El opositor Fernando González Vaillant, miembro de la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU), fue excarcelado por cumplimiento de sanción el sábado 20 de julio tras pasar dos años, siete meses y 15 días en la prisión de Mar Verde, en Santiago de Cuba, informó Martí Noticias.
González Vaillant era uno de los colaboradores de un comedor para personas necesitadas, que recibían además servicios de barbería y atención médica como parte de la labor humanitaria que la organización opositora ofrecía en su sede en Santiago de Cuba y con la que acabó el régimen.
En 2020, Fernando González fue condenado a tres años y ocho meses de cárcel por un supuesto delito de lesiones y privación de libertad. En la misma causa fueron sancionados José Daniel Ferrer, líder de UNPACU, y los activistas Roilán Zárraga y José Pupo, a quienes más tarde las autoridades informaron que cumplirían su sentencia en régimen domiciliario, aunque más tarde fueron revocados a prisión.
"¿Qué pasó? Que en el 2019 al 2020 nosotros cumplimos seis meses, somos cuatro compañeros en la misma causa; todos falsos delitos (...) Ellos lo que estaban buscando con esto es la forma de cerrar el comedor en el que seguíamos dando comida a los casos, a la gente pobre, porque eso les molesta", dijo González Vaillant.
Dentro de la cárcel de Mar Verde el opositor pasó por varios destacamentos, en un inicio, próximo a donde las autoridades mantienen, aislado, a Ferrer, a quien pudo ver en algunas ocasiones, según explicó.
"Yo estaba en un destacamento que yo lo veía por el patio, pero ¿qué pasa con esto?, que a él le tienen prohibido hablar con la gente y a la otra gente con él también. Le ponen a un policía ahí, vigilando. Está aislado, él solo en una celda ahí", dijo.
Sobre las pésimas condiciones en las que permanecen los reos dentro de la cárcel santiaguera de Mar Verde, dijo: "Yo entré pesando 91 kilos y ahora peso 59 kilos, esa es la comida más mala de este mundo. Allí no hay medicinas y, como eso está cerca de la costa, ahí lo mismo está el mosquito que está el jején. Allí lo que está más fuerte es las chinches y (hay) bastantes problemas con el agua, no es mentira".
A pesar de las amenazas de las autoridades, el santiaguero sostiene su compromiso por la libertad de Cuba. "Yo me mantengo firme en mi casusa ahí, yo estoy 'puesto' ¡y más ahora! ¡Bien puesto!", concluyó.
Más testimonios de la cruda vida en la cárcel cubana
El opositor Virgilio Mantilla Arango denunció la escalada de la represión y los abusos contra los presos políticos en la prisión provincial Kilo 7, ubicada en Camagüey, Cuba.
Jordan Marrero Huerta, presidente del Partido Demócrata Cristiano en la provincia de Camagüey, trasladó la denuncia de Mantilla en un audio publicado por el Observatorio Cubano de Derechos Humanos.
Según el opositor, estas violaciones de los derechos humanos afectan también a los presos comunes.
Entre las acusaciones más graves se encuentran amenazas de muerte contra Mantilla Arango y el recluso Alejandro Camejo Paulier.
El comunicado de Marrero señala que los presos son sometidos a condiciones infrahumanas y enviados con frecuencia a celdas de aislamiento por exigir asistencia médica o mejores condiciones de vida.
En junio Mantilla Arango fue condenado a diez meses más de cárcel por un supuesto delito de desacato.
En marzo de 2024, luego de haber protestado junto a otros reclusos por las precarias condiciones a las que están sometidos y la escasez de alimentos y medicinas en el penal, Mantilla Arango fue acusado de desacato y encerrado en una celda de castigo. En abril, las autoridades determinaron que permaneciera allí.
En junio de 2021 Mantilla salió de prisión después de cumplir una sanción de siete meses en la cárcel conocida como Kilo 8. Sin embargo, el 16 de julio fue detenido junto a otros manifestantes que salieron a las calles el 11J y el 29 de septiembre de 2021 fue juzgado en prisión. La Fiscalía solicitó para él una condena de tres años de privación de libertad.
Mantilla es el líder de la Unidad Camagüeyana. Le correspondía su excarcelación por cumplimiento de sanción el 16 de octubre de 2024. Ahora enfrenta su cuarta condena por motivos políticos.
