La organización Cuban Prisoners Defenders (CPD) presentó una acusación formal ante las Naciones Unidas y la Corte Penal Internacional (ICC por sus siglas en inglés) contra los gobiernos de México, Italia y Qatar por las presuntas prácticas que realizan de trata de personas, esclavitud, persecución y otros actos inhumanos contra los médicos cubanos, da a conocer la ONG en su página web.
''Cuban Prisoners Defenders ha remitido a Naciones Unidas y la ICC una ampliación de la denuncia (ya admitida a estudio en la Corte Penal Internacional) ampliando la participación de estos tres países en el esquema de esclavitud que ya ha sido denunciado extensamente por numerosos organismos'', indicó esta organización.
En el caso de México, CPD detalla que a partir del testimonio de más de una decena de cooperantes médicos cubanos y acceso al contrato de cooperación, ''se refleja la violación ignominiosa de los más fundamentales derechos humanos y la imposición de la esclavitud como forma de trabajo en el país azteca''.
Debido a las denuncias que ha realizado esa organización en territorio mexicano, el régimen cubano decidió devolverle a los cooperantes sus pasaportes, lo que le ha permitido a muchos médicos ''escaparse de la esclavitud y huir de la brigada, a pesar de las represalias que pueden tomar las autoridades cubanas en su contra'', dice el informe.
''Los médicos cubanos en México tienen toque de queda a partir de las 6:00 P.M, de manera que tienen que estar en las residencias asignadas a la hora que determine su jefe superior, con la prohibición de salir a partir de esa hora'', denuncia la organización.
Los cubanos tienen prohibido además tener relaciones sentimentales o de amistad con la población nativa, y deben comunicar si reciben visitas de mexicanos en los lugares de alojamiento, refiere CPD.
El caso de Italia
En el caso de este país europeo la organización detalla que ''el Gobierno de Calabria entrega al de Cuba el 75% de los salarios de los médicos cubanos, dejando un salario real para los médicos inferior al 60% del salario medio del país, es decir, lo que la Unión Europea está considerando como definición del salario mínimo de un Estado''.
Otra de las violaciones consiste en que las autoridades de esa región italiana deja en manos del régimen cubano la evaluación de la ''integridad moral de los profesionales en cada momento'', lo que permite la terminación inmediata del contrato si la parte cubana así lo considera, dejando al médico totalmente expuesto a la ''esclavista legislación del régimen''.
Aparte de ello, el Gobierno de la región italiana de Calabria ''se ha saltado toda la convalidación ortodoxa de los profesionales cubanos pues ni se evalúan títulos legalizados por las universidades y Ministerio de Educación, ni se evalúan las asignaturas y calificaciones obtenidas por cada profesional, ni se validan las copias de dichos documentos mediante el Consulado italiano, ni se certifican las traducciones, ni se informa al médico cubano, de forma directa, sobre el procedimiento y las implicaciones legales de presentar documentos no veraces, como marca la legislación italiana'', dice el informe.
El caso de Qatar
Debido a un acuerdo entre ambos regímenes, el Gobierno de Cuba se queda hasta con el 90% del salario de los médicos cubanos contratados por Qatar. Ese país tiene médicos cubanos desde 1999.
En el año 2019, el diario The Guardian sacó a relucir una investigación que reveló que el personal médico cubano en Qatar recibe mensualmente solo un 10%, (alrededor de 1.000 dólares los médicos y 750 dólares los enfermeros), de lo que los profesionales de la salud ganan en hospitales gubernamentales de ese país árabe.
"El resto se entrega al Gobierno cubano por un acuerdo no hecho público entre ambos países. Qatar paga por cada profesional médico a Cuba entre 5.000 y 13.000 dólares mensuales en función de la categoría laboral. Es decir, los médicos cubanos ganan un salario por debajo del nivel de pobreza en Qatar, mientras el Gobierno de Cuba confisca hasta el 94% de sus salarios", dice CPD.
Debido a todas estas denuncias de la sociedad civil, las llamadas ''misiones médicas'' han recibido el calificativo de trabajo forzoso por parte de la Oficina del Alto Comisionado de los Derechos Humanos.
Otras organizaciones como la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, Human Rights Foundation y el Comité para la Protección de los Derechos del Niño de las Naciones Unidas, también han condenado la exportación de médicos por parte del régimen cubano hacia varios países.