Tanto la subdirectora de la Dirección General de Estados Unidos del Ministerio de Relaciones Exteriores (MINREX), Johana Tablada, como el presidente del Grupo Empresarial Agrícola de Cuba, Frank Castañeda, mostraron interés en exportar alimentos producidos en la Isla hacia EEUU durante un encuentro con agricultores estadounidenses, informó el portal Cubadebate.
Durante la primera sesión de la III Conferencia Agrícola Cuba-EEUU, que comenzó este martes en La Habana, la funcionaria del MINREX Johana Tablada abogó por que los agricultores cubanos puedan vender sus producciones en el país norteamericano, pese a que estas no alcanzan ni siquiera para satisfacer la demanda de la población cubana, que atraviesa una severa crisis de escasez de alimentos.
En esa misma dirección apuntó Castañeda, presidente de la mayor empresa del sector en la Isla, quien al promocionar el ineficiente modelo agrícola del país mostró interés en exportar algunas de sus producciones a EEUU.
Ninguno de los funcionarios explicitó cuáles son los productos agrícolas que pretenden exportar a EEUU, teniendo en cuenta que debido a la escasa producción del país el Estado se ve obligado a importar cada año el 70% de los alimentos que consume la población.
Durante el encuentro, enfocado en impulsar la cooperación en el sector agrícola entre ambos países, el representante de la Coalición Agrícola de EEUU, Paul Johnson, identificó a la agricultura como uno de los sectores más importantes dentro de las relaciones entre los dos países, aunque dijo que es necesario "hacer más", informó la agencia EFE.
Pese a las limitaciones creadas por las sanciones estadounidenses hacia Cuba, en 2021 el país norteamericano duplicó sus exportaciones de pollo a la Isla, las cuales ascendieron a los 253 millones de dólares.
Cuba sufre de un desabastecimiento crónico desde hace décadas, pues usualmente escasean alimentos como la leche en polvo, los huevos, el aceite, el pan, la harina de trigo y el pollo, entre otros.
El Estado cubano mantiene desde hace más de 50 años una cartilla de racionamiento subvencionada, que, aunque ha visto muy menguada su lista de productos, todavía incluye la venta de arroz, granos, azúcar, 80 gramos de pan diarios por persona y diez huevos al mes a precios bajos.
Esta canasta básica se ha mantenido hasta el momento por el Gobierno cubano, aunque durante los debates de la Tarea Ordenamiento se anunció su posible desaparición.
Mientras tanto, su reducido contenido obliga a los cubanos a comprar la mayoría de sus alimentos en la red estatal de tiendas, a precios mayores y con una limitada variedad de productos.
Actualmente el Gobierno cubano trabaja en un grupo de transformaciones "para dinamizar la producción de alimentos", según afirmó Castañeda, para lo cual cuentan con la asesoría del religioso brasileño Frei Betto, quien reconoció que en la Isla hay "riesgo de inseguridad alimentaria".
