Oficiales de la Policía cubana (PNR) ocuparon 53 sacos de azúcar refino a un ciudadano residente en la comunidad de Barreto, cerca de Minas, en la provincia de Camagüey, quien se proponía venderlos a productores de cremitas de leche, según un reporte del Noticiero de Televisión este lunes.
"Se detectó en la vía pública un tractor del sector particular, en el cual se trasladaban 53 sacos de azúcar refino para su venta ilícita", dijo el mayor Luis Ocaña Benítez, instructor penal de la PNR.
Según la autoridad, en el momento de la detención, el conductor del tractor no portaba la documentación de la mercancía que transportaba, por lo cual fue trasladado a la unidad policial del municipio de Minas.
"Con los resultados del interrogatorio, pudimos conocer que esta azúcar procedía de la fábrica de fideos del municipio de Nuevitas, y el sospechoso adquirió la carga a través del administrador de dicho centro, con el objetivo de comercializarla de manera ilícita por el valor de 350 pesos cubanos cada saco y repartir la ganancia entre ellos", dijo el instructor penal.
En un registro al domicilio del administrador de la fábrica de fideos, fueron decomisados 14.000 pesos cubanos, "al igual que la documentación que avalaba el movimiento del azúcar desde el almacén hasta el área de elaboración".
Ocaña Benítez dijo que "el azúcar estaba destinada a la elaboración de raspaduras y caramelos para la venta liberada a la población y este ciudadano realizaría la documentación para avalar la venta ficticia y posteriormente haría el depósito del efectivo por la venta de dicho producto".
Según el oficial, los acusados se mantienen bajo el proceso de instrucción y se encuentran bajo la medida cautelar de prisión provisional.
En los últimos meses, marcados por una severa crisis económica y de desabastecimiento de alimentos en Cuba, han aumentado los reportes acerca de este tipo de delitos.
Con el agravamiento de la crisis económica que sufre la Isla tras el comienzo de la pandemia del coronavirus son casi diarios los reportes en la prensa oficial que señalan a ciudadanos cubanos, presuntamente implicados en delitos de "actividad económica ilícita", como responsables de la situación del país.
En algunas ocasiones la estrategia gubernamental no salió bien, como fue el caso del llamado "Rey del Queso", un campesino cubano dedicado a fabricar el mencionado producto, cuya sanción generó un amplio rechazo en la población, pues en apariencia el ciudadano logró ser más eficiente en su labor que la mayor parte de las entidades estatales con el mismo encargo.
Estos trabajos periodísticos también han sido muy cuestionados desde el punto de vista ético, pues en muchas ocasiones exponen la identidad de los acusados, que en la mayor parte de los casos son presentados como culpables sin haber sido juzgados.
Miguel Díaz-Canel comentó el pasado mes de junio y ratificó recientemente en reuniones gubernamentales que este tipo de cobertura periodística, idea de Raúl Castro, "llegó para quedarse".
Se jodieron las cremitas de leche
Necesitaba los sacos para hacerse pantalones. ¡Gobierno mal pensado siempre!