Un análisis superficial de la economía cubana llevaría a la conclusión de que quienes dirigen esta isla no tienen ni idea de lo que están haciendo.
Sin embargo, eso no es cierto, porque tal análisis parte de la premisa de que esos dirigentes quieren que la economía progrese, cuando la realidad es que su objetivo principal es mantener el poder, y para ello hacen de la economía una herramienta de empobrecimiento social, depauperación cívica y dependencia individual al Estado, con lo que aquello que parecen políticas económicas fracasadas son realmente políticas muy bien pensadas para mantener la actual relación de poder.
No obstante esa verdad mil veces comprobada, hay ocasiones en que debe reconocerse que sí, que aparte de muy malvados, quienes dirigen Cuba son también bastante incompetentes incluso para sus propios intereses, pues hay que desconocer los fundamentos básicos de la ciencia económica para proponer, en las condiciones actuales de este país, un 6% de bonificación para clientes que paguen bienes y servicios mediante tarjetas o pasarelas de pago, como acaba de hacer el Banco Central de Cuba para estimular el comercio electrónico.
Y es que, aunque dentro del plan estatal de minimizar el uso de dinero efectivo es coherente dirigir la bancarización mediante incentivos, parece que llevan tanto tiempo controlando la economía vía decretos obligatorios que ya ni incentivar saben.
No entienden que, en la situación cubana de máxima escasez y carencia sistémica de competencia en la oferta, la demanda se vuelve inelástica, viéndose obligada a conformarse con aquello que encuentre, prácticamente sin importar cuán mala sea la relación calidad precio, con lo que ese 6% de bonificación al lado de la demanda no hará ninguna diferencia en cuanto a las tendencias de compra que, por cierto, ya estaban recostadas en el comercio electrónico todo lo posible, por la falta de dinero efectivo que lleva meses sufriendo el país.
Lo único que va a conseguir el Banco Central de Cuba con esta medida es disminuir en 6% su captación de dinero, lo que permitirá más circulación monetaria, con lo que —¿adivinan?— se generará más inflación.
Muy distinto sería si hubiesen ofrecido un 6% de bonificación a los comercios, es decir, a quienes están del lado de la oferta, que son quienes, bajo amenaza de decomiso y cierre, tienen que hacer un desembolso importante para adecuar sus negocios al comercio electrónico en menos de seis meses.
Es la oferta, es decir, los comerciantes, quienes más se resisten a esta bancarización porque les impide acceder al mercado negro de divisas, que es donde se aprovisionan de dólares para mantener abastecidos sus negocios. Son los comerciantes, en definitiva, los más perjudicados por la bancarización, por eso habría sido muchísimo más eficaz centrar en ellos cualquier incentivo.
Algo que, por cierto, si no fuesen tan idiotas quienes dirigen la "economía" cubana, no tendría por qué quedar ahí. Sería extremadamente rentable al castrismo, por ejemplo, subsidiar la adquisición del hardware y el software necesario para hacer viable el comercio electrónico, u ofrecer incentivos fiscales para ciertos volúmenes de facturación electrónica. Las variantes para alinear los recursos con sus intereses son infinitas, pero de tan incompetentes han hecho lo único que no debían hacer, incentivar la demanda en un país donde no hay nada que demandar.
Por supuesto, no estamos defendiendo aquí que el Gobierno haga nada de esto, lo que pretendemos destacar aquí es que, esta medida del Banco Central apunta a una carencia importante de los más básicos conocimientos económicos, lo que lleva al Gobierno a tomar decisiones estúpidas.
Y si ya es bastante malo saber que el castrismo es una banda criminal, ahora, además, debemos tener en cuenta que también es una banda de idiotas, algo preocupante pues, como el antinazi Dietrich Bonhoeffer resaltó, "la estupidez es un enemigo más peligroso del bien que la malicia. Uno puede protestar contra el mal; este puede ser expuesto y, de ser necesario, impedido por la fuerza", pero ante la estupidez perdemos certezas sobre el enemigo, se dificulta prever sus acciones, aun cuando sepamos que sus intenciones son maliciosas.
Todo eso en el techo del auto de esta foto de la " profesional " MIPYME ,de seguro con productos revendidos en moneda dura por los almacenes de GAESA,Sandrito Castro u otros les demuestra al lector,que no se está produciendo alimentos, sino lucrando para proveer de billetes a los intermediarios de Comercio Exterior para que sigan parasitando la economía y a comem... incautos que desde el exilio cayeron en la trampa.Ahora resulta que el billete no aparece y el que lo tiene no puede sacarlo.Preparense para cuando el hambre arrecie y la turba vaya a sacarle a tu negocio, se ve venir pronto.
Hasta que terminó visiblemente el gobierno de Raúl, había coherencia en la dirección; Independientemente que Cuba nunca fue dirigida con visión económica, sino política. Pero hoy el que pone la cara dirigiendo al pueblo políticamente, no es quien tiene el dominio económico. Por ello, él, sólo pone la cara, quién tiene el control y determina lo que se hace con la economía es otro. Raúl, no realizó el reordenamiento económico durante su gobierno, muy sencillo; él no quería que su persona se cogiera para eso; ya él salió de visibilidad, los que en función de intereses estén dispuestos hacerlo, que lo hagan. Y ahí está Díaz Canel y su pandilla.
El Gobierno cubano sabe siempre lo que hace; solo de pensar la forma despreciable con que se apoderó del dinero de los asistentes al Festival de música de estos días; nada se puede esperar. Ellos dicen que te van a descontar el 6%; y solo lo hacen cuando les cuadra, y al que proteste; le responde, no le responden, les resuelven o no lo resuelven; al Gobierno cubano no le interesa hacer nada a favor del Pueblo, y mucho menos a los dueños de mypimes o cualquier forma de trabajo privado. Ellos establecieron la bancarización y ya hay personas vendiendo dinero cubano; ¿Quiénes son los que venden? El propio Gobierno cubano. En Cuba no se hace nada que no lo sepan las autoridades; lo que se haga allí, es porque son las autoridades las que lo hacen o permiten.
Rafaela explica en detalles el único objetivo del cartel de Punto Cero: preservar el poder.
Para los líderes narcos del campo de concentración el pueblo cubano indefenso y en harapos no tiene ninguna posibilidad de derrotarlos, y en eso llevan razón, especialmente con la indiferencia o apoyo al socialismo de 3/4 partes del planeta.
La bancarizacion, el (des)ordenamiento, la constitución, el código de familia, las Mypimes y producción de moringa en las cooperativas, además de entretener a los sometidos, sólo busca fortalecer el control de los gánsteres en la repartición (racionamiento) de las migajas y que todo vestigio de rebeldía potencial se traduzca en escapar o en doblegarse.
“su objetivo principal es mantener el poder” sin embargo, la dictadura se apoya en el chantaje-comercial personal. El ciudadano promedio sustrae, recepta y comercia la propiedad del Estado. Esta interacción crea en las personas la identidad psicológica que asume una “deuda moral” con el Estado. Una explotación moral en forma de chantaje: (el Estado obliga a robar y a traficar con lo robado).
Me maravillo cuándo se repite hasta la saciedad, por estos lares, de “economía” cuándo se refieren a Cuba; en la isla no existe economía, ni “fundamentos básicos de la ciencia económica”; Cuba es un barracón de esclavos, una isla cárcel, una finca, un circo, en Cuba no existe ni el “estado”, aquello es una Dictadura dónde la famiglia que gobierna la pasa muy bien.
...hay mucho economista por aqui...alguien me puede analizar este video???...https://www.youtube.com/wat…
Si quieres análisis de heces fecales chancleta de baño de hospital cubano, le donas un pedacito al laboratorio y sales de dudas....
Plasta de mierda comunista: Enfócate en el articulo, no te vayas por la tangente, Herrera Carles, ese truco ya no funciona, pendejo.
La “demanda se vuelve inelástica”, y el “punto de equilibrio” se alcanza en el mercado informal. La “relación de poder” puede transformarse con mucha oferta por fuera de los canales del Estado.
Que pasaría,si turbas hambrientas empiezan a atacar MIPYMES y saqueando su contenido?....
Eso va a pasar, tarde o temprano....vea como empezó la revolución francesa, cortando la cabeza de la realeza y al final hasta Robespierre cogió cajita...
Creo amigo Newton que si no se canaliza la violencia ,el estado de caos y barbarie sobrepasará a la francesa,tendrá que intervenir la ONU o USA.
Vamos, estimada Rafaela, no exagere, que tampoco es para tanto: son solo dos semanas de incentivo, para que la gente instale en sus celulares los sistemas de pago y haga un esfuercito por aprender a usarlos. Mi duda es si, en una economia con inflación anual de casi 3 dígitos, 6% es un estímulo suficiente para el pobre infeliz consumidor. Por otro lado, e imaginando que su tesis sea válida, para que el efecto que Ud. menciona se materialice, en estos 15 días tendría que moverse para las pasarelas electrónicas de pago una cantidad de consumidores tan grande que, desde la perspectiva de "ellos", bien habría valido la pena.
el efecto combinado serán unos cuantos miles de millones de cup que pudieron recoger que seguirán dando vuelta en la circulación, si te fijas bien no digo que esta sea la causa de l ainflación, sino que viene más inflación, y es porque cada vez que pueden hacer algo para reducirla un poco, tiran por el camino contrario. Estoy convencida de que les interesa la inflación como está, al final ellos controlan los costes de producción de sus empresas y pueden aprovechar la devaluación para vender más caro y pagar salarios menores. La realidad es que para los gobiernos, sobre todo los endeudados, la inflación es hasta beneficiosa y solo se vuelve un problema cuando la gente se pone belicosa, pero aquí ya sabes, aguantamos lo que nos tiren.
?"unos cuantos miles de millones de cup que pudieron recoger"? Digamos que sean solo 1000 millones de pesos (y no "unos cuantos"). Eso significaria que se habrían hecho transacciones electrónicas por valor de 16.666.666.667 de pesos en dos semanas! Nada mal.
eso si la medida efectivamente dura dos semanas. Milton Friedman decía que nada es tan permanente como un programa temporal del gobierno