La crisis ambiental y de saneamiento que sufre Cuba quedó en evidencia en las reuniones de la Asamblea Nacional del Poder Popular (ANPP) que sesionan en La Habana. Durante la reunión de la comisión de Industria, Construcciones y Energía se informó que en el país existen más de 11.000 fosas en vertimiento pendientes de limpieza.
Así lo informó el presidente de la OSDE Agua y Saneamiento, José Antonio Hernández Álvarez, al presentar la propuesta de dictamen del informe de la más alta fiscalización del Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos (INRH).
El reporte del diario oficial Granma al respecto indicó que el funcionario comentó que el aumento de la tarifa del agua aplicado como parte del paquetazo económico del Gobierno a partir de 2024 dio lugar a que 11 de las empresas del INRH presenten pérdidas.
Hernández Álvarez precisó que en el plan empresarial estaba previsto concluir el año sin pérdidas, pero el incremento de la tarifa de agua siete veces, junto a otros gastos que aumentaron mucho como efecto de lo que las autoridades denominan eufemísticamente "ordenamiento económico", hizo inviable ese propósito.
Otro asunto grave evidenciado en la intervención del funcionario es el golpe que ha significado la crisis eléctrica que vive la Isla sobre el bombeo de agua, otro asunto crítico del día a día en el país. Admitió que según mejore la situación del sistema electroenergético nacional, también lo hará el INRH, puesto que entre el 60 y el 70% de los cubanos sin servicio de agua potable "dependen de la falta del fluido eléctrico".
El reporte de Granma menciona que son 212.000 las personas afectadas por el problema en Cuba, como estimado.
La nota no refiere el número de salideros existentes, otro problema persistente en la escasez de agua que sufren los cubanos. Sobre el tema, el funcionario dijo que ha faltado combustible para la reparación de estos, pero también cemento y asfalto.
Hernández Álvarez aseguró que en 2024 se repararon más de un centenar de equipos de bombeo en los talleres del INRH y llegaron a tener hasta un 25% de bombas alimentadas por energía solar.
Señaló que un financiamiento del Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) otorgado al Gobierno para resarcir los daños causados por el azote del huracán Rafael en Artemisa incluyen siete equipos de bombeo que se están negociando para su compra en el extranjero. Mas, terció el presidente del INRH, Antonio Rodríguez Rodríguez, solo esa provincia requiere 30 de esos dispositivos nuevos.
En el debate del tema, la diputada Dayana Veira Fernández, representante del municipio habanero de Regla, comentó que la distribución de agua en pipas solo en la capital de la Isla supuso un gasto de 88,2 millones de pesos.
Por su lado, la vice primera ministra Inés María Chapman, quien estuvo a cargo del INRH durante años, comentó: "Si un organismo necesita participación popular es este; por ejemplo, para proteger los paneles fotovoltaicos en los equipos basados en el cambio de matriz".
Once mil fosas? Esa cantidad era la que había en los años 70’s, habría que multiplicar diez veces la cifra y quizás terminaríamos siendo demasiado conservadores.
Y los ambientalistas, ¿dónde están? Ah, coño, es verdad, la destrucción del medio se denuncia exclusivamente cuando ocurre en el capitalismo.