La región italiana de Calabria y el Gobierno cubano acuerdan una nueva forma de contratar a los médicos cubanos que trabajan en esa área, reportó el medio local lI fatto di Calabria.
Con un nuevo decreto firmado por Roberto Occhiuto, presidente de la región italiana Calabria, se especifica que los profesionales cubanos "también podrán ser contratados con contrato subordinado a plazo fijo en cumplimiento del convenio colectivo de los directivos médicos vigentes". Y por tanto, ya no solo con un contrato freelance.
"Las formas contractuales señaladas —prosigue el decreto—, ambas previstas en el texto refundido sobre inmigración del Decreto Legislativo 286/1998, deben estar precedidas de una autorización específica del Estado cubano a través de Comercializadora de Servicios Médicos Cubanos S.A. (CSMCSA), para la suscripción del contrato de trabajo por profesionales individuales".
El resto del acuerdo permanece sin cambios. Es decir, "la tarifa a pagar por cada profesional individual contratado, según la normativa y precios vigentes en Italia, es igual a 34,50€/hora. Lo dispuesto en el convenio fija el importe de la retribución mensual por cada médico en 4.700 euros".
Tanto lI fatto di Calabria como el decreto que cita su nota se refieren al pago que se hace "por" los médicos. Es decir, el régimen cubano seguirá controlando más del 70% de los ingresos que generan los galenos.
Este "cambio" del Gobierno de Calabria ignora los múltiples señalamientos que realizaron un grupo de eurodiputados a través de una carta el mes pasado.
DIARIO DE CUBA consultó sobre este "cambio" a Javier Larrondo, el presidente de la ONG Prisioners Defenders.
"Dado que no cambian la naturaleza ni las condiciones en la que van los médicos cubanos a Italia —explica Larrrondo—, entendemos que es una maniobra para mantener bajo una cobertura legal la contratación de estos médicos".
Prisioners Defenders ha denunciado reiteradamente las violaciones que se cometen durante las misiones médicas del Gobierno cubano.
"No aseguran que los médicos cobren el dinero completo, tampoco que puedan mantener su pasaporte o transitar libremente sin un toque de queda. Es decir, ninguna de las situaciones denunciadas reciben respuesta ahora. Esto es solo una maniobra para escapar legislativamente de las vulnerabilidades que tiene la forma de contratación. Por tanto, hay que poner énfasis en la enorme violación de derechos humanos que se va a cometer en Italia al contratar a esos médicos", concluye el presidente de Prisioners Defenders.
Caballero, que los letrinamericanos se presten a este tipo de chanchullo inmoral e indigno es de esperarse, pero la verdad que Italia se debería respetar más. Despreciable.
Y que paso con la presidenta fascista que pusieron en el poder. O ella está nada más para imitar a Trump en eso de la inmigración ilegal en el país.
Meloni no es la presidente/a de Italia, ella es la primer ministro/a y no tiene las facultades para abordar este asunto.
Quien lo puede hacer es Sergio Mattarella, que es el presidente del país, sin embargo, él no hará nada.