El deterioro de la agricultura cubana continúa profundizándose, así como las quejas de los productores y las crecientes insatisfacciones con la gestión gubernamental del sector. En tal sentido, la acumulación de impagos a productores de arroz y leche, junto a los inconvenientes de la bancarización, fueron las principales preocupaciones de los campesinos de Cienfuegos, durante una asamblea reciente, desarrollada como parte del proceso del decimotercer congreso de la Asociación Nacional de Agricultores Pequeños (ANAP), informó el periódico provincial 5 de Septiembre.
Juan Carlos Durán Rodríguez, propietario de ganado y tierra, expuso que "desde hace tres meses dejaron de pagarnos la moneda nacional, y nunca nos han retribuido la divisa pendiente por sobrecumplimiento", aun cuando él y su hijo cumplen con las cifras pactadas en la entrega de leche a la Empresa de Productos Lácteos Escambray, entre 13 y 18 litros diarios.
"Al no disponer en tiempo de este dinero, casi estamos obligados a declinar de nuestros deberes, porque vivimos de la producción lechera; así mantenemos a la familia, pagamos la electricidad e invertimos, por ejemplo, en los cercados, algo bien caro, pues un rollo de alambre cuesta hasta 18.000 pesos", dijo.
"Ya el año pasado estuve cinco meses sin cobrar, y ahora lo mismo. Es una situación muy difícil, porque yo soy un productor grande, poseo más de tres caballerías de tierra, con costos de producción altos que rondan los cuatro millones de pesos. Además, tengo familia, equipos que arreglar, y la reparación hoy de un tractor cuesta entre 200.000 y 300.000 pesos. A mí no me importa el precio, diez pesos más o menos no perjudican; el daño es que no paguen, porque eso frena la producción, y uno vive de lo que produce”, afirmó Pedro López Izquierdo, quien siembra arroz, caña y cultivos varios, y es una de las víctimas de los impagos de la Empresa Agroindustrial de Granos.
Asimismo, Taymí Torres Machín, presidenta de la Cooperativa de Créditos y Servicios (CCS) Pedro Filgueiras Solís, dijo que "los problemas con los recursos y los impagos de las empresas provocan una disminución sensible de las producciones".
"De otro modo, tuviésemos incrementos en la producción de arroz, pero la realidad es que no vemos soluciones y los campesinos están bien disgustados con estos temas. Si en 2018 aportamos 68.000 quintales (q), en la reciente campaña entregamos solo 160 toneladas", equivalentes a 1.600q.
Además, otro de los grandes problemas de los campesinos cienfuegueros es la bancarización, toda vez que "aquí no existen unidades grandes para realizar caja extra", expresó Durán Rodríguez. "Vas a la bodega y nunca hay dinero, en el banco tampoco tienen fondos, y esto limita mucho, porque nosotros tenemos que pagar las cosas en efectivo. El combustible, cuando aparece 'por la izquierda', es a 8.000 pesos en mano", añadió.
"Nosotros radicamos en una zona de silencio, sin cobertura de telefonía móvil ni posibilidades de emplear las plataformas de pago; incluso, la mayoría de los campesinos ni siquiera cuentan con celulares inteligentes. Pienso que el país debiera proyectarse al respecto, porque nuestros asociados sí necesitan el efectivo para elevar los volúmenes de producción", indicó Torres Machín.
Recientemente, el periódico Adelante, medio de prensa oficialista de Camagüey, publicó un artículo sobre el desastroso panorama de la agricultura y la ganadería en el territorio en el que indicó que la falta de efectivo, un problema derivado de la Tarea Ordenamiento y agudizado por la bancarización, "no puede tomarse como escudo para incumplir en algo tan serio como la alimentación del pueblo, mucho menos la leche", pero no mencionó lo onerosos que son para los campesinos la falta de recursos materiales para trabajar, los frecuentes impagos y deudas del Estado para con estos productores y las políticas fracasadas del Ministerio de Agricultura, que mantienen atenazadas a todas las fuerzas productivas del país bajo control estatal.
*** por-fuera-de-los-canales-del-Estado.
Los ciudadanos organizados pueden establecer contratos por anticipado con los campesinos. El ciudadano, primero invierte en el pienso que necesita el campesino; y después recibe una cantidad proporcional a la inversión.
El ministerio de agricultura cubano debía moverse hacia la fortaleza de la Cabaña, estaría más acorde con sus prácticas feudales.
El de Cuba es un sistema esclavista en un 100%. En el siglo XIX le pagaban a un esclavo, el cual reunía y compraba su libertad. Esta esclavitud sobrepasa a aquella pues el esclavo no tiene esperanzas de ser libre algún día.