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Ganaderia

Los tribunales juzgaron a 1.615 cubanos por 'sacrificio ilegal de ganado mayor y tráfico de sus carnes'

Solo un 10% escapó de la cárcel y el 78% fue sancionado con hasta 15 años de privación de libertad, según datos oficiales de los primeros ocho meses de 2024.

La Habana
Vacas de Pinar del Río.
Vacas de Pinar del Río. Cubadebate

Los tribunales cubanos juzgaron hasta agosto de este año a 1.615 personas por "conductas asociadas al delito de sacrificio ilegal de ganado mayor y tráfico de sus carnes", según datos oficiales publicados a raíz del denominado "ejercicio de control del uso y tenencia de la tierra y la ganadería" que el Gobierno comenzó a realizar en marzo, informó este martes el diario oficial Granma.

Según el medio, al 90% de los sancionados se le impuso penas privativas de libertad, de ellos el 78% fue condenado con sanciones de hasta 15 años, lo que pone de manifiesto el rigor en el tratamiento a esas conductas, mayor que el se aplica a algunos delitos que ponen en riesgo la vida humana.

El reporte añadió que, en correspondencia con las disposiciones del Código Penal, a los acusados por estos delitos también se les aplicaron –en atención a las circunstancias concurrentes en los hechos– la confiscación de bienes u otras sanciones accesorias dispuestas en la ley.

Según Granma, en los casos en que procedía se acordó la obligación de los declarados responsables de abonar a los afectados el monto de los perjuicios causados.

El primero de marzo del presente año comenzó el ejercicio de control del uso y tenencia de la tierra y la ganadería, que previó visitar a los más de 80.000 tenentes de ganado, tanto naturales como jurídicos.

Las autoridades han alegado que este el ejercicio busca "ordenar la masa ganadera y lograr una mayor disciplina en los campos, de modo que cada productor sepa la responsabilidad que tiene como criador de ganado con el control, el cuidado y la declaración de los eventos".

El Ministro de la Agricultura, Ydael Pérez Brito, al informar en el programa oficial Mesa Redonda sobre los primeros resultados de esta acción de control, achacó los pobres rendimientos de la ganadería al hurto y sacrificio. También dijo que existen otros tipos de ilegalidades como las compraventas ilegales, los animales sin marcaje, así como las faltas y muertes que no contaban con la documentación adecuada.

El Gobierno dice que persigue a través del enfrentamiento a delitos como el sacrificio ilegal de ganado mayor y el tráfico de sus carnes "recuperar poco a poco la masa ganadera", pero son sus fracasadas políticas agropecuarias las que promueven estos hechos y hunden más la que fue una vez una industria floreciente en la Isla.

La intromisión del Estado en la gestión de los ganaderos, como pasa con los agricultores, les cierra toda posibilidad de actuar con autonomía. Sin los recursos necesarios y en condiciones precarias deben cuidar las reses y cultivos muchas veces con riesgo para sus vidas debido a la agresividad de los que roban el ganado. 

En 2023, varios campesinos denunciaron en reportajes publicados por DIARIO DE CUBA el incremento del hurto y sacrificio de ganado en el país. También criticaron que la Policía exigía varios testigos de los hechos para detener a los presuntos ladrones, incluso si habían sido capturados in fraganti. Esta práctica policial ha dotado de cierta impunidad a los delincuentes.

Como señaló DIARIO DE CUBA en un análisis en septiembre de 2023, los ganaderos cubanos se encuentran controlados y desprotegidos y han sido convertidos en delincuentes. Ningún productor de carne en Cuba es realmente propietario de sus animales. Lo demuestra el hecho de que necesitan autorización del Estado para hacer las ventas o los sacrificios. A esto se suma que muchas veces sufren por el retraso en los pagos que deben asumir las empresas estatales.

En abril de este año, hasta el diario oficial Granma reconoció que en Cuba "se han destruido las áreas ganaderas" y con ellas la industria antiguamente floreciente. La ganadería en Cuba "anda mal porque llevamos muchos años permitiendo que se destruya", dijo el campesino Miguel Valdés Carmenate en una entrevista con el periódico.

"Se han destruido las áreas ganaderas; no podemos llegarle a la ganadería con todos los medicamentos, las sales minerales que ayudan al metabolismo de las vacas. El bloqueo ha existido la vida entera, y no te digo que no haya afectado, pero con bloqueo y todo hubo ganadería en este país", dijo Valdés Carmenate.

"La ganadería en Cuba anda barranca abajo y, si no atajamos a tiempo el deterioro, seguirá hundiéndose. Solo con agua los animales no producen leche, aunque el agua sea el 87% de la leche", advirtió.

La solución a la tremenda crisis que sufre el sector agropecuario en Cuba necesita transformaciones de propiedad, empresa privada, énfasis en el mercado, una institucionalidad de apoyo y garantías jurídicas al privado, como han sostenido varios economistas.

 

 

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2 comentarios

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Independientemente de las necesidades que apremian hoy en Cuba, si ha habido un resquebrajamiento en la penalidad del robo y sacrificio de ganado, quizás responda a que la policía en los 80’s y 90’s estaba menos ocupada en delitos políticos o saben que la situación actual está más dura y se hacen de la vista gorda.
En los 80’s la pena por sacrificio de ganado no bajaba de 10 a 15 años de cárcel, aunque fuera el dueño de la res. Mi suegro tenía vacas y cuando mataba algún ternero o añojo, después de lograr evadir los inventarios, nunca permitió que sus hijos y yo lo ayudáramos, pues las penalidades eran altas y el lo hacía sólo después de tomarse una botella de Coronilla, por si lo cogian sirviera de atenuante. Mi difunta mamá se vió envuelta en un juicio con 72 años en las costillas, por haber comprado 5 libras de carne y el intermediario la chivateo, salió con 70 pesos de multa, considerando su edad y que nunca había tenido antecedentes penales. Hoy están más ocupados en política que

en delincuentes.en aquellos años no hacía falta tres testigos para ser condenado,aunque fueras el dueño.
Aunque esos años fueron muy injustos con la severidad del castigo, el matarife y ladrón se cohibía un poco más.