Activistas cubanos se preparan para organizar un fin de año diferente para más de 100 familias en municipios de Guantánamo que lo perdieron todo tras el paso del huracán Oscar por el oriente del país y para ello invitan a todo aquel que quiera apoyar la iniciativa a sumarse a la recaudación tanto en metálico como con recursos materiales.
"El equipo Huellas ha decidido apostar por una Navidad y un Fin de Año diferente para esas familias que están en supervivencia mega extrema en Guantánamo. Hemos decidido regalar una cena digna a más de 100 familias en derrumbes totales y llevar el mayor volumen de donaciones que seamos capaces de recaudar", informó Johanna Jolá Álvarez, administradora del proyecto solidario, en Facebook.
"Toda ayuda cuenta y cada aporte cuenta. Entre todos los poquiticos podemos dar a esas sufridas familias el amor de un pueblo que bien sabe amar en San Antonio del Sur, Imías, Yacabo, Macambo, Baracoa y Maisí. Hemos decidido regalar juguetes a esos niños que hoy no tienen, y llevar la alegría a esos hogares donde el dolor es muy fuerte", añadió.
Para la iniciativa, Jolá Álvarez dijo que Huellas ha habilitado sus cuentas para que todo el que desee se sume. La cuenta con número 9205 9598 7296 7865 está destinada a las recaudaciones en pesos cubanos y la número 9225 9598 7195 3060 para la moneda libremente convertible MLC (divisa). Por otra parte, informó que el móvil para confirmar las transferencias es el +5355057111.
"El equipo Huellas saldrá este 25 de diciembre rumbo a Guantánamo a regalar amor, sonrisas y un arropón de pueblo a quienes lo han perdido materialmente todo e incluso han perdido a sus seres queridos. En ese océano de necesidades en el que malviven, haremos la comida que de manera gratuita vamos a repartir. Que el condimento esencial sea el amor de todos los que compartiremos no de aquello que nos sobra sino de lo 'requetepoquitico' que tenemos", dijo la activista.
La iniciativa busca además de recaudar aseo, útiles y material de limpieza, ropas y calzados, abrigos, colchas, sábanas, toallas; canastilla, cunas, carrito de bebé, útiles y material escolar, libros, útiles de cocina y para el hogar (platos, vasos, cubiertos, cazuelas, adornos, etc); muebles, colchones, camas, juguetes y juegos de mesa; medicamentos, alimentos envasados y empacados, caramelos y golosinas.
"Es muy doloroso lo que están sufriendo nuestros hermanos en Guantánamo en condiciones tan deplorables y paupérrimas. Todo el que desee ayudar, bienvenido sea. Huellas no excluye a nadie y nos involucra a todos", finalizó la publicación.
La iniciativa contrasta con el tratamiento del Gobierno a los damnificados. A finales de octubre, la viceministra de Finanzas y Precios, Yanisley Ortiz Mantecón, dijo en una conferencia de prensa que se habían adoptado "decisiones para la protección de los damnificados en la provincia" de Guantánamo, recogidas en el Acuerdo 9991 del Consejo de Ministros.
Según Ortiz Mantecón, se estableció que "desde el Presupuesto del Estado, se bonifique el 50% del precio de los materiales de la construcción a las personas cuyas viviendas presenten afectaciones totales o parciales, y los precios de los colchones que se les vendan a los damnificados por el impacto de este evento hidrometeorológico".
Ahora, el Gobierno cubano ha admitido que les vende a los damnificados del huracán Oscar colchones donados por los que además pagan al menos un tercio del salario mínimo del país.
El Gobierno Provincial del Poder Popular en Guantánamo informó el sábado pasado, en una nota reproducida por periódico local Venceremos, que "a partir de la ayuda recibida por el país llegaron a la provincia para los afectados por el huracán Oscar, en los municipios San Antonio del Sur, Imías, Baracoa y Maisí, 10.287 colchones, que se comercializan por la red minorista del comercio interior".
"Previa autorización de los Consejos de Defensa Municipales, los colchones se venden a los casos de mayor afectación, con bonificación del 50% de su valor, a precios entre 735 y 1.865 pesos según sus características". El Estado destinó solo 501 colchones a beneficiarios de la Asistencia Social en esos municipios sin coste alguno, o sea, ni el 5% de los 10.287 que ha recibido Cuba como ayuda y que el Gobierno está vendiendo.
Mientras, desde la sociedad civil, proyectos como Huellas, Aliento de Vida o iniciativas personales como la del santiaguero Yasser Sosa Tamayo, intentan paliar la dura realidad que enfrentan los pobres.
Sosa Tamayo recorrió el viernes pasado el Corredor Patrimonial Las Enramadas, en el centro histórico de Santiago de Cuba, donde reside, para regalar ropa y zapatos a personas necesitadas que encontraba en su camino. El activista, que compartió imágenes de las personas beneficiadas en su perfil en Facebook, habló de valores, gestos de amor y solidaridad, más allá de las apariencias y posesiones materiales.
El joven agradeció a quienes, de forma anónima, lo apoyan en su labor para llevar un poco de alegría a las personas necesitadas de su comunidad.