Los congresistas Mario Díaz-Balart, María Elvira Salazar y Carlos A. Giménez enviaron una carta este lunes a la Administración Biden en la que expresan "preocupaciones" y solicitan "respuestas" a una serie de preguntas sobre el "aparente cambio en la política de Estados Unidos hacia el régimen en Cuba", señaló una nota de prensa publicada en la página oficial de Díaz-Balart.
En la misiva, los representantes solicitan aclaraciones sobre el anuncio de la Administración Biden de enviar ayuda humanitaria a Cuba tras el paso del huracán Ian y qué está haciendo para asegurar que esta ayuda no caiga en manos del régimen.
"El 18 de octubre de 2022, el Departamento de Estado y USAID anunciaron 'dos millones de dólares en asistencia humanitaria para apoyar las necesidades de alojamiento de la mayoría de las comunidades vulnerables que se han visto afectadas por los efectos devastadores del huracán Ian en Cuba', que se financiará por medio de la cuenta de Asistencia Internacional en Casos de Desastre (IDA)", recordaron los legisladores republicanos.
Añadieron que, "según el anuncio, la 'asistencia humanitaria se entregará directamente al pueblo cubano, no a través del Gobierno cubano, por medio de organizaciones independientes de confianza que operan en el país con una larga presencia en las comunidades afectadas por el huracán'".
Igualmente, citaron la entrega, por parte de la USAID, de 43 juegos de "equipos contra incendios" y otros 57 juegos adicionales en una fecha no especificada.
"Mientras tanto, nos preocupa profundamente que la Administración Biden nos haya informado que comenzará a devolver de inmediato a los ciudadanos cubanos que escaparon de la Cuba totalitaria, y que está iniciando vuelos mensuales con ese fin", apuntaron los congresistas. Díaz-Balart, Salazar y Giménez hicieron referencia a unas recientes declaraciones de Biden de que "no es racional" enviar de vuelta a sus países a migrantes de Cuba, Venezuela y Nicaragua.
"La situación en Cuba no ha mejorado en el mes transcurrido desde el comentario del presidente, especialmente tras la devastación del huracán Ian que provocó el anuncio de dos millones de dólares en ayuda humanitaria. De hecho, devolver ciudadanos cubanos a Cuba en este momento parecería aún menos 'racional' hoy", dice la carta.
"Nos preocupa que esta asistencia, aunque sea bien intencionada, sirva para apuntalar una dictadura brutal que utilizará los dólares de los contribuyentes estadounidenses para encarcelar, censurar y oprimir aún más al pueblo cubano. No tenemos ninguna duda de que el régimen intentará utilizar estos recursos para reforzar su control sobre el poder, y esperamos que (Washington) tenga medidas de seguridad significativas y exhaustivas para garantizar que eso no suceda", apuntan los congresistas de Florida.
La misiva cierra con una treinta de preguntas a los departamentos de Estado y de Seguridad Nacional, entre las cuales figuran: "¿Cómo determina el Gobierno de los Estados Unidos las necesidades más urgentes de la Isla? ¿Se basa en fuentes independientes, informes de prensa u observación directa? ¿O está determinando las necesidades en la Isla en función de las solicitudes del régimen y los datos que proporciona a los EEUU?"
"¿Qué factores se considerarán para determinar si se debe brindar más asistencia? ¿La dictadura cubana ha solicitado ayuda adicional? ¿Estados Unidos ha recibido algo a cambio?", también preguntaron.
Entre las interrogantes de tema migratorio, aparecen en el texto las siguientes: "En conversaciones sobre migración a principios de este año, ¿Cuál de las partes solicitó la repatriación de ciudadanos cubanos a la Cuba totalitaria? ¿Cómo monitoreará el Gobierno de EEUU a los cubanos repatriados que podrían enfrentar represalias, como exigen los Acuerdos de Migración? ¿Por qué los ciudadanos cubanos que intentan ingresar a Estados Unidos reciben formularios I-220a, lo que podría privarlos de un estatus que les permitiría estar bajo la Ley de Ajuste Cubano?".
La semana pasada, los mismos legisladores enviaron una carta a los secretarios de Estado y de Seguridad Nacional, Anthony Blinken y Alejandro Mayorkas, en la que pidieron la reactivación del programa de refugio conocido en inglés como Refugee Admissions Program in Cuba (USRAP) en la embajada de EEUU en La Habana.
Probablemente perdieran menos tiempo con preguntarle a los que votaron por Biden, que son los verdaderos responsables de todo lo que haga y no haga el inepto viejo.