Otra vez, el viernes 4 de octubre, el preso político cubano José Daniel Ferrer se quedó sin la visita familiar reglamentaria; el joven Luis Robles sufrió amenazas de nuevas "medidas drásticas" por parte de la Seguridad del Estado, mientras siguen saliendo a la luz más testimonios de las deplorables condiciones de las cárceles cubanas y el penoso estado de salud que sufren las personas privadas de libertad.
Ana Belkis Ferrer Garcia denunció en Facebook que la esposa de su hermano José Daniel y dos hijos de él se dirigieron una vez más a la prisión Mar Verde en Santiago de Cuba, con la intención de verlo y nuevamente les fue negada esa posibilidad.
"Solo aceptaron la jaba de alimentos y productos de higiene", añadió la opositora exiliada, quien recordó que el régimen impide a su hermano desde marzo de 2023 el encuentro con su familia. Ya son 19 meses consecutivos que el líder de la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU) se ve privado del derecho a visitas familiares y conyugales, así como a llamadas telefónicas.
Este fin de semana Yindra Elizastigui Jardines, madre del preso político cubano Luis Robles Elizastigui, informó al centro legal Cubalex que la Seguridad del Estado amenazó a su hijo con "medidas drásticas" si ella continúa denunciando públicamente su situación y exigiendo su libertad.
"Estas amenazas son parte de una estrategia del régimen para intimidar y silenciar a los familiares de las personas encarceladas por motivos políticos en Cuba, con el objetivo de impedir que denuncien las violaciones cometidas contra sus seres queridos", condenó Cubalex.
Elizastigui Jardines, sin embargo, dijo en un audio que "mientras tenga voz" seguirá "gritando por la libertad" de Luis Robles y reclamó libertad para él y todos los presos políticos.
También la revista Alas Tensas se hizo del caso de lsa Ramos, madre cubana de un niño con autismo y esposa del preso político, Yasmany González, quien describió en una directa en Facebook las terribles condiciones en las que se encuentra su esposo a quien pudo visitar el viernes.
"Lo veo más deteriorado, flaco, en una situación cada vez peor. Físicamente está mal, le faltan todos los dientes, está demacrado, parece un viejito, lo han destruido en el Combinado del Este", denunció.
Ramos dijo que la visita fue un horror y calificó la prisión habanera como "un lugar muy desagradable", con hacinamiento y "con una vibra muy negativa".
"Cada vez que vengo del Combinado, llego con migraña, destruida, como si me pasara un tren por arriba", dijo la mujer que, además, denunció a la falta de medicamentos, alimentos y de asistencia de todo tipo para los niños y niñas con autismo en Cuba.
El preso político cubano Denis Hernández Ramírez, quien cumple una condena por manifestarse en su natal San Antonio de los Baños, Artemisa, durante las históricas protestas del 11 de julio de 2021, dijo a Martí Noticias que estar en la cárcel de Guanajay es vivir en una permanente "violación de derechos a la dignidad humana por los tratos crueles, la violencia, las amenazas, el maltrato psicológico, las condiciones higiénico sanitarias horripilantes, la alimentación escasa e inadecuada".
Hernández Ramírez dijo durante una llamada telefónica desde el penal que la situación que describe debe ser igual en todos los establecimientos penitenciarios cubanos.
"Esto ha sido parte del plan de torturas de la dictadura a todo aquel que piense diferente. Recuerdo el 13 de noviembre del 2021, cuando muchos de mis compañeros y yo, decidimos plantarnos para exigir la libertad y la policía política con escandalosas golpizas, casi detuvo aquella epopeya", declaró Hernández.
Los condenados por el 11 de julio recluidos en la prisión de Guanajay han protagonizado numerosas acciones y huelgas de hambre en reclamo de la libertad y de que se les otorguen los beneficios carcelarios estipulados en la legislación del país.
El preso político denunció que una queja por la mala alimentación y la deficiente atención médica es catalogada por los mandos militares como indisciplina y conlleva al confinamiento en celda de castigo o a la negación de beneficios.
Agregó que los prisioneros políticos sufren mítines de repudio, organizados por los carceleros con reos comunes, por negarse a participar en las actividades político-culturales.
"La Seguridad del Estado envía reclusos a accionar en nuestra contra con fines violentos, difamatorios y separatistas", apuntó el preso por el 11J, en referencia al denominado Consejo de Reclusos formado por internos escogidos por los oficiales de orden interior. A cambio de prebendas hostigan a los presos políticos, los provocan e incluso los agreden verbal y físicamente.
Según Hernández Ramírez, ha aprendido que mantener una "correcta disciplina no es el método real para llegar a un campamento de trabajo o una condicional".
"He visto a muchos de mis hermanos enviados a prisiones lejanas por el hecho de tratar de unirnos entre todos para pelear por el derecho a la libertad", dijo.
Por otro lado, el Movimiento Cristiano Liberación (MCL) recordó que este 6 de octubre el preso político Yandier García Labrada cumplió cuatro años encarcelado de una sentencia de cinco por los delitos de desacato, atentado a la autoridad y propagación de epidemias.
García Labrada, con domicilio en Manatí, Las Tunas, fue arrestado en 2020 por protestar en una cola para comprar alimentos en esa localidad.
Aunque desde el 19 de enero de 2023 se encuentra en el centro de trabajo correccional Guabineyón 8, en la provincia tunera, la jefatura no le ha otorgado visitas a su hogar. También el tribunal de ejecución ha desestimado las peticiones de libertad condicional a favor de García Labrada, a pesar de que cumple con los requisitos reglamentarios.
El activista del MCL también ha sido castigado con aislamiento prolongado y se le ha negado el acceso a llamadas telefónicas y visitas familiares.
En varias oportunidades el Centro de Documentación de Prisiones Cubanas ha denunciado "que el Estado cubano incumple con las Reglas Nelson Mandela para el tratamiento de los reclusos aprobadas por las Naciones Unidas y otras normativas".