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Economía

Díaz-Canel pide consejo a los economistas y los economistas lo complacen

Son sugerencias que juegan con la cadena pero no tocan al mono de la economía de Cuba.

Los Ángeles
Bodega en La Habana.
Bodega en La Habana. Reuters

En Cuba han caído los ingresos por el turismo, por la explotación de médicos en ultramar y por la exportación de bienes, que en total en 2019 solo aportaron unos 7.500 millones de dólares, en vez de los 17.500 millones que se obtenían hace unos cinco o seis años.

Solo el cash que llega de EEUU en remesas, paquetes y visitas se mantiene más o menos estable, que sumaron unos 7.000 millones en 2019.  Pero eso no basta para mantener a flote una economía que no es capaz ni de sustentarse a sí misma. Los cubanos de a pie viven cada vez peor.

Se trata de la etapa final del modelo comunista estalinista que suprimió en el país la libertad económica y  la racionalidad que rige el mercado en el mundo normal. Sanciones económicas y pretextos aparte, lo cierto es que corriendo ya el año 1962 de la "revolución" la economía cubana se ubica entre las más pobres de Occidente.

¿Ante semejante panorama qué hacen los gobernantes "revolucionarios" para que los cubanos no vivan tan mal?  Nada. O sí hacen, lo empeoran todo. Como ellos viven como ricos potentados y no carecen de nada, insisten en que el modelo de economía estatal es superior al de libre mercado y que solo hay que hacerle algunos ajustes técnicos y burocráticos para perfeccionarlo.

Para hacer dichos ajustes Miguel Díaz-Canel pidió su concurso a la Asociación Nacional de Economistas y Contadores de Cuba (ANEC). Les solicitó propuestas para la renovación de la economía estatal con vistas a promulgar una  Ley de Empresas.

Esa Ley de Empresas, de la que se viene hablando hace años,  será  la "idiotización" institucional completa ya del castrismo en materia económica. Cuando es historia antigua que 33 de los 35 países (menos Cuba y Corea del Norte) comunistas en el siglo XX tiraron el sistema de economía estatal centralizada a la basura por inviable, el régimen cubano no solo se niega a desmontarlo, sino que lo pretende afianzar. No importa que el país ya está en ruinas a causa de ese sistema.

La ANEC, que representa a unos  82.000 economistas y contadores (¿para qué tantos si no pueden aportar nada útil a la economía?) complació a Díaz-Canel  y presentó sus propuestas, a imagen y semejanza del dictador Castro II y la elite político-militar.

Son sugerencias que juegan con la cadena pero no tocan al mono: el modelo económico estatista. Se basan en subterfugios tecnocráticos. No van al fondo del problema, que es la necesidad de desmantelar el modelo de economía centralmente planificada.

Para "hacer más eficiente" el sector estatal, los economistas oficialistas entre otras cosas recomiendan separar las funciones estatales y empresariales; descentralizar el comercio exterior —claro, no proponen que el sector privado pueda también importar y exportar—; así como mayores incentivos financieros para la sustitución de importaciones; que el sistema bancario del Estado apoye más a las empresas estatales (¿aunque registren millonarias pérdidas?).

El cálculo económico no salvó al socialismo

También sugieren mayor autonomía empresarial, que las entidades estatales puedan definir sus proveedores y clientes, precios, salarios, y otras menudencias  técnicas que tantas veces se han manoseado  durante décadas, desde que en 1976 se implantó el llamado cálculo económico que se aplicaba en la Unión Soviética desde la muerte de Stalin.

Según dicha modalidad económica, que no salvó de su extinción al socialismo, las empresas soviéticas estatales tenían bastante autonomía y obtenían un porcentaje de las utilidades si cumplían el plan trazado. Las empresas decidían los surtidos a producir y las inversiones a realizar. Y los trabajadores recibían primas en dinero y obtenían parte de las ganancias si lograban reducir los costos de producción, o lo mantenían bajo.

En Cuba el cálculo económico, al que el "Che" Guevara se oponía visceralmente porque lo consideraba una variante del capitalismo, recibió el burocrático nombre de Sistema de Dirección y Planificación de la Economía (SDPE). Castro puso al frente de ese sistema a Humberto Pérez, un profesor de Economía Política marxista formado en Moscú, a quien nombró presidente de la Junta Central de Planificación (JUCEPLAN), que era algo así como el ministerio estalinista de Economía.

La aplicación del SPDE coincidió con el aumento de los subsidios soviéticos a Cuba. Se abrieron los mercados libres campesinos, se les dio cierta autonomía a las empresas para autofinanciarse y para entregar estímulos monetarios a los trabajadores en vez de banderitas y diplomas. La producción de bienes y servicios se recuperó un poco y la población sintió un pequeño alivio con el llamado "mercado paralelo" estatal.

Pero al final todo aquello fue un "engañabobos", pues se siguió asfixiando a las fuerzas productivas e impidiendo el desarrollo económico y social del país. Y al comenzar la perestroika de Gorbachov, Castro I se espantó, regresó al estalinismo clásico y lanzó el "Proceso de rectificación de errores y tendencias negativas", en 1986. Desmanteló el SDPE, acusó a Humberto Pérez de traidor al socialismo y lo expulsó del Buró Político y del Comité Central del Partido Comunista.

La economía entró en recesión, y no hubo hambruna solo por los subsidios soviéticos. Al desintegrarse la URSS en 1991, Cuba cayó en la más devastadora crisis económica de toda su historia republicana. El Producto Interno Bruto (PIB) se desplomó en un 35% (algo nunca visto hasta entonces en el mundo en tiempos de paz), y vino el "Periodo Especial".

Ello obligó al dictador al legalizar la circulación del dólar, los mercados campesinos, resucitó el cuentapropismo y abrió un poco la mano de nuevo hacia el cálculo económico soviético, que se volvió a aplicar esta vez en 767 empresas, el 32% de todas las existentes.

Pero en 2002, al comenzar el flujo de petrodólares de Hugo Chávez a La Habana, Fidel ordenó otra vez un regreso a la centralización estalinista-guevarista. Y, al traspasar el mando en 2006 a su hermano, de nuevo se fue regresando al cálculo económico, que ahora se quiere "perfeccionar"  con la ayuda de los economistas oficialistas.

Tirar al mar el estatismo socialista

Un destacado economista cubano residente en la isla, Pedro Monreal, que no ha roto con el régimen pero hace críticas que otros no se atreven hacer, cuestionó públicamente el paquete de medidas propuestas por la ANEC. "Una de las lecciones de otros procesos de reformas de modelos de planificación centralizada —opinó Monreal—  es el fracaso de la tentación de pensar que mejoras técnicas de gestión permitían evadir la necesidad de reformas fundamentales en el modelo".

Un poco más allá de lo expresado por dicho economista, el punto aquí es que todos los remedios y afeites que pretendan aplicarle al sistema de economía centralmente planificada serán inútiles. Seguirá siendo un desastre. Y la razón es muy simple, se trata de un esquema que niega la naturaleza humana. Es el pecado original de Karl Marx y sus seguidores.

Es lamentable que la ANEC se aparezca a estas alturas con sugerencias para apuntalar al modelo económico estatal causante del empobrecimiento y el atraso social de los cubanos. No tienen excusa esos economistas oficialistas para hacer semejantes propuestas sin cuestionar el sistema como tal de economía centralmente planificada. Si aprendieron economía real y no musarañas teóricas ficticias, ellos saben bien que lo que hay que hacer es poner punto final al estatismo socialista centralizado. Y punto.

O se tira al mar el sector estatal de una vez y se liberan las fuerzas productivas, o la sociedad cubana viajará en nivel de vida varias centurias atrás.

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11 comentarios

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Profile picture for user Pedro Benitez

Un análisis interesante. No creo que "Se trata de la etapa final del modelo comunista estalinista" porque para desarticular el totalitarismo es fundamental romper el monopolio comercial de los militares cubanos.

Profile picture for user cubano libre

Tengo la solución para los problemas de la economía de Cuba.
Con tan solo nombrar a los once millones y medio de habitantes miembros del Buró Político ya todos tendrán resuelto los problemas de alimentación, todos podrán comer cuándo se les antoje: jamón serrano, langosta, camarones, carne de res, todo tipos de quesos......tendrán solucionado el transporte, todos tendrán más de un auto con chofer, con tan solo traer once millones y medio de choferes hindúes, resuelto.........tendrán solucionado la vivienda, todos vivirán en mansiones con piscina en el barrio de Mariela Moco Pegado; se les asignará una querida ó un querido aquél que lo necesite (recurrir a prostitutas y prostitutos hindúes, hay millones de habitantes en India tratando de pirarse a la Conchinchina), todos tendrán que trabajar menos y reunirse con el resto del Buró Político y solo dirigir (tú pa'cá, tú pa'llá) a los hindúes por supuesto; y se les asignará un buen salario con dollares, euros y barras de oro de Venezuela.

Profile picture for user EL BOBO DE LA YUCA

Para el que se pregunte por dónde anda Humberto Pérez (al que menciona el autor de este artículo) y, lo que es más importante, qué anda pensando, puede consultar https://elestadocomotal.com… Fue publicado en mayo de 2019. En él relaciona un conjunto de medidas que ciertamente consideró "valientes" o arriesgadas, por lo que no pierde tiempo en justificarse: "Solo somos revolucionarios, tan partidarios del socialismo como el que más", aunque al final comete un error (?involuntario?) cuando dice: ""Demuéstresenos que estamos equivocados. Si se nos demuestra [...] callaremos. De lo contrario seguiremos cumpliendo lo que es nuestro derecho y deber como revolucionarios, patriotas y pro socialistas, marxistas y martianos." ?De lo contrario? ?Sólo "seguirá cumpliendo con su deber como revolucionario" si NO se le demuestra que está equivocado?

Profile picture for user EL BOBO DE LA YUCA

Los periodistas de Granma, tal vez sin proponerselo, ironizan lo que ocurre en la economía cubana. Miren este titular (http://www.granma.cu/cuba/2…) :"Disponible plataforma digital que «encadena» al sistema empresarial cubano" !ENCADENA al sistema empresarial!

Profile picture for user EL BOBO DE LA YUCA

Decir "como ellos [los gobernantes y sus familias] viven como ricos potentados" es una exageración. Viven mucho mejor que el resto de los cubanos, pero muy por debajo del nivel de cualquier "medio rico" del mundo occidental.

Profile picture for user Ares I

Yuca, esa es una de las verdades como templos, que de conocerse y tomar conciencia esos mismos dirigentes, sacudiaria al sistema desde la raiz.
Un lugar comun de todos los emigrantes es que, a poco de llegar, con un trabajo estable y un pago normal, se maravilla uno del poder adquisitivo de ese salario, de cuanta comida se consigue por una fraccion de ese salario. un poco mas adelante puedes dejar el transportation y salir de un dealer con un carro 0 millas, tal vez no de lujo, pero nuevo. ¿cuantos en cuba se ponen en ese lugar?
Esas cosas son las que parecen imposibles de creer a todos esos infelices que ejecutan las peores atrocidades y se engañan a si mismos por una miseria y creen que ese es el techo de todo ser humano.
Cuando esa verdad cale en las mentes de esos dirigentes, pudiese comenzar a cambiar la marea...

Profile picture for user EL BOBO DE LA YUCA

Respetando las diferencias, aqui va una cita del magnífico "El fin del Homo sovieticus" de la Premio Nobel Svetlana Aleksievich en traducción del cubano Jorge Ferrer: "¡Por Dios! El nivel de vida de los líderes de la URSS era equiparable al de cualquier empresario de poca monta. ¡Nada que ver con el de los oligarcas de hoy, nada de nada! No compraban yates con duchas de las que mana champagne."

la Urss de antaño tampoco tiene nada que ver con la rusia de hoy

Profile picture for user EL BOBO DE LA YUCA

No entendí. ?Querias decir "la Urss de antaño tampoco tiene nada que ver con la Cuba de hoy"?

Yo le daría un consejo al bitongo corrupto y maricón; ¡¡VETE A LA MIERDA!!