revolucionaria. Creo que ese ELN está muerto. Murió también entre los campesinos del Catatumbo, lo asesinó el actual ELN mafioso", aseguró.
Petro indicó que "le corresponde al Ejército actual, el Ejército de la Constitución, salvar y proteger a la población del Catatumbo del ELN, su asesino. (...) Al pueblo, mucha organización y firmeza, las armas de la nación están a su lado", finalizó.
El jefe de Estado apeló al artículo 213 de la Constitución Política, debido a la grave situación de orden público que se registra en la zona del Catatumbo, en el norte de Santander, que además de personas fallecidas ha generado el incremento de desplazamientos forzados.
Según cifras publicadas por el medio argentino Infobae, alrededor de 8.000 personas habrían dejado sus hogares a causa de los conflictos entre las dos bandas armadas, a lo que se suman hechos violentos en regiones como Guaviare, en la que se registraron más de 20 asesinatos.
El Estado de conmoción interior está contemplado en el artículo 213 de la Constitución Política de 1991. Se trata de una medida excepcional diseñada para estabilizar la seguridad del Estado en momentos de grave perturbación del orden público y otorga al Ejecutivo poderes especiales para expedir decretos con fuerza de ley y suspender las leyes que, a su juicio, sean incompatibles.
La medida tiene una vigencia de 90 días, pero el presidente puede puede prorrogarla hasta dos veces.