Los trabajadores del sector privado y los interruptos que no aceptaron la reubicación quedan fuera del adelanto salarial en Cuba

Los trabajadores del sector privado, los interruptos que no aceptaron la reubicación y quienes se encuentren de licencia laboral sin sueldo no se podrán beneficiar del anticipo salarial anunciado por el Gobierno cubano para los últimos días de diciembre, anunció la Agencia Cubana de Noticias.

Sí podrán recibir el pago los trabajadores que se encuentren en activo, quienes hayan sido beneficiados por licencias de maternidad o paternidad, así como los interruptos que disfrutan de garantía salarial.

La información, divulgada por la ACN, también indica que los productos lácteos, las conservas de frutas y vegetales, los insumos agrícolas, los rones y cervezas, así como los muebles y la ropa reciclada aumentarán su precio.

En el caso de la bodega, según la agencia de prensa oficial, la canasta familiar normada, compuesta por 19 productos, cuatro de ellos no alimenticios, tendrá un precio de 180 pesos cubanos por persona.

El día 23 de diciembre se ofertarán dos libras de arroz en dichos comercios con un nuevo precio, el cual la prensa no ha especificado, y luego del día 30 se comenzarán a comercializar los productos de la canasta del mes de enero con los precios establecidos en el reordenamiento monetario.

La Empresa Provincial de Comercio de La Habana anunció en sus redes sociales que a partir del próximo año todos los residentes en la capital podrán pagar los productos de la bodega a través de internet.

Esta nueva forma de pago será activada junto al proceso de unificación monetaria y cambiaria, con el cual se elevarán los salarios de los cubanos, pero también los precios de la mayor parte de los productos y servicios.

Pese a que los cubanos han expresado su descontento con las medidas en diferentes plataformas digitales, el conocido como "zar de la economía cubana", Marino Murillo Jorge, afirmó que "la llegada del día cero está respaldada por el estudio de las opiniones del pueblo, entre ellas las relativas a la tarifa eléctrica, que ha sido una de las medidas que más ha generado criterios".

Mientras el precio de la electricidad crece un 500%, el precio de la canasta normada —lo que compran los cubanos con la libreta de racionamiento—, que viene siendo un gasto fijo igual que el de la luz, sube más del 1.500%, y el precio del gas manufacturado se dispara al 2.200%.