En medio de la crisis generalizada en Cuba, que golpea con particular énfasis los servicios de agua y electricidad, el Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos (INRH) anunció que prevé instalar 1.312 equipos de bombeo con una potencia de 10 kilowatts (kW), que funcionan a partir de energía solar fotovoltaica, dijo la directora de Acueducto, Alcantarillado y Drenaje Pluvial de la entidad, Annalie Labrada Gómez, al periódico oficial Granma.
El proyecto, iniciado en 2023 y que contempla el emplazamiento de tres lotes en años consecutivos, marcha con atrasos, debido a que, de los 722 equipos que el INRH debería haber instalado en 2023, solo están montado 658, en las provincias de Pinar del Río, Artemisa, Matanzas, Cienfuegos, Sancti Spíritus, Ciego de Ávila, Holguín y Las Tunas.
El director general de Economía y Capital Humano de la entidad, Fernando Soria Pérez, expresó el compromiso de concluir la instalación de esa primera entrega en 2024. Además, en junio llegaron los componentes para el segundo lote, subrayó, "74 para Villa Clara y 70 para Aguas Turquino, en Santiago de Cuba". De ellos, solo 14 están en funcionamiento y, a pesar de los atrasos y los problemas de montaje, el funcionario afirmó que "la meta consiste en contar con todos al cierre del año".
Más de una vez, el Gobierno cubano ha insistido en el cambio de matriz energética, pero esa intención se va a pique cuando, como en esta ocasión, los retrasos se deben al déficit de combustible para esta actividad, toda vez que no ha sido incluida entre las prioridades para la asignación del recurso, señaló Labrada Gómez. Dijo, asimismo, que "también afecta la fluctuación de la fuerza de trabajo capacitada para operar la tecnología, atraída por otras ofertas laborales".
En estas condiciones, la última parte del programa, prevista para 2025, consta de 446 equipos, y tendrá como beneficiarios a los clientes de las empresas de Aguas de La Habana, Mayabeque, Aguas del Oeste (también de Mayabeque), Varadero, Camagüey; Guardalavaca, en Holguín, Granma, Santiago de Cuba, Guantánamo, y el municipio especial Isla de la Juventud.
Soria Pérez acotó que los equipos instalados hasta el momento "benefician a 347.464 habitantes, reportan pequeños gastos y, por lo general, se hallan en sitios recónditos e incluso en cabeceras provinciales donde abastecen, por ejemplo, un circuito, un reparto, un hospital o una escuela en específico".
El directivo aseguró que "existen intenciones de impulsar, posteriormente, el montaje de dispositivos de hasta 30 kW, luego de los estudios de factibilidad, porque requieren otras exigencias como más paneles y espacio físico".
No obstante, apostilló Granma, "deben buscar el financiamiento, porque el programa actual recibe respaldo económico del Gobierno, pero el de 30 kW resultaría más costoso y urge encontrar un prestamista para devolverle el dinero con la reducción del empleo de combustible".
En este sentido, el presidente del INRH, Antonio Rodríguez López manifestó que "lo realizado es un gran paso de avance, pero no satisface, en tanto que todavía más de 400 comunidades con más de 2.000 personas no tienen acueducto, al igual que sucede en varias cabeceras municipales, y eso nos compromete y compulsa a los trabajadores del sector a un mayor esfuerzo, a innovar y aplicar la ciencia y la innovación tecnológica".
Además, para desarrollar con más precisión las previsiones en el sector, especialistas de varias entidades pertenecientes al Grupo Empresarial Gestión de las Aguas Terrestres trabajan en la elaboración nuevos mapas sobre sus recursos hídricos subterráneos y características geológicas.
El director de Geología del Ministerio de Energía y Minas, Enrique Castellanos, dijo a Granma que "el nuevo mapa dispondrá de 97 hojas, 15 de ellas están terminadas y 18 en fase de elaboración, dentro de un cronograma general que prevé la culminación de la obra para 2032.
El propósito principal, indicó, "es dotar a investigadores y decisores de una eficaz herramienta de consulta, con la finalidad de planificar, de manera racional y sostenible, la utilización de los cada vez más escasos recursos hídricos subterráneos del país".
Ninguna obra que se haga con esclavos desnutridos tendrá buen final. Todo sale mal porque no hay incentivos ni energías ni atavío adecuado para trabajar.