"Tú no te puedes imaginar lo que es hacer una película sin dinero", dijo el cineasta cubano Rolando Díaz como preámbulo de una conversación con DIARIO DE CUBA sobre el complejo proceso de producción de su largometraje Adiós Cuba.
"Esta es una película, digamos, de solidaridad, de amor, de comunidad, y yo estoy aquí a pecho", añadió el director de Los pájaros tirándole a la escopeta.
En la obra de Rolando Díaz subyacen el humor y las historias profundas, con personajes muy trabajados y la sensación de que, en cada largometraje de ficción, en cada documental, en cada cortometraje, está la esencia de esa Isla que, a pesar de llevar más de 30 años fuera de Cuba, no desaparece de sus palabras y sus películas.
"¿Quién no ha dicho adiós a Cuba?", se pregunta el director y de esa pregunta surge un argumento, la base del filme en preparación, que arrancará su rodaje el 16 de abril, con la ciudad de Valencia como escenario principal, aunque también se filmarán breves escenas en Estados Unidos.
Caridad, el personaje protagónico de Adiós Cuba, que será interpretado por la actriz Yuliet Cruz, "es una persona que está angustiada por crear una obra de teatro a toda costa, contra viento y marea", explicó Díaz. "Y eso es lo que, de alguna manera, muchos artistas cubanos, no solo yo, hemos tenido que hacer. Sobre todo cuando nos referimos al tema cubano".
Sin embargo, hacer cine es costoso y sí, "Adiós Cuba tiene un sentido comunitario", dijo Rolando Díaz. Para que sea feliz la meta de esa "carrera de maratón" con la que el director compara el filme, es necesario tener un presupuesto que permita un desarrollo decoroso del arte cinematográfico.
"Lo único que tengo a mi favor es que yo estoy seguro de que la voy a hacer", dijo Díaz, y explicó la importancia del crowdfunding que ha organizado, junto al equipo de la película, para juntar los fondos necesarios.
"Tenemos un presupuesto mínimo para hacer esta película independiente. Y la vamos a hacer. El equipo va a darlo todo. Pero necesitamos la mejor película posible. Por ello voy (vamos) a convocar una ponina", escribió el director en su perfil de Facebook.
"Todos los que aporten serán miembros del equipo de Adiós Cuba y aparecerán en una lista en los créditos del filme. Porque Adiós Cuba es una película de nuestra comunidad. Los animamos a que, partiendo de diez dólares o euros, llegando hasta donde deseen o puedan, impulsen Adiós Cuba hasta el final", agregó.
"Hay gente de muchas partes que me escribe, que quieren la película, y muchísima gente la está esperando ya, y me dicen que qué bonito proyecto. Esta es una película básicamente de ficción, con elementos del cine documental, pero es ficción, y se mueve en torno a la idea del vaciado de la nación, que es lo que le preocupa a mucha gente", dijo el director de Melodrama.
"A mí esta película me sale, te lo digo realmente, del alma, en el sentido dramático de cómo se está vaciando la nación. Esta avalancha de jóvenes, básicamente, de jóvenes inteligentes y talentosos que son más de medio millón. Eso es lo que me preocupa. Más allá de las ideas políticas, me preocupa cuál es el nivel de desilusión con el proyecto de una nación que todo el mundo abandona", continuó.
¿Es verdaderamente posible decirle adiós a Cuba? ¿Cómo hacerlo? ¿Cómo continuar siendo una criatura de Isla? Se preguntan muchos de los cubanos que se van, y así piensan también los que se quedan y "yo creo que no, con sinceridad, creo que en la mayoría de los casos no es posible decirle adiós a Cuba", dijo Rolando Díaz.
"Yo soy de los que piensan que incluso personas que creen que le han dicho adiós definitivamente y han cortado todos los lazos, siguen teniendo algo que ni ellos saben que lo tienen y es un sentimiento de pertenencia. Fíjate que, en este caso, la gente logra confundir y politizarlo todo, y yo me siento muy alejado de los extremos: yo creo que los sentimientos van mucho más allá de eso", dijo.
"Y creo que los sentimientos del lugar, con quién te relacionaste, qué amigo tuviste, qué novia tuviste, o qué tipo de relación estableciste con tu propia vida, con el lugar donde tú naciste, es algo orgánico, natural e inherente a cualquier ser humano. Y yo creo que ese lazo, mucho más si eres isleño, es casi irrompible. Yo no voy a negar que pueda haber algún caso de ruptura realmente definitiva, pero a mí me parece casi imposible. Yo llevo 32 años fuera de Cuba y verdaderamente ahí está la Isla, ahí están mis memorias, ahí está la Orquesta Melodía del 40, mis primeros amigos, mi barrio de Luyanó, todo lo que viví en Santo Suárez, incluso los malos momentos, porque los recuerdos se nutren de malos momentos, de buenos momentos, de alegrías y de tristezas. Es el lugar donde tú has hecho tu vida. Hay personas que no se dan cuenta, pero siempre lo tienes dentro", dijo el cineasta, que define a la nostalgia como un importante punto de anclaje de Adiós Cuba.
En cuanto a su relación con la censura, el director de Redonda y viene en caja cuadrada, que ha tenido problemas de este tipo dentro de Cuba, dijo: "Yo creo que la ilusión, el deseo de dejar constancia de lo que está pasando, es inevitable en todos los que seguimos intentando hacer cine cubano donde quiera que esté la gente. Los cineastas que quedan todavía dentro de Cuba, y los que están regados por medio mundo, intentando hacer cine cubano todavía, intentando expresar la realidad cubana de alguna manera, intentando hacer cine con lo que está sucediendo en Cuba, yo creo que nos planteamos hacer nuestras obras sin pensar en si esa película será exhibida o reconocida en Cuba oficialmente".
La elección de la actriz Yuliet Cruz para interpretar el personaje de Caridad, centro de la película, despertó mucha expectación en las redes sociales. Sobre este tema Rolando Díaz dijo: "A la hora de proponerle el personaje a Yuliet yo no estaba pensando en la popularidad que podría traer a la película. Cuando uno se vincula artísticamente a un proyecto, no suele pensar en esas cosas, sino que piensa artísticamente en la calidad interpretativa de la actriz que elige, para que pueda representar la película que uno quiere. Eso es lo que prima, básicamente. Y aquí venía todo junto en el paquete, porque resulta que Yuliet es una actriz mucho más popular, incluso, de lo que yo mismo concebía. Es un privilegio poder contar con ella, y la decisión viene dada por la calidad interpretativa que Yuliet puede ofrecer en Adiós Cuba".
Para cada cineasta cubano que vive y trabaja fuera de Cuba hay siempre una pregunta obligatoria, una pregunta que, por supuesto, le hizo DIARIO DE CUBA a Rolando Díaz.
¿Volverías a filmar en Cuba? "Yo la deriva cubana no la comprendo, para mí la nación va por un camino inexplicable, el camino económico, el camino político. Llevo mucho tiempo viviendo fuera de Cuba y, si tú me preguntas, si te respondo con sinceridad, no me lo planteo. No me planteo volver a filmar en Cuba. Tengo un proyecto futuro cuando termine Adiós Cuba, que es mi gran pasión, una comedia que quiero hacer aquí, con un tema mezclado entre España y Cuba, y en todo eso me van a coger los 80 años, y ya los 80 son muchos años".