Italia dona más de cinco millones de euros para un proyecto de desarrollo agrícola en La Habana

El Gobierno de Italia, a través de su Ministerio de la Agricultura y de la Agencia Italiana de Cooperación para el Desarrollo (AICS) entregó 5,4 millones de euros al Estado cubano para un programa que busca incrementar la producción local de alimentos en La Habana.

De acuerdo a un reporte publicado en Tribuna de La Habana, el acuerdo beneficiará a los municipios con mayor potencial agrícola de la capital: Boyeros, La Habana del Este, Guanabacoa, Arroyo Naranjo y Cotorro.

Con una duración de 36 meses, el programa pretende que los productores locales asuman un mayor protagonismo en la mejora de sus condiciones de trabajo, ingresos familiares, nivel de capacitación, organización y equidad de género, sobre bases de la sostenibilidad de la producción de frutas, hortalizas y ganado menor.

Bárbara María González Rodríguez, coordinadora del proyecto de Autoabastecimiento Alimentario y Desarrollo de Iniciativas Económicas Sostenibles, llamado HABAMA, afirmó que actualmente se realiza el diagnóstico para la identificación de los posibles beneficiarios de la iniciativa en tres líneas fundamentales: hortalizas, frutales y ganado menor, para posteriormente comenzar su ejecución.

El coordinador del Programa de Alimentos y Distribución del Gobierno de La Habana, Julio Martínez Roque, dijo que se trata del mayor proyecto de colaboración que se ejecuta en la capital y su importancia radica en el impulso que dará a la producción de alimentos, para contribuir al Programa de Autoabastecimiento Municipal (PAM) y a la soberanía alimentaria.

Por su parte, el delegado de la Agricultura de La Habana, Esmeregildo Martínez Games, dijo que pese a que la capital del país tiene el 20% del total de la población "dispone de apenas el 0,4 % de la superficie cultivable".

De las 30 libras per cápita mensuales que propone el plan de seguridad alimentaria, al sistema agropecuario habanero produce actualmente solo 3,5 libras (11,6 %) y está comprometido a llegar a 10 libras (el 33 % del total), según el funcionario.

"En la medida en que la capital produzca más, dependería menos de otras provincias hermanas, lo cual garantiza estabilidad en el suministro de alimentos", agregó.

"La Habana es fuerte en la producción de hortalizas, especialmente, las de hojas. Es un reto posible acercarse o garantizar las diez libras que el país propone con producciones propias", añadió Martínez Games, y aseguró que el "proyecto va a salir bien porque los habaneros nos lo hemos propuesto, pues tenemos que garantizar la estabilidad alimentaria y quedar bien con los pueblos hermanos que nos ayudan, demostrando que es posible lograr en la provincia, por primera vez, un proyecto de tal envergadura".

A pesar de que el Gobierno cubano suele recibir numerosos donativos del exterior para el desarrollo de la agricultura, varios expertos consideran que liberando las fuerzas productivas y cambiando mecanismos que desalientan la labor de los agricultores, como es el de ACOPIO, la producción en la Isla podría crecer considerablemente.

En el último año la escasez de todo tipo de alimentos se ha agudizado notablmente en el país, lo que lo que ha llevado al Gobierno a pedir ayuda al Programa Mundial de Alimentos (PMA).

Además, la producción agrícola, ya deprimida por la carencia de insumos e incentivos económicos para los campesinos, recibió con la Tarea Ordenamiento, aplicada por el Gobierno a partir de enero último, un golpe demoledor.  

Asimismo, las autoridades han impuesto topes de precios en los agromercados con la esperanza de contener su incremento desmesurado, pero ello solo ha contribuido más al desabastecimiento.