Ocho personas permanecen detenidas e incomunicadas en Villa María Luisa, la sede de la Seguridad del Estado en Camagüey, acusadas de terrorismo por presuntamente haber cortado un cable telefónico.
La cubana Roxy Sánchez Canel informó al medio independiente ADN sobre seis detenciones que se sumaron a las que sufrieron su tío Eddy Sánchez y la esposa de este, Mercedes González.
Ambos son los padres de Alfredo González, uno de los líderes en Miami de la organización anticastrista Autodefensa del Pueblo (ADP).
De las personas detenidas además de su tío y la esposa de este, Sánchez Canel solo pudo identificar a uno llamado Pancho, que trabaja en la agricultura. Pero aseguró que todos se encuentran en la sede de la Seguridad del Estado en Camagüey.
Los padres de Alfredo González son personas enfermas, según explicó la sobrina de Eddy Sánchez a ADN.
"Son dos personas de edad avanzada, que lo único que hacen es trabajar. Mi tío en la agricultura y su esposa cuidando de su nieto y de mi tío cuando llega de trabajar. Los dos son personas enfermas, Mercedes tiene una operación en el pecho y mi tío también está siendo atendido por sospecha de una enfermedad grave", describió Sánchez Canel, quien explicó además que los intentos de contratar un abogado para que represente a sus tíos han fallado, pues ninguno ha querido aceptar el caso.
La cubana radicada en Miami Niurka Prestamo, esposa de Alfredo González y nuera de la pareja de ancianos, ha publicado varios vídeos en Facebook denunciando el arresto de sus suegros y exigiendo su liberación.
El 14 de noviembre, Préstamo contó que, durante la madrugada, la agrupación anticastrista Clandestinos había cortado el cable coaxial de la comunicación, "el que viene de Venezuela" y que ese hecho había "puesto a la dictadura histérica", al punto de detener a sus suegros, dos personas mayores y trabajadoras que no tienen ninguna relación con las actividades de su hijo ni con el enfrentamiento al régimen cubano, según explicó la joven.
La mujer fue detenida en la calle, mientras caminaba con su nieto, que se quedó solo "en medio de la calle dando gritos". Su esposo fue arrestado, mientras trabajaba en el campo.
Prestamo ha explicado que la Seguridad del Estado está intentando que los detenidos se autoinculpen del corte del cable, que habría realizado Clandestinos.
Esa organización se dio a conocer en Cuba en enero de 2020, cuando bañó en sangre bustos de José Martí y llamó a actuar contra la dictadura.
Tres presuntos miembros de ese grupo, Panter Rodríguez Baró, Yoel Prieto Tamayo y Jorge Ernesto Pérez García, fueron acusados de varios delitos comunes, como tráfico de drogas y juegos prohibidos, y condenados en enero de 2021.
Panter Rodríguez recibió una sanción conjunta de 15 años de privación de libertad, y como sanción accesoria a "reparar el daño material causado, en correspondencia con el valor del bien afectado".
Yoel Prieto, por su parte, fue sancionado a nueve años de prisión, mientras que Jorge Ernesto Pérez fue condenado a un año de privación de libertad. Ambos cuentan con igual sanción accesoria que Rodríguez.