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Salud Pública

En Cuba 'el sistema de salud no cumple su función', denuncia la madre de un enfermo psiquiátrico

'Casi le cojo los puntos yo a mi hija': otra madre denuncia la falta de un médico maxilofacial en el hospital pediátrico de Holguín.

Madrid
El paciente psiquiátrico Allen junto a su madre.
El paciente psiquiátrico Allen junto a su madre.

La madre de un paciente diagnosticado con esquizofrenia paranoide denunció en una publicación en Facebook el colapso de las instituciones psiquiátricas en Cuba y la falta de ambulancias.

"Este es mi hijo Allen, paciente psiquiátrico diagnosticado de esquizofrenia paranoide hace cinco años. Vivimos solos los dos, él vive en su cuarto encerrado y tiene poco contacto social", contó la mujer en un texto acompañado de una foto suya con su hijo. El post fue compartido en la red social por una usuaria identificada como Cari Castillo.

"A pesar de su enfermedad, he tratado de mantenerlo conmigo por la situación tan mala de las instituciones psiquiátricas, que además están tan llenas de personas y no aceptan nuevos ingresos, por no tener camas disponibles, en otras palabras, ¡COLAPSADOS!!!!!", enfatizó la mujer y señaló que eso solo lo saben las personas que como ella "tienen un familiar de estas características".

A la falta de disponibilidad de camas en los hospitales psiquiátricos cubanos se suma la de ambulancias, algo que ha sido denunciado por varios cubanos y ha provocado incluso fallecimientos.

"En este momento me encuentro sin saber qué hacer ante varios ataques que he recibido de su parte", lamentó la madre de Allen.  "Hoy llamé al Sium (Sistema Integral de Urgencias Médicas) como cada vez anterior; esta vez su respuesta fue que había una sola ambulancia y no era para estos casos. La Policía vino, pero solo pueden actuar acompañados del Sium", explicó.

"¿Cuál es la solución para mi problema, acaso esperan que me mate para ingresarlo?", cuestionó la mujer que está jubilada y, como a muchos cubanos en esta condición, la pensión no le alcanza para cubrir todas sus necesidades.

"Soy una madre jubilada de 74 años, con ganas de trabajar y ser útil, arquitecta de profesión, con una pensión que no alcanza ni para comprar frutas para que tome sus medicinas camufladas, porque se niega a tomarlas por no reconocer su enfermedad", explicó.

"Mi trabajo desde que me levanto es atenderlo, el sistema de salud no cumple su función, no asume su responsabilidad en un país donde ser paciente psiquiátrico no debería sorprender a nadie".

Esta cubana contó que antes de escribir el texto, acudió "a trabajadores sociales, Ministerio de Salud Pública y las instituciones pertinentes del Gobierno que son muy atentos, pero no me resuelven el problema"

Agradeció "a las personas que dan sus caras ante mí, solo lamento que las instituciones no merezcan a estas personas, que tienen la intención de ayudar, pero no las posibilidades reales".

"Ante este vacío legal en mi vida, solo me quedaba dar gritos en la calle, pero en mi calle hay personas con otros problemas, quizás más grandes que el mío, así que dejo mis gritos en este texto, en espera de que llegue a oídos sensibles", concluyó.

Las deficiencias de la atención a los pacientes psiquiátricos en Cuba no constituyen una novedad. En febrero de 2022, un joven de 36 años con el mismo diagnóstico de Allen fue dado de alta de la Sala de Psiquiatría del Hospital Provincial Faustino Pérez, de Matanzas. Desapareció esa misma tarde y su cadáver apareció diez días más tarde.

En diciembre de 2019, otro paciente psiquiátrico, que no tenía medicamentos ni institución que lo ingresara, aterrorizaba a sus vecinos en La Habana, sin que las autoridades resolvieran el caso. Su hermana contó entonces a DIARIO DE CUBA que había llamado incluso al Consejo de Estado y responsabilizó a Salud Pública de lo que pudiera pasar con el paciente.

En agosto de 2021, el difunto profesor titular de Psiquiatría Sergio Andrés Pérez Barrero, fundador de la Sección de Suicidiología de la Asociación Mundial de Psiquiatría y de la Red Mundial de Suicidiólogos, y autor de varios libros y artículos, contó a esta redacción un suceso que lo afectó e influyó en su retiro anticipado.

"El principal problema que tuve, y que fue uno de los motivos por los que me jubilé, fue haber remitido dos personas con riesgo suicida elevado a la guardia de Psiquiatría. Por no tener camas disponibles los enviaron con tratamiento para el hogar y se mataron".

El doctor Emilio Arteaga Pérez, del Gremio Médico Cubano Libre, explicó que en Cuba no hay disponibilidad de fármacos para las patologías mentales de base a trabajar con un suicida.

"No tienes a veces con qué manejar una crisis de excitación psicomotriz, una crisis de ansiedad, una depresión aguda. No hay antidepresivos, no hay sedantes, ni antisicóticos, ni ansiolíticos. Los antidepresivos de última generación no existen allí. Los clásicos, que se usan desde la década de los 60, también están en falta", dijo.

Pero no son solo los pacientes psiquiátricos los que sufren las deficiencias de la Salud Pública en Cuba. Mailin Sánchez, esposa del preso del 11J Yosvany Rosell García Caso, denunció en Facebook que casi tuvo que coserle los puntos de una herida en el mentón a su hija, ante la falta de un médico maxilofacial y de higiene en el Hospital Pediátrico de Holguín.

"Mi niña se cae jugando de sus propios pies, se hace una herida de puntos. La llevo rápidamente hacia El pediátrico de la provincia Holguín, donde vivimos. Cuando llego, ni un médico. Espero un tiempo, me dicen entre dos jóvenes que no había maxilofacial para que le cosiera la herida", relató Sánchez.

Ninguno de los dos estudiantes se sentía con la capacidad necesaria para coser la herida, pero al fin se decidió la más joven. Pero se dispuso a hacerlo "sin la higiene necesaria", explicó Sánchez y añadió que tuvo que pedirle a la joven que retirara el primer punto "pues estaba mal cosido". Ella misma sacó una toalla desinfectada que llevaba de su casa, limpió la zona y le retiró el punto a su hija.

"Con mi ayuda pudo coser, por no decir que casi le cojo los puntos a mi hija yo", escribió Sánchez, quien consideró "una falta de respeto" que no hubiera un médico maxilofacial en un hospital para niños.

"Que no digan más que Cuba es potencia médica, que no hay nada. Los hospitales carecen de todo tipo de recursos, hasta lo mínimo, incluyendo la higiene", finalizó su post.

En noviembre de 2022, las autoridades del Partido Comunista de Cuba (PCC) en la provincia de Ciego de Ávila tuvieron que admitir el negativo impacto en los indicadores de salud que provocaba el déficit de médicos y enfermeros en ese territorio, según un artículo publicado en el medio estatal local Invasor.

En el propio mes, Maydelis Solano, residente en Bayamo, tuvo que pedir ayuda en redes sociales para que a su hijo de 12 años, que una atresia esofágica, pudieran operarlo, pues en el hospital faltaban el oxígeno, la anestesia y el suero parenteral.

Esta cubana tuvo que pedir estos recursos en las redes sociales apenas un mes después que de la prensa oficial promoviera sus ofertas de servicios de salud para turistas internacionales.

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2 comentarios

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...y Cuba quedándose sin médicos. Se ha quedado sin medicinas y pronto no va a quedar ni un solo médico. Claro está, a los que trabajan en Cuba no les pueden robar el 90% de sus ganancias.

Claro que la cumple. El "logro" de la medicina "gratis" compensa por muchas cosas en la mente de muchos extranjeros. Siempre lo usan como justificación, por mala y tercermundista que sea.