"Ni una menos", "Vivas nos queremos", son algunos de los mensajes que acompañan este Día Internacional de la Mujer a la plataforma independiente Yo Sí te Creo en Cuba, que hizo recuento en su página oficial sobre los feminicidios ocurridos y confirmados en 2020 y en lo que va de 2021.
Este grupo feminista lleva adelante un observatorio para registrar estos hechos de violencia contra las mujeres desde 2017. Es la primera plataforma independiente de apoyo y acompañamiento a víctimas de violencia machista en Cuba y para ello ha establecido varios canales que funcionan. Aboga además por una ley integral y refugios para mujeres en situación de riesgo.
Sin embargo, el activismo de mujeres y por las mujeres en la Isla es mucho más amplio. No se circunscribe a la Federación de Mujeres Cubanas (FMC), controlada por el Gobierno, y de cuyos supuestos éxitos hace alarde la diplomacia cubana en la escena internacional.
La Alianza Cubana por la Inclusión, actualmente en una campaña por los derechos de las mujeres rurales, la Red Femenina, Las Marianas, las Damas de Blanco, son organizaciones que defienden los derechos de las mujeres en la Isla y que por su postura de confrontación a las políticas del régimen han sufrido represión.
Hace más de un año representantes de algunas de estas organizaciones luchan por tres demandas básicas dentro de la campaña de género #UnidasPorNuestrosDerechos, en medio de acciones de hostigamiento, detenciones y amenazas de cárcel.
Sus reclamos, entre estos la tipificación de la violencia de género dentro del Código Penal cubano, la formación de los funcionarios públicos que atienden los casos de violencia machista y la actualización de las estadísticas de feminicidios, siguen en el aire por la falta de voluntad del Gobierno.
El activismo cubano llega al 8 de marzo, además, con cuatro mujeres que sufren prisión política en las cárceles cubanas en medio de una creciente discriminación política.
Melkis Faure Hechevarría, condenada a seis años y siete meses en junio de 2016; Maité Hernández Guerra, acusada de atentado y en prisión provisional desde septiembre de 2019; Keilylli de la Mora Valle, condenada a un año y seis meses por los supuestos delitos de desacato, resistencia, propagación de epidemia y desobediencia; y Aymara Nieto Muñoz, sentenciada a cuatro años por atentado y daños.
Las cuatro mujeres están incluidas en la lista de presos políticos de Cuban Prisoners Defenders. Dos de ellas, De la Mora Valle y Nieto Muñoz, siguen encerradas a pesar de ser casos con medidas cautelares concedidas por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
Mientras, decenas de activistas cubanas siguen sufriendo la violencia política, exacerbada en los últimos meses por campañas de criminalización a raíz de los sucesos del 27 de noviembre de 2020 frente al Ministerio de Cultura.
Felicidades a todas ustedes las mujeres cubanas. Ustedes sigan luchando, pero ese camino lo veo tan largo como los 60 años que tienen de abuso.