Las empresas de Rusia podrán vender productos pecuarios a Cuba, entre ellos carne de pollo, cerdo y vacuno, anunció el Servicio Federal de Supervisión Veterinaria y Fitosanitaria (Rosselkhoznadzor), organismo federal de la nación euroasiática que supervisa la calidad de esos productos.
Según una nota de la agencia rusa Interfax, la decisión deriva de la auditoría realizada al sistema de control y supervisión sobre la producción de alimentos de origen animal de Rusia durante 2024 por el Centro Nacional de Salud Animal de Cuba.
De acuerdo con el reporte, la parte cubana reconoció el sistema de control y supervisión vigente en la Federación de Rusia.
Por ello, ahora las empresas rusas para la producción de aves de corral, cerdo, carne de vacuno y productos lácteos incluidas en el registro de exportadores local pueden suministrar libremente sus productos al mercado de Cuba.
Las producciones de cárnicos en Cuba han decrecido en los últimos años, agravando la crisis alimentaria que sufre la Isla y obligando a incrementar las importaciones de alimentos que el país solía producir en cantidades apreciables hasta la pasada década.
Y si bien La Habana acusa a EEUU de la crisis económica que viven los cubanos, lo cierto es que es este país uno de los principales suministradores de productos agrícolas y alimentos a la Isla, en especial carne de pollo y cerdo.
De manera que, ante la decisión rusa, la interrogante es si La Habana podrá pagar por esos productos mientras puede conseguirlos más baratos, si bien pagados al contado, en su vecino del norte.
Asimismo, el anuncio de Rosselkhoznadzor contrasta con informaciones de hace año y medio, según las cuales las autoridades cubanas habrían certificado productos alimenticios rusos para su venta a Cuba. Hasta la fecha se desconoce si tales bienes llegaron a la Isla.
Mas, según recuerda el medio ruso Life, "los turistas rusos a menudo expresan insatisfacción con la comida en Cuba. Las principales quejas se relacionan con la calidad y variedad, así como con la limitada oferta en hoteles y restaurantes. Algunos señalan que las porciones pueden ser pequeñas y que los productos no siempre son frescos".
Por ello, es probable que la autorización de exportación otorgada por La Habana se limite a compras para los hoteles donde se hospedan turistas de la nación euroasiática, que se ha convertido en el tercer mayor mercado emisor de la Isla y el que más crece.