Tras la publicación este martes de un grupo de regulaciones en la Gaceta Oficial de la República de Cuba, referentes a la comercialización de productos agropecuarios, entre ellos la carne de res, el economista cubano Pedro Monreal afirmó que se continúa "trabando" el mercado por la concepción de precios aplicada.
En ese sentido, el especialista publicó en su cuenta de Twitter que "además de las resoluciones sobre la carne vacuna y la leche, se ha publicado el Acuerdo 35 del Consejo de Ministros y la Resolución 137 del Ministerio de Agricultura", lo que calificó como "regulaciones más flexibles", pero que incluyen "una concepción de precio que continúa 'trabando' el funcionamiento del mercado".
Al respecto, Monreal explicó que el Acuerdo 35 expresa, de forma general, "que los precios deben considerar el 'comportamiento del mercado'", pero alegó que "el propio Acuerdo enfatiza los márgenes comerciales preestablecidos y los costos".
Además, cuestionó que "la Resolución 137 define que los precios empresariales son los precios de referencia".
Finalmente, el experto concluyó que "es poco probable que el tipo de formación de precios expresado" en ambas disposiciones "tenga probabilidades de reflejar de manera efectiva ese importante componente de la realidad económica que es la relación entre oferta y demanda".
Las disposiciones legales publicadas en la Gaceta Oficial esta semana con el objetivo de formalizar una parte de las más de 60 medidas anunciadas por las autoridades cubanas para "recuperar la producción agropecuaria" no han estado libres de polémica.
Parte de las críticas que han recibido se deben a lo recogido en el Decreto 35 del Consejo de Ministros sobre la comercialización de productos agropecuarios, pues deja claro que "el Estado regula el seguimiento y control de la producción, la contratación, el establecimiento de las prioridades en los destinos, los balances de productos, el control de los precios, la comercialización en condiciones excepcionales, la siembra y el uso de la tierra".
Los campesinos cubanos podrán vender productos como la carne de res de forma libre, pero después de cumplir con una serie de requisitos, como no reducir la masa ganadera y satisfacer los planes estatales.
El citado Decreto establece una multa de 2.000 pesos para quienes incumplan con "la obligación de registrarse en el sistema informático de planificación agropecuaria".
Pero además de la regulación de los precios, las nuevas normas incluyen numerosos requisitos para realizar dichas actividades económicas, así como complejos procesos burocráticos para efectuar la comercialización.
Miguel Díaz-Canel dijo al presentar las medidas "para recuperar la producción agropecuaria" que el Gobierno cubano no puede pensar en el largo plazo. La Isla vive una creciente crisis económicaagudizada por la pandemia de coronavirus, la falta de liquidez y las barreras del propio Estado, entre otros factores.
Sin embargo, numerosos economistas coinciden en que las medidas anunciadas no son suficientes para revitalizar los campos cubanos.
