El polémico líder de la Gran Logia de Cuba da la cara porque, dice, 'es demasiado el ataque ya'

El polémico Gran Maestro de la Gran Logia de Cuba Mario Urquía Carreño envío recientemente un video a todas las logias y "hermanos masones" de la Isla, en medio de las controversias internas generadas a partir del robo de 19.000 dólares. Si bien Urquía Carreño había enviado varios comunicados desde el inicio de la querella, esta es la primera vez que da la cara públicamente. Lo hizo porque, según él, "es demasiado el ataque ya", dijo en el mencionado video, al que tuvo acceso el medio independiente Cubanet.

El Gran Maestro volvió a negar categóricamente ser responsable del robo y exhibió el apoyo que recibe por parte de las instituciones gubernamentales, al asegurar que tanto el Ministerio de Justicia como Caridad Diego Bello, responsable de Asuntos Religiosos en el Comité Central del Partido Comunista, lo exoneraban de cualquier responsabilidad penal que pudiera pesar sobre él.

Dijo, asimismo, que a pesar de haber firmado un documento ante las autoridades policiales en el que se comprometía a devolver el dinero, esto "no implica admisión de culpa", afirmó. Destacó que había firmado el documento "porque mantengo el compromiso con el asilo y el compromiso con mis hermanos de retribuir ese dinero, pero no por una cuestión de responsabilidad ni culpabilidad en ese hecho".

En tal sentido, dijo que la demora para devolver el dinero se debe a las limitaciones impuestas por las leyes cubanas, que exigen que el reintegro sea hecho en pesos, "lo que conlleva una pérdida considerable debido a la disparidad con el valor del dólar en el mercado informal". No obstante, Urquía Carreño, subrayó que ya había realizado un depósito de 270.000 pesos, equivalente a 1.000 dólares, "como muestra de mi compromiso de devolver los fondos", dijo.

Como parte de las protestas masónicas frente a este hecho y la dirección de Urquía Carreño, el 23 de julio, alrededor de dos centenares de masones se congregaron ante la sede de la Gran Logia de Cuba, en La Habana, y exigieron que el Gran Maestro abandonara el cargo, así como el cese de la intromisión del Ministerio de Justicia en sus asuntos internos.

Aunque a finales de enero Urquía Carreño fue expulsado de la Orden por "traición" a sus principios, el Ministerio de Justicia lo restituyó en el cargo a inicios del mes de junio, alegando que se habían cometido violaciones en el proceso. Más de un centenar de logias masónicas han rechazado la imposición de Urquía Carreño.

Dos días después de la protesta, en una reunión del Supremo Consejo, los masones reiteraron su rechazo al Gran Maestro, pese a las amenazas de la Seguridad del Estado a algunos masones.

"Esta no es una situación política, sino masónica", dijo en el encuentro el Soberano Gran Comendador, José Ramón Viñas Alonso, señaló Cubanet. En la reunión, Viñas Alfonso contó que agentes de la Seguridad del Estado le habían advertido durante un interrogatorio reciente que habría Mario Urquía Carreño "para rato".