El preso político cubano Maykel "Osorbo" Castillo está otra vez enfermo en la cárcel de Pinar del Río del kilómetro cinco y medio, denunció la activista Anamely Ramos González en su perfil de Facebook, donde expresó preocupación por el estado de salud del artista contestatario y su desconfianza por el diagnóstico dado por las autoridades carcelarias.
"Maykel está con fiebre, dolor de cabeza y en las articulaciones. Lo supimos por él mismo cuando llamó ayer (jueves), pero ahora no vuelve a llamar hasta el lunes. Nuestra preocupación no cesa. Maykel es fuerte pero casi dos años encarcelado lo han debilitado, ha bajado dos kilos en días", escribió Ramos.
"Le hicieron análisis y supuestamente es solo un virus, pero sabemos que en la misma prisión donde está Maykel hay alrededor de 15 casos de tuberculosis. Nada puede hacernos confiar en los mismos que lo mantienen tras las rejas", añadió.
"Para nadie es un secreto la depauperación del sistema de salud en Cuba. Si en los hospitales regulares están pidiendo hasta los guantes, imagínense cómo estarán las prisiones. Aun así, en la última visita de Maykel, el médico no creyó necesario que entraran medicinas para el dolor porque, según él, allí había de todo. Muy irresponsable tiene que ser un médico para afirmar esto cuando no es cierto, y dejar más indefensos aún a los reclusos", condenó la activista.
Ramos responsabilizó de "cualquier cosa que le suceda a Maykel" a las autoridades del país y de la prisión, y también al personal de salud del penal: "Si su principal misión no es salvar y sanar, entonces no sean más médicos", dijo.
"La prisión, además, está llena de chinches y sarna. Las condiciones sanitarias son deplorables y la comida un desastre. El día a día de nuestros presos políticos es una agonía. Nunca debieron estar ahí, por lo que cualquier cosa que les ocurra es culpa de la necedad de ese sistema y lo denunciaremos donde sea que vayamos", concluyó la opositora.
Maykel Castillo Pérez, conocido como Maykel Osorbo, fue condenado a nueve años de cárcel en junio de 2022 por los supuestos delitos de desacato, atentado, desórdenes públicos y difamación de las instituciones y organizaciones, héroes y mártires.
El artista ganó dos premios Latin Grammy por ser uno de los autores e intérpretes de la canción "Patria y Vida", devenida en himno durante las protestas nacionales del 11 de julio de 2021.
A mediados de enero pasado, las autoridades carcelarias instalaron una cámara de vigilancia en la galera en la que se encuentra. El motivo era que supuestamente el artista tenía pensado amotinarse junto a un grupo de reclusos, informó entonces la activista Anamely Ramos González en su perfil de Facebook.
A inicios del presente mes, la ONG Freedom House incluyó a Castillo Pérez y al artista Luis Manuel Otero Alcántara en una lista de diez presos políticos del mundo, dentro de una campaña titulada ''Libertad para todos'', que lanzó en sus redes sociales.
"Estas personas representan solo una fracción de los muchos defensores de la democracia y los derechos humanos en todo el mundo que soportan circunstancias similares", escribió la organización sobre estos presos políticos.
Otero Alcántara fue detenido el 11 de julio de 2021 y juzgado junto a Castillo en junio del siguiente año. El régimen le impuso una condena de cinco años por los delitos de ultraje a los símbolos patrios, desacato y desórdenes públicos.
En los privados de libertad, sobre todo, quienes purgan condenas arbitrarias, el trastorno facticio es el primer problema en aparecer por la misma desesperación del encierro, sin embargo, cuando dicha situación se prolonga, también se corre el riesgo de enfermar.
Hay presos que se perjudican tanto a sí mismo, que cuando se ven de nuevo en libertad se mueren.
Espero que el rapero Osorbo no haya caído en esa trampa de la psiquis y que pronto no sólo él sea puesto en libertad, sino también todos los que han sido condenados a prisión injustamente por el régimen.
Tuberculosis en la „potencia médica“
Lamentablemente, eso lleva rato andando. Vivía yo en Cuba cuando la hija de una vecina fue tratada por tuberculosis en el Hospital Fajardo, y después de varios meses falleció. Para entonces, en la editorial de Ciencias Médicas se publicaron trabajos sobre el repunte de esta enfermedad y los lugares de más incidencia. De entonces acá todo allá ha empeorado, la salud pública, la alimentación, la escasez de medicamentos, las condiciones de hacinamiento en La Habana, y un gran etcétera.
Es una agonía lo de este pobre hombre en la cárcel.