La noche de este lunes regresa a La Habana la brigada médica enviada por el Gobierno de Cuba a Italia para combatir el Covid-19, y las autoridades han anunciado un recibimiento que incluye una caravana que atravesará parte de la ciudad capital, actualmente bajo estrictas medidas de confinamiento debido a que allí está el epicentro de la pandemia en la Isla.
"En las zonas por donde transitarán serán recibidos con fuertes aplausos por nuestro pueblo desde sus balcones y azoteas", anunció en su perfil en la red social Twitter el Ministerio de Salud Pública (MINSAP).
Los profesionales, que integran la brigada Henry Reeve, partirán al Centro Internacional de Salud La Pradera, donde reciben rehabilitación pacientes extranjeros que se atienden en Cuba y figuras políticas afines al Gobierno cubano, para hacer una cuarentena de dos semanas, reportó la agencia oficial Prensa Latina.
Integrada por 36 médicos, 15 enfermeros y un especialista en logística, según las autoridades cubanas, el grupo salió hacia Italia el 22 de marzo pasado, cuando esa nación europea era el epicentro de la pandemia en Europa, y trabajaron en la región de Lombardía, la más afectada por la enfermedad.
El grupo partió del aeropuerto de Malpensa, el principal de Milán, capital de la región de Lombardía, y tomó un vuelo de la aerolínea Blue Panorama.
Antes de partir, fueron despedidos por autoridades regionales, el embajador de la Isla en Italia, José Carlos Rodríguez, representantes del movimiento de solidaridad y cubanos residentes en ese país, reportó la emisora oficial Radio Rebelde.
Los medios oficiales han dedicado artículos laudatorios al trabajo de los sanitarios. Miguel Díaz-Canel escribió en Twitter a propósito del recibimiento: "El abrazo reservado de un país. Recibiremos hoy con todo cariño y admiración a nuestros héroes de batas blancas".
Según el ministro de Salud Pública, José Ángel Portal, La Habana ha enviado desde que comenzó la pandemia 34 brigadas médicas a 27 países, que se sumaron a otras 59 "misiones" que mantiene en varios países.
La brigada médica que estuvo en Italia fue una idea que partió de la Associazione Nazionale di Amicizia Italia-Cuba, "la primera organización social italiana en recomendar públicamente a las autoridades de este país considerar, en medio del quebranto sanitario ocasionado por la expansión de la Covid-19, la conveniencia de solicitar a Cuba el envío de ayuda médica de emergencia", indicó Radio Rebelde.
"Ese reclamo pronto fue secundado por otras organizaciones y personas de distintos sectores, creándose en aquellas circunstancias un estado favorable en la opinión pública del país, que propició que las autoridades regionales de Lombardía formalizaran la solicitud, al Ministerio de Salud y a la Embajada de Cuba, de contar con médicos y enfermeros cubanos", agregó la nota.
Contrasta la amplia cobertura y reconocimiento público que ha recibido este grupo de médicos con la discreción con que La Habana ha informado acerca de otras brigadas, como la que a fines de abril partiera hacia México.
Por este grupo, de 585 médicos y enfermeros, el Instituto de Salud para el Bienestar (INSABI, nacional) y el Gobierno de la Ciudad de México ha pagado 6.255.792 dólares, según reveló DIARIO DE CUBA.
Sin embargo, La Habana mantiene en secreto tanto el salario como las condiciones de trabajo en que obliga a ejercer a sus profesionales.
Las relatoras especiales de la ONU sobre las formas contemporáneas de esclavitud y sobre la trata de personas pidieron explicaciones a La Habana por estas "misiones médicas", advirtiendo que las condiciones laborales podían considerarse de "trabajo forzoso". Las autoridades cubanas no respondieron en el plazo otorgado, de 60 días, y aún siguen sin hacerlo.
El reclamo de las relatoras siguió a una denuncia presentada en mayo de 2019 ante la ONU por la organización Cuban Prisoners Defenders, que incluyó pruebas y 110 testimonios de médicos cubanos sobre los abusos a los que han sido sometidos por el Gobierno de la Isla.
Cuban Prisoners Defenders también ha llevado el caso de los médicos ante la Fiscalía de la Corte Penal Internacional (CPI) y ha acusado a Raúl Castro, Miguel Díaz-Canel y otros funcionarios de "crímenes de lesa humanidad".
