Al preso político Yoel Prieto Tamayo, uno de los miembros de Clandestinos, las autoridades carcelarias le niegan desde julio del pasado año el pase a un régimen de mínima severidad, denuncia a DIARIO DE CUBA Alina Tamayo, madre del recluso.
"Personalmente yo fui a la cárcel para que me dieran una explicación de por qué, si ya le correspondía por ley, no le dan el beneficio de la 'mínima'. El mayor Vladimir me dijo que tiene negado ese beneficio hasta 2025 por haber atentado contra la Seguridad del Estado", refiere Tamayo.
"Yo quisiera que alguien me explicara si echarle un poco de sangre de puerco a unos bustos de José Martí es atentar contra el Gobierno y permite violar la ley. Mi hijo ha tenido un comportamiento adecuado en la prisión, es primario y le corresponde que lo pasen al régimen de mínima severidad", sentencia la madre de este preso político.
"Al mismo busto de José Martí, que está frente a la sede de la revista Bohemia y que ellos dicen que es 'patrimonio nacional', le cayó un árbol encima y lo destruyó completamente. Ellos tuvieron que sustituirlo, lo que hace que pierda cualquier valor histórico'', añadió la mujer.
Prieto Tamayo, preso desde enero de 2020, fue condenado a 11 años de privación de libertad por los delitos de daños a las instituciones, héroes y mártires y tráfico de drogas. En el mismo proceso judicial fueron sancionados Panter Rodríguez Baró a 23 años de cárcel y Jorge Ernesto Pérez García a cinco años. Este último se encuentra en libertad condicional.
Sobre su condena, Prieto Tamayo expresó en una carta sacada de prisión en 2022, que "en el juicio todo era una mentira, pruebas falsas. Entre los testigos que presentó la Fiscalía estuvo Guillermo Mendoza, quien declaró, con la verdad, que nosotros nunca le habíamos proporcionado droga alguna. Pero esto de nada sirvió, porque nuestra palabra de nada sirve, solo la del instructor y el fiscal".
"Me sancionaron injustamente por una acusación falsa, por ser un cubano con pensamiento diferente a los que rigen este país" consideró en esa misiva Prieto Tamayo.
A juicio de la ONG Observatorio Cubano de Derechos Humanos (OCDH) las condenas contra los integrantes de este grupo "demuestran un ensañamiento notorio por razones políticas, en una causa (...) contra la libertad de expresión en Cuba".