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Cine

Cineastas cubanos sobre la nueva dirección del ICAIC: 'No es su presidencia, sino la subordinación a la burocracia'

Los artistas señalan que Alexis Triana es un funcionario del MINCULT que 'ha sido parte activa' de la tendencia que cuestionan.

La Habana
Ilustración publicada por los cineastas junto a su declaración.
Ilustración publicada por los cineastas junto a su declaración. Asamblea de Cineastas Cubanos/Facebook

La Asamblea de Cineastas Cubanos (ACC) afirmó este domingo que el problema del Instituto Cubano del Arte e Industria Cinematográficos (ICAIC) "no es su presidencia", a propósito del reciente cambio en la dirección de la institución, reportó la agencia EFE.

La agrupación independiente señaló que el modelo industrial, financiero y artístico del ICAIC ha colapsado. "No se trata entonces de a quién colocas al frente, sino de lo que representa y proyecta", señaló la ACC tras el reciente anuncio del Ministerio de Cultura (MINCULT) sobre el nombramiento del periodista Alexis Triana (connotado comisario cultural), como nuevo presidente del ICAIC.

El grupo de cineastas independientes señaló en su declaración que Triana es un funcionario del MINCULT que "ha sido parte activa y consciente de la tendencia que los cineastas hemos cuestionado". Sin embargo, la organización matizó: "Mucho más que su persona (Triana), se trata de un método".

"El ICAIC como centro de ese sistema controlado desde hace décadas por el MINCULT —continuó la declaración de la ACC— ha sido prácticamente destruido, en gran medida, por esos mismos dirigentes que ponen y quitan presidentes, sin asumir que ellos no son el verdadero problema."

La ACC subrayó que el problema del ICAIC "no es su presidencia, sino la subordinación de todas sus estructuras a una burocracia cultural que lo paraliza y anula. Todas las estructuras que conforman el sistema de cine en Cuba están quebradas, debilitadas".

Asimismo, los artistas argumentaron que "sin autonomía, sin apenas creadores en su nómina, sin salas de cine, sin recursos, sin una verdadera proyección internacional, poco puede hacer (el ICAIC) para proteger a los cineastas frente a ese sistemático ejercicio de intimidación y control, incrustado en el ADN mismo de la política cultural y cívica cubana".

La ACC cree que "no es posible que la solución a la crisis del cine cubano recaiga en las mismas manos que la han generado (...) Bajo esa premisa, quien presida el ICAIC será solo una circunstancia". También remarcó que "si no cambia ese patrón de ordeno y mando, si no se establecen relaciones de respeto, voluntad de entendimiento y de diálogo horizontal, seguirán agravándose nuestras diferencias como cineastas y como cubanos".

La Asamblea recalcó que su existencia "no depende de quienes se niegan a encarar nuestros verdaderos problemas". El grupo pretende continuar trabajando "por ese cine complejo, diverso, inclusivo, polémico y plural en el que creemos".

La declaración de la ACC, publicada en Facebook, está firmada por 89 creadores.

El malestar generado por la censura al documental La Habana de Fito, dirigido por Juan Pin Vilar, y la posterior emisión de una versión no definitiva de esa cinta en la televisión estatal, sin la autorización de su realizador, marcó la aparición de la ACC.

El "desacuerdo" en ese entonces se manifestó a través de una carta abierta suscrita por más de 600 profesionales del sector, entre ellos el director Fernando Pérez, los actores Jorge Perugorría y Luis Alberto García. Desde entonces, más de cincuenta representantes del gremio se han reunido con autoridades del MINCULT, el ICAIC, y el Partido Comunista de Cuba para abordar la polémica y otros asuntos, como la demanda de una Ley de cine.

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