El régimen dedicó este lunes un espacio en la televisión a mostrar el rigor de las leyes cubanas e intentar exhibir la eficacia de su Policía, a través de un caso que evidencia el incremento de la inseguridad en las calles.
"Los delitos de robo con violencia o intimidación de personas y portación y tenencia ilegal de armas o explosivos tienen una elevada lesividad. Por su impacto social, se juzgan de manera rigurosa en Cuba", afirmó el portal oficial Cubadebate, que compartió el fragmento del Noticiero de la Televisión Cubana que informó sobre el juicio a dos presuntos autores de esos delitos, realizado en la Sala de lo Penal, del Tribunal Provincial Popular de La Habana
El hecho involucra a dos acusados que presuntamente asaltaron a un ciudadano que acababa de bajarse de un ómnibus a las dos de la madrugada. Según su relato, uno de los dos individuos le puso "un cuchillo en la barriga" y le exigió la cadena y el teléfono móvil. Ambos lo habrían amenazado con pincharlo si se movía.
De acuerdo con el reporte del noticiero, un testigo de los hechos llamó al 106, que es el número del servicio de emergencias, y se presentó una patrulla en el lugar de los hechos.
El suboficial Osvaldo García Estévez, de la Brigada Provincial de Patrullas de la Policía Nacional Revolucionaria (PNR), a la víctima se le montó en el vehículo para dar un recorrido por el reparto Eléctrico del habanero municipio Arroyo Naranjo.
El ciudadano agredido contó que todo había sucedido en el P-6, explicó el agente, por lo que la patrulla detuvo el ómnibus y la víctima reconoció a uno de sus presuntos asaltantes.
Según el noticiero, la Fiscalía solicitó sanciones conjuntas para los ciudadanos. Aunque no especificó de cuántos años de cárcel, el reporte indicó que "con sanciones que pueden llegar hasta 30 años de privación de libertad por este y otros delitos, de acuerdo al grado de lesividad social y las circunstancias, se juzga conforme con la legalidad socialista".
El juez titular Jesús Pérez Benavides, entrevistado por el noticiero, explicó que el empleo de un arma agrava el hecho.
Los actos por los que son juzgados los acusados constituyen delitos contra el patrimonio, que son los de mayor incidencia en Cuba, según se informó en el VIII Pleno del Comité Central del Partido Comunista de Cuba (PCC), celebrado en La Habana a inicios del presente mes.
En el encuentro, el gobernante Miguel Díaz-Canel exigió mayor rigor en las acciones dirigidas a la prevención y combate a la corrupción, el delito, las ilegalidades e indisciplinas sociales, que amenazan la seguridad nacional, pero no se refirió a cuáles son dichas acciones ni cuáles son esos delitos que atentan contra la seguridad nacional.
El jefe de la Oficina de Atención al sistema del Poder Popular, órganos del Estado y el sector Jurídico del Comité Central del Partido, Julio César García, afirmó que, pese a las acciones impulsadas, los resultados son insuficientes, lo que ratifica las ineficiencias de las autoridades policiales y políticas para atajar la creciente delincuencia, con niveles de violencia que se vana elevando, en la sociedad cubana.
El funcionario resaltó que, no obstante, las acciones emprendidas, "han posibilitado la contención actual de algunas tipicidades delictivas de mayor gravedad y evitado que se generen situaciones más graves".
También admitió que "no se logra el enfrentamiento efectivo a los precios abusivos y especulativos de bienes y servicios; se mantiene la comercialización ilícita de diversos productos, la receptación, la especulación y el acaparamiento".
El Gobierno cubano ofrece puntos de vista contradictorios sobre el enfrentamiento a los delitos en la Isla, por una parte declaran sus ineficiencias para detenerlos y, al mismo tiempo, destacaron recientemente que "el 96% de los cubanos acusados de delitos entre enero y mayo de 2024 fue sancionado". Dicha información fue proporcionada por la vicepresidenta del Tribunal Supremo de Justicia, Maricela Sosa Ravelo, en el programa televisivo de propaganda Mesa Redonda.
En dicha emisión del programa, dedicada al enfrentamiento y la prevención del delito en Cuba, los invitados destacaron el "seguimiento" a personas que no han delinquido, así como a sus familias, porque las consideran predispuestas al delito. Además, culparon a "las plataformas enemigas" de buscar "fragmentar la unidad" entre el pueblo y la Policía. Antes, habían dicho que no es que en Cuba aumentaran los delitos, sino la percepción de los mismos.
Lo único eficaz en Cuba es el hambre y la violencia.