En medio de la mayor crisis de combustible que haya sufrido Cuba en décadas, ¿tienen fundamento las explicaciones del Gobierno según las cuales la situación actual se debe a que los suministradores "no han podido cumplir con los compromisos que tenían", según afirmaran Miguel Díaz-Canel y el ministro de Energía y Minas, Vicente la O Levy?
A un mes del agravamiento de la escasez de gasolina y diésel que desde inicios de abril provocara largas colas ante las gasolineras, reducciones del transporte público e incluso apagones, y que luego dio lugar a la suspensión de las clases presenciales en algunas universidades, cabe revisar cuántos barcos de combustible ha recibido Cuba en ese tiempo.
De acuerdo con el sitio web VesselFinder, el 14 de abril, justo la jornada en que Díaz-Canel anunció que "tenemos casi la mitad de la gasolina que consume Cuba diariamente" porque "los países que tienen con nosotros determinados compromisos para suministrarnos gasolina a partir de los convenios que tenemos están atravesando situaciones energéticas complejas y no han podido cumplir con los compromisos contraídos", llegó a la Isla el tanquero Equality.
Navegando bajo bandera de Tanzania, este buque tocó puerto en Matanzas, La Habana, Cienfuegos y Antilla, en Holguín. Su última localización reportada es de hace 19 días. Sobre su arribo no hubo noticias en los medios oficiales cubanos, ni tampoco acerca de la razón de sus viajes entre puertos cubanos.
Cuatro días después, el tanquero Caribbean Alliance, que navega con pabellón de Panamá, un barco que el Gobierno de la Isla usa en servicio de cabotaje entre sus puertos, estuvo trasegando entre Mariel, La Habana y Matanzas.
El 19 de abril arribó a La Habana el buque petroquímico liberiano Zheng He1, procedente de Rotterdam, Holanda, luego de atracar en Kaliningrado, Rusia. De Cuba partió el 21 en dirección al estrecho de Gibraltar. ¿Llevó a la Isla combustible del aliado euroasiático?
El 21 entró en La Habana el BT Bicentenario, de México, procedente del puerto de Progreso, en Yucatán. En la capital cubana permaneció por menos de 48 horas.
El 25 entró a Cienfuegos el Gloria C, tanquero operado por la empresa sancionada por EEUU Caroil Transport Marine LTD, propiedad del conglomerado de los militares cubanos GAESA.
Este buque de petróleo es conocido por servir desde hace años al régimen de Cuba para realizar dark activities, un término utilizado en los registros de movimientos para señalar que se perdió el contacto con el barco, lo que podría indicar que la tripulación apagó el dispositivo de localización vía satélite con algún fin oculto. Por ejemplo, trasegar combustible que La Habana revende a otros países.
El 27 de abril, según reportó la prensa oficial cubana y comprobó DIARIO DE CUBA, llegó a Matanzas un barco fantasma, cuyo identificador satelital ha permanecido apagado desde entonces. Finalmente, pudo saberse que su nombre es Marianna VV, con bandera de Liberia.
Pese a que los medios oficiales aseguraron que este barco descargaba en el puerto de la base de supertanqueros una cantidad de combustible resultado del cumplimiento de entregas de proveedores internacionales, lo cierto es que el Marianna VV es, como el Caribbean Alliance, un tanquero que el Gobierno cubano usa para operaciones de cabotaje entre puertos de la Isla. Al cierre de este reporte, permanece en Matanzas.
El 21 de abril se produjo el arribo más enigmático del mes. Esa jornada llegó a Matanzas, procedente de Le Havre, en Francia, el tanquero alemán Seatrout. Tras ocho días en ese puerto, salió hacia La Habana, adonde arribó el 1 de mayo, y permaneció allí casi 72 horas. Ahora navega hacia Skagen, en Dinamarca. ¿Qué operación hizo en Cuba? No se sabe.
El Scot Bayern, buque petroquímico con bandera de Malta, llegó a La Habana el 9 de mayo procedente de Cartagena, Colombia, y después de varias semanas en el puerto de Paranaguá en Brasil. Según los sitios de rastreo de buques, permanece aún en la capital cubana.
El tanquero de petróleo crudo Emilia, otro de la flota de GAESA y que tiene pabellón cubano, arribó a Matanzas ese mismo día, de ahí fue a Cienfuegos (8 de mayo). Este, como el María Cristina y el Sandino, también operados por los militares cubanos, trasegaron petróleo desde Venezuela en este periodo y actualmente hacen rutas entre ambos países, como parte de los envíos regulares de crudo de Caracas a su aliado.
Otra singularidad: el Cheetah II, de Panamá, llegó a Matanzas después de cruzar el estrecho de los Dardanelos, tras pasar por Estambul, en Turquía, en un viaje que se originó en Tuapse, Rusia, donde hay una importante refinería de petróleo. Una inusual operación cuyos detalles se desconocen.
Para finalizar, esta misma semana llegó a Matanzas el buque de petróleo crudo Calida, que partió vacío, como confirmó DIARIO DE CUBA, desde el puerto de Corpus Christi, en Texas, y no con 40.000 toneladas de diésel, como reportó la prensa oficial de la Isla.
¿Puede hablarse de crisis de disponibilidad de combustible en Cuba durante un mes en que la escasez ha hecho aún más intolerable la vida de los cubanos? ¿Esta cantidad de cargamentos son insuficientes para mantener el funcionamiento del país o hay algo que el régimen no está diciendo?
Las sospechas de que La Habana oculta la reventa del petróleo de baja calidad que recibe de Venezuela y que la actual crisis habría sido artificialmente provocada parecen sustentarse.
Como advirtiera desde mediados de abril el director del Programa de Energía para Latinoamérica y el Caribe de la Universidad de Texas, Jorge Piñón, "por lo menos para el primer trimestre, enero, febrero y marzo, Cuba ha recibido suficiente petróleo y combustible de Venezuela, incluyendo por primera vez un supertanquero, el Nolan, con 1,5 millones de barriles, que llegó a mediados-finales del mes de marzo".
Según el analista, en Cuba la gasolina representa solo el 3% del total del combustible que se consume, de ahí que su sorpresa sea mayor al ver la escasez de este derivado.
"Las refinerías en Cuba siempre han producido más gasolina de la demanda, y siempre ellos han exportado gasolina. Tenemos toda la información de UNComtrade", dijo, en referencia al United Nations Commodity Trade Statistics Database, el sistema de recopilación de datos de las Naciones Unidas sobre el comercio de mercaderías, importaciones, exportaciones, reexportaciones, y otros renglones del comercio mundial.
Piñón descartó que el problema esté en la deficiencia de las refinerías o en la capacidad de almacenamiento del crudo. Sí dijo que "hay falta de trasparencia en la información oficial" y se formuló la pregunta de si pudiera estar el Gobierno cubano vendiendo al mercado internacional más gasolina de lo habitual y comprometiendo el consumo nacional.
"Es una de las posibilidades: que la necesidad de dinero y de divisas es tan grande que están dispuestos a sacrificar la demanda interna y crear esta situación. Les puede salir el tiro por la culata desde el punto de vista político y social y hasta económico. Pero sí es posible, porque ha pasado en otros años que Cuba esté exportando gasolina, una vez más, para generar las divisas que necesita", advirtió el académico.
Después de hacerse evidente que las autoridades han mentido a los cubanos sobre los arribos de barcos petroquímicos, mostrando unos y ocultando otros, así como acotando que los presuntos cargamentos de combustible de los que informan no resolverán el problema grave que vive hoy la Isla, ¿hay dudas de que la situación que vive el país obedece a otro gran embuste?
* DIARIO DE CUBA agradece a Jorge Piñón por su inestimable aporte en la elaboración de este reporte.
Muchos huecos en este articulo.
Gaesa y Alejandro Castro Espin se están forrando de plata...