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Escasez

Cenas de fin de año en Cuba: entre la escasez y los precios de infarto 'se murió la tradición'

Algunos cubanos comen gracias a las compras que desde el exterior ordenan familiares y otros pagan los precios de los agromercados, pero ninguno puede asumir una celebración con el salario.

Madrid
Una mujer compra en un puesto en La Habana.
Una mujer compra en un puesto en La Habana. Diario de Cuba

Maisel, Katia y Yanela son tres madres que despiden el año, como muchísimos cubanos, con deseos de mejoría para 2024, pero con pocas esperanzas de conseguirlo. Llegan a las celebraciones de Navidad y la noche del 31 como pueden. Las tres trabajan en empleos estatales, con salarios entre bajos y medios, y tienen alguna entrada extra puntual. Alguna tiene familiares residentes en el exterior que le envían remesas. Todas expresan a DIARIO DE CUBA quejas por los precios y hablan con añoranza de la carne de cerdo en las cenas familiares.

"Si tienes recursos financieros encuentras todo lo que necesitas. Además de mi salario de administrativa, tengo un hermano que desde Estados Unidos y en la medida de sus posibilidades nos trata de ayudar. En casa no somos de 24, pero el 31 voy a preparar parte de lo que me propuse, que tampoco es lujo", dice Maisel.

La compra de Maisel para la cena del último día del año la ordenó su hermano en una de las plataformas online que venden, en dólares, todo lo que no encuentran los ciudadanos comunes en las tiendas estatales.

El pedido que realizó el hermano de Maisel en TuAmbia, una de las páginas diseñadas para quienes desde el extranjero intentan aliviar la situación de sus amigos y familiares, lo recibió en menos de 72 horas y costó, sin contar el precio del servicio de transportación, 105,68 dólares (28.665 pesos cubanos, según la tasa en el mercado informal el 19 de diciembre).

En su mesa en un apartamento de Regla, donde vive con su hija, su madre, su tía, su esposo y su suegro, Masiel tendrá lomo de cerdo (tres libras a 13,48 dólares), costillas de cerdo (tres libras a 20,13 dólares), cóctel de camarón (1kg congelado a 10,11 dólares) y, a falta de turrones, guayaba (920gr a 5,78 dólares) con queso (tres kilogramos de Gouda a 36,10 dólares). 

Desde la misma plataforma, la habanera también recibió dos paquetes de un kilo de arroz (a 1,85 dólares cada uno), frijoles negros (una libra y media a 1,78), una bolsa de yuca ya pelada de 2,3 kg (6,49 dólares), y aceite de girasol (una botella a 3,11).

Pocas horas después de que el Partido Comunista de Cuba (PCC) admitiera el fracaso del paquetazo económico de la Tarea Ordenamiento, aplicado a partir de enero de 2021 y que significó una sangría para el bolsillo de los cubanos, Alejandro Gil, ministro de Economía, anunció que el país registrará una contracción del producto interno bruto (PIB) en 2023 de hasta un 2%.

Desde Camagüey, donde una libra de cerdo se compraba el 19 de diciembre a 500 pesos la libra, Katia, logopeda con salario de 5.060 pesos, ha renunciado al asado del pernil de puerco. "A mi madre le regalaron dos conejos hermosos criados en el patio de una amiga y ahí están reservados para la Nochebuena y el 31", dice.

"Tendremos también arroz congrí, yuca con mojo, ensalada de tomate y dulce de frutabomba", añade esta madre soltera camagüeyana, que vive con su madre sin pensión y un adolescente. Ella ha borrado de su mente, con toda intención, cuánto le cuestan, no las dos cenas del fin de año, sino la comida de todo el mes.

"Si no fuera por la ayuda de amigos de mi madre, de hermanos de la iglesia que tienen espacio en el patio y siembran para autoconsumo, no sé cómo haríamos para sobrevivir a los precios de hoy", dice.

De vuelta a La Habana, en Alamar, Yanela cuenta que comerá un pedacito de cerdo el 31, cuando se reúnen en su casa sus dos hermanos con sus respectivas familias para despedir el año juntos, a pesar de las calamidades.

"Logré comprarla el otro día a 450 pesos, pero ya hoy el precio no es el mismo, y en las ferias que se hacen cada año para despedir el año ya dijeron clarito que no habrá puerco. Entre todos asumimos el costo de la cena porque si dependiera de mi sueldo comeríamos picadillo", asegura esta mujer que tiene el salario mínimo de 2.100 pesos y sus compras no son en las tiendas estatales en MLC ni en las MIPYMES, sino en el agromercado o puestos de venta callejeros.

"Imagínate, aquí la libra de frijol negro está en 500 y hasta 600 pesos, la yuca a 50 pesos, el tomate a 80, el arroz a 250, una mano de plátano burro cuesta 120, el plátano macho o de freír cada uno 40 pesos, una col entera pequeñita son 150 pesos, y una grande hasta 220 pesos, el boniato, a 65 la libra", enumera.

Solo en cerdo, frijoles, arroz, yuca y plátano burro para una cena la cuenta llega a casi 6.700 pesos, el triple del salario de Yanela.

"Mi hermano Leo dice que se murió la tradición cubana, o mejor dicho, que la mataron", añade, en referencia al cerdo entero que solían asar en una púa hace pocos años.

Rafael, el otro hermano de Yanela, quien reside en San Miguel del Padrón, dice a DIARIO DE CUBA que en ese municipio "casi nadie tiene carne de cerdo y los que la tienen venden caro".

El 20 de diciembre andaba una libra de bistec a 700 pesos y el pernil en algún puesto a 550 la libra y en otros a 600 y hasta 700. "Eso es hasta hoy (20 de diciembre), mañana puede subir y es lo que se avecina", estima.

"Damos gracias que tenemos el pedazo para asar en la cazuela. Somos conscientes de que hay familias que ni eso", lamenta.

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3 comentarios

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Profile picture for user Plutarco Cuero

Feliz Na’ de Na’
Feliz Na’ de Na’
Feliz Na’ de Na’
Prospero Año
y Na’ de Na’

Con una comida al día, en el mejor de los casos, ¿para qué hablar de cena?

Profile picture for user JCAleman

La tradición fue aniquilada hace 6 décadas cuando el Narco en Jefe prohibió toda celebración navideña que consideraba rezago del pasado capitalista y que afectaba la zafra de los 10 millones.