La cadena española Roc Hotels administrará su primero hotel de 5 estrellas en Cuba tras firmar un acuerdo con el grupo turístico estatal Gaviota, del conglomerado empresarial de los militares GAESA.
El Roc Casa del Mar está ubicado en Cayo Santa María, al norte de Villa Clara, y se trata de una instalación antes conocida como Ocean Casa del Mar, pero que ahora será administrada y comercializada por la firma mallorquina, reportó la agencia oficial Prensa Latina.
El hotel será inaugurado el próximo 27 de enero, y gracias a sus 800 habitaciones Roc Hotels pasará a gestionar 2.077 dormitorios en la Isla, lo que le permite posicionarse entre las cinco primeras hoteleras extranjeras en Cuba por gestión de activos, por detrás de Meliá, Blue Diamond e Iberostar.
Con este, Roc Hotels tendrá cinco grandes establecimientos en Cuba: tres en Varadero, uno en La Habana y este en Cayo Santa María.
El anuncio del nuevo hotel se produce al unísono con la cancelación por la propia firma española del contrato de administración de otro hotel en Lagunas del Mar, también en Cayo Santa María, que según el reporte "no pudo ser inaugurado debido a la pandemia de Covid-19".
El Gobierno cubano busca levantar el muy deprimido sector turístico, que no ha logrado el repunte esperado después de la pandemia. Ni siquiera la reapertura de los vuelos desde Rusia, vedados tras el inicio de la invasión de Ucrania por la prohibición de Europa y Norteamérica de usar su espacio aéreo a las aerolíneas de Moscú, consiguió estimular el arribo de veraneantes.
La Habana apuesta incluso a entregar la administración de destinos turísticos completos a empresas extranjeras, como hiciera con Blue Diamond y Cayo Largo del Sur. Esa firma canadiense posee condiciones de exclusividad tanto sobre todas las instalaciones hoteleras de ese islote como permisos especiales para importar productos exclusivos.
El turismo supone la segunda mayor entrada de divisas de la economía cubana, exceptuando las remesas. La industria sin humo se ubica en el PIB cubano solo por detrás de la exportación de profesionales, sobre todo médicos, a través de cuyos salarios el Gobierno obtiene pingues beneficios.
Pese a los pronósticos optimistas de las autoridades, que anunciaron un estimado de 2,5 millones de visitantes en 2022, entre enero y noviembre Cuba recibió alrededor de 1,3 millones de viajeros internacionales, cifra por debajo de la meta de 1,7 millones, ajustada a la baja a partir del número inicial.
Para este año, otra vez con optimismo, La Habana prevé la llegada de 3,5 millones de turistas, aún por debajo de los niveles de 2019.
Muchos hoteles, pero si caminas unos cientos de metros te encuentras con las fosas salidas,basura.excrementos.Estos verdeolivos ignoran en su afán de hacer billetes que el turista no va repetir a un lugar insalubre.No hablemos de la baja calidad de su servicio y trato al visitante extranjero, sobre todo si viene con billete,no paquetes de todo incluido.Me pregunto que visitante va a pernoctar las 24 horas en una habitación.La capital está llena de instalaciones hoteleras y de m....y una cosa no conlleva con la otra en cuanto a turismo se refiere Allá los incautos embarcados por las fotos paradisíacas de playas o bellos edificios restaurados del casco histórico, mulatas y mulatos semidesnudos bailando en ropa carnavalesca.En fin pura tramoya enversionistas que ignoran la realidad cubana.
Caballero, y los buitres extranjeros nunca faltan, ni aunque Cuba se sepa hundida en pura mierda.
Un paraíso en un infierno. Si el avión donde viajas hacia el sur desde los Estados Unidos o norte de Latinoamérica este sobrevuela esas instalaciones, y uno puede distinguir la belleza de esa u otra instalaciones y si miran bien para llegar a ellas tienes que cruzar como un puente para llegar a ese destino y estoy más que seguro que la posta no te deja entrar si no eres extranjero o eres janitor en ese lugar.
La construcción de hoteles en Cuba sale muy barata por la mano de obra esclava, por eso, todos los países quieren construir hoteles en Cuba, haciéndose cómplices de esta infame trata de esclavos en pleno siglo XXI.
Hoteles construidos por esclavos del siglo XXI.