El activista Ramón Saúl Sánchez, presidente del Movimiento Democracia, opinó en el programa Los Puntos a las Íes, de DIARIO DE CUBA, que "la mejor y única manera que tiene Estados Unidos de proteger sus fronteras es ayudar a que no existan dictaduras en Cuba, Venezuela, Nicaragua y en el resto de América Latina".
"Ese es el antídoto, el único que puede curar esa enfermedad. Nos enfocamos en el síntoma, que es la entrada de irregulares, pero la gente, a menos que le mutilen algo en el ADN, va a seguir buscando libertad", explicó el exiliado en un análisis sobre la posible deportación de cientos de miles, y exigió a republicanos y demócratas que "no jueguen con el dolor de los seres humanos".
A la pregunta de si los cubanos con autorización I-220A, salvo un milagro, serían deportados o quedarían en la ilegalidad, el abogado de inmigración Héctor Benítez Cañas, presidente del bufete Benme Legal, dijo que habría que poner "milagro entre comillas".
"Los que tienen I-220A tienen que haber aplicado a la figura del asilo, bien político o por otra motivación, para tener una oportunidad en la residencia permanente. Lo que pasa es que con el asilo, lastimosamente, las estadísticas no son alentadoras. No superan ni siquiera el 10% de aprobación", recordó el abogado.
En relación con las políticas migratorias de los candidatos presidenciales, Ramón Saúl Sánchez consideró que ambos "siguen la misma retórica".
"Ahora pueden ser cosas que se dicen antes de las elecciones, pero a la hora de la verdad es muy difícil deportar masivamente a cientos de miles de personas. Pueden ponerlas en un limbo y deportar a un porcentaje, pero no a todos", indicó el activista.
Héctor Benítez coincidió en que "no podrá ejecutarse una operación masiva de deportación en los términos planteados".
Sin embargo, "hay un punto que se perdería con la llegada de los republicanos: el esquema de las prioridades de deportación", que actualmente favorece a las personas con buena conducta moral, familia y trabajo, advirtió.
"Al perderse las prioridades de deportación, la madre de familia, el hombre trabajador, el joven estudiante, entra en el mismo saco que los delincuentes que vengan a causar problemas. Sería una pérdida terrible", lamentó Benítez Cañas.
