El expresidente de Bolivia Evo Morales (2006-2019) fue excluido de la nueva dirección nacional del oficialista Movimiento al Socialismo (MAS), conformada este domingo en un congreso impulsado por los seguidores del Gobierno de Luis Arce, en la ciudad de El Alto, informó la agencia EFE.
"Evo Morales es el expresidente del instrumento MAS, hay un nuevo presidente que es mi persona", indicó Grover García, quien fue electo como líder del partido y es representante de la Confederación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de Bolivia, organización afín al Gobierno boliviano.
García manifestó, tras tomar juramento como nuevo presidente del MAS, que "ha concluido la dedocracia y la discriminación" y que en los próximos 90 días se llamará a un congreso para cambiar los estatutos del partido y "refundarlo".
Más de 6.000 militantes del MAS asistieron al polideportivo Héroes de Octubre en El Alto, ciudad contigua a La Paz, en donde después de tres días de reuniones el partido oficialista eligió una nueva directiva, dejando fuera a Morales.
"Yo no puedo estar con Evo Morales. Él es un expresidente que seguramente debe estar en el Chapare, nosotros vamos a trabajar con las organizaciones sociales y vamos a apoyar de forma contundente la gestión de Lucho (Arce)", dijo García a los medios de comunicación.
Asimismo, el nuevo líder del partido oficialista expresó que "las movilizaciones son contra el pueblo, contra las familias y no es correcto", en respuesta a las advertencias de los sectores cercanos a Morales de bloquear carreteras en protesta contra la reunión política de los afines al presidente.
Morales y sus seguidores calificaron de "ilegal" este cónclave impulsado por el Gobierno, alegando que solo el exmandatario, como líder máximo del MAS, podía convocarlo.
En la víspera, Morales advirtió en un mensaje a sus seguidores en la región de Cochabamba que será candidato presidencial de su partido para las elecciones presidenciales de 2025, "a las buenas o a las malas". Esto a pesar de que un dictamen del Tribunal Constitucional Plurinacional boliviano, promulgado en diciembre de 2023, señala que la elección indefinida "no es un derecho humano", como pretendía Morales.
El bloque del MAS que apoya al expresidente convocó su propio congreso para el 10 de julio en la población de Villa Tunari, en el Trópico de Cochabamba, su principal bastión político y sindical.
Arce y Morales están distanciados desde 2021, y el año pasado sus diferencias se profundizaron por la realización de un congreso nacional del partido en el que, en ausencia del mandatario y de sus sectores leales, el expresidente fue ratificado como líder del MAS y nombrado "candidato único" para las elecciones de 2025.
Arce no asistió a ese encuentro al considerar que las organizaciones sociales, base del partido, no estaban debidamente representadas. Las tensiones aumentaron después de que el órgano Electoral Plurinacional decidiera anular el congreso de 2023 e instruir que se convocara a uno consensuado, algo en lo que tampoco se pusieron de acuerdo ambas facciones oficialistas.
A finales de marzo, en una entrevista con EFE, Morales afirmó que habrá una "convulsión" en el país si se inhabilita su candidatura presidencial para los comicios de 2025. "Si inhabilitan a Evo va a haber una convulsión. Si quiere eso, pues eso va a ser la responsabilidad del Gobierno (...) ese es mi cálculo, soy sincero", advirtió.
Evo Morales afirma que será candidato a las elecciones presidenciales de 2025 'a las buenas o a las malas'. ¡UUuuaaAAY que miedo! Lo que el pendejo ese diga, al pueblo le entra por un oído y le sale por el otro. El no tiene cojones para enfrentarse a todo un pueblo.