El asesor del presidente de Rusia, Maksim S. Oreshkin, cerró su visita a Cuba este jueves con la firma de un memorando de entendimiento mutuo para la concreción de la "iniciativa de inversión ruso-cubana", que fue igualmente suscrita por el viceprimer ministro cubano, Ricardo Cabrisas Ruiz, publicó el diario oficial Granma.
"Lo importante de las relaciones entre Cuba y Rusia es que existe la voluntad de avanzar. No solo la voluntad, está la decisión de hacerlo. A veces hay voluntad y falta de decisión. Otras veces hay decisión y falta de voluntad. Ambas partes coincidimos en la voluntad y la decisión", dijo Cabrisas, también recién estrenado ministro del Comercio Exterior y la Inversión Extranjera.
Según la oficial Agencia Cubana de Noticias (ACN), el documento suscrito recoge "los proyectos de negocios trasladados a la parte rusa y devenidos en la base de una etapa cualitativamente superior en las relaciones bilaterales".
Cabrisas dijo que los contactos establecidos entre empresarios y los que han sostenido los máximos dirigentes de Cuba y Rusia "están en correspondencia con el excelente estado de las relaciones bilaterales, y existe la voluntad política de ambos gobiernos de avanzar aceleradamente en la esfera económico-comercial, en beneficio mutuo de sus pueblos".
Las partes trataron los principales temas de interés para promover la participación efectiva de inversionistas rusos en la implementación del Programa de Desarrollo Económico y Social de Cuba hasta 2030, según fuentes del Ministerio de Comercio Exterior de Cuba.
Dijeron que los sectores prioritarios de interés mutuo son la energía, el turismo, la producción de alimentos, la infraestructura de la aviación civil, la agroindustria azucarera y la minería.
Cuando el pasado martes Miguel Díaz-Canel recibió a Maksim S. Oreshkin, se deshizo en elogios para Vladimir Putin y expresó la intención del régimen de llevar las relaciones económicas al nivel de las políticas.
Durante el diálogo, que la prensa de Díaz-Canel calificó de "ameno", el gobernante pidió transmitir un "afectuoso saludo" a Putin y agradeció la posición de Rusia con respecto al embargo.
"Nosotros sentimos que existe en el Gobierno ruso, y en particular en el presidente Putin, una enorme sensibilidad hacia los problemas de Cuba", dijo Díaz-Canel.
Díaz-Canel mostró su apoyo a Putin en su enfrentamiento con Occidente al visitar Rusia en diciembre de 2022, tras lo que también condenó la orden de arresto emitida contra el jefe del Kremlin por la Corte Penal Internacional, a causa de los crímenes de guerra cometidos por Moscú en Ucrania.
Más recientemente, durante una entrevista ofrecida al canal de televisión libanés Al Mayadeen, Díaz-Canel liberó de responsabilidad a Vladimir Putin de la guerra en Ucrania y culpó directamente a Estados Unidos del conflicto, además de acusarlo de "rusofobia" y "manipulación mediática".
"El Gobierno norteamericano ha manipulado el origen del conflicto, y con su enorme poderío mediático ha creado un sentimiento de desprecio hacia Rusia", dijo el gobernante.
Cuba ha recibido en los últimos meses, además del asesor de Putin, al presidente de la Duma o cámara de diputados de Rusia, Viacheslav Volodin; al ministro de Exteriores ruso, Serguéi Lavrov; al secretario del Consejo de Seguridad de Rusia, Nikolái Pátrushev, al presidente del Consejo de Negocios Cuba-Rusia, Boris Titov, y al director ejecutivo de la petrolera Rosneft, Igor Sechin.
Estas visitas ocurren tras anuncios recientes en torno al lanzamiento de una reforma de la economía de Cuba, o "cubastroika", bajo la asesoría de expertos rusos vinculados al Kremlin, que han provocado más dudas que certezas.
El programa, coordinado por Boris Titov, millonario ruso encargado por Vladimir Putin de proteger los derechos de los empresarios rusos que apoyan al Kremlin, y que dirige el Consejo Empresarial Rusia-Cuba encargado de la reforma, estaría "basado en el desarrollo de la empresa privada". Pero esto ocurre en medio de la invasión de Ucrania, con la economía rusa sometida a duras sanciones de Occidente y a enormes problemas previos.
Ni con la teta de los subsidios rusos previos a 1989 esto avanzó mucho.
Imaginen con una relación económica normal con empresarios capitalistas rusos que están entre los más ricos del mundo con particular afición por los mega yates de lujo.
La relación con Rusia hoy es fundamentalmente geoestrategica.
El capitalismo de estado ruso guiará al capitalismo de estado cubano en su intento de consolidación.
Rusia de esta forma mantiene un aliado clave a escasos kilómetros de Yanquilandia en tiempos turbulentos donde la posibilidad de una tercera, y última, guerra parece más cerca que nunca antes.
Las compañeritas zebras ... tan de ¡nga ...
Otra farsa que ni llevara prosperidad al campo de concentracion antillano ni permitira a los empresarios rusos ganar billete de supuestas inversiones.
El totalitarismo cubano no busca socios comerciales, lo que necesita es un host al que parasitar al estilo de la URSS y Venezuela, pero en el contexto actual resulta dificil encontrar una nacion dispuesta a arruinarse por ventajas geopoliticas.
Boris Titov y el cartel de Punto Cero ganaran algun billete de creditos blandos rusos a cambio de concesiones en la explotacion mas abierta de determinados recursos, pero eso no traera un grano de arroz a las mesas de los esclavos.
"una etapa cualitativamente superior en las relaciones bilaterales" debe ser entendido como que Rusia vuelva a regalarle dinero a Cuba, como antes lo hizo la URSS.
La cadena de mando militar de Putin está dividida más allá de la fricción-Wagner group. Porque el ejército ucraniano está listo y dispuesto a romper las trincheras rusas . Y los soldados rusos- ya desmoralizados, difícilmente puedan aguantar el terreno para evitar la retirada.
un desfile de rusos, persecusion de jovenes ruso-cubanos, etc... estamos de vuelta en Cold war baby.
cualquier dia vemos a Putin haciendole el dalai-lama al diazca
Un pacto político estrella, porque incluye varios renglones económicos importantes. Sin embargo, los presupuestos no están. La media-clase rusa ahora comienza a comprimirse con rapidez, cuando las sanciones relacionadas al crudo exportable alcanzan su pulzo-en-tiempo estratégico.
Raul Castro con su gorra de chapa de metal es un piojo comparado con el gran tren 🚊 de Putin. El chisme está que da al cuello, dicen que Putin anda con un nivel de paranoia que lo acomoda en su tren.