Este lunes por la mañana la presa política Sulmira Martínez Pérez fue llevada bajo un gran operativo de la Seguridad del Estado y la Policía al Tribunal Municipal Popular de Diez de Octubre para realizarle el juicio en su contra. "El juicio lo suspendieron porque la abogada de Sulmira está enferma, ingresada en el hospital con neumonía", según denunció a DIARIO DE CUBA su madre, Norma Pérez.
La madre de la joven precisó que esta suspensión fue a petición de su hija porque, como su abogada se encontraba enferma, en el Tribunal querían ponerle un abogado de oficio y ella no estuvo de acuerdo.
Martínez había sido trasladada días antes desde El Guatao, donde cumple prisión preventiva, hasta Villa Marista para "ser amenazada", agregó Pérez. "Ellos querían que ella se arrepintiera y le dijeron que por ese delito que tiene ahora pueden pedirle de 25 a 30 años de cárcel o la pena de muerte. Ella dijo que no, que ella no se arrepiente de nada. La instructora de Villa Marista también le dijo que se arrepintiera, que esa acción podía ayudarla en la defensa, pero ella no quiere arrepentirse", denunció.
La Fiscalía solicita para Martínez nueve años de privación de libertad por un supuesto "delito contra el orden constitucional" y dos años por presunto "desacato". Como sanción conjunta y única, pide diez años de prisión. A pesar de esto, según denunció la madre de la joven, las autoridades quieren intimidarla con condenas más severas.
"Hablé hoy con mi hija y me dijo que ella quiere que la defienda la abogada que yo le puse. Ahora hay que esperar que la abogada salga del hospital, ya ella tiene lista la defensa, incluso fue un día hasta El Guatao a ver a Sulmira. Me dijeron que hoy la llevaban de Villa Marista para la prisión nuevamente, hasta que la abogada salga del hospital", agregó Pérez, que apuntó que se encontraba actualmente sin acceso a internet por datos móviles.
Explicó además que Martínez "está muy tranquila”, que le dijo que si a ella le toca cumplir 25 o 30 años de cárcel, todavía "está joven para seguir", y que si es la pena de muerte, "también está lista". "Mamá, yo estoy tranquila, ellos no me van a intimidar, ya conozco el juego, no voy a arrepentirme", cuenta Pérez que le dijo su hija vía telefónica.
"Otra cosa importante: la llevaron al Tribunal que tal parecía que estaban trasladando a un terrorista. Una cantidad increíble de carros de la Seguridad del Estado y de patrullas de la Policía. Había muchos oficiales y agentes, los vecinos de la zona estaban alarmados por el gran operativo. Incluso contactaron con los viejitos del PCC (Partido Comunista de Cuba) que están jubilados para que vigilaran. A Sulmira la trajeron en un carro blanco enorme, cuando llegó no la dejaron ni moverse", agregó Pérez en su declaración a este diario.
Anteriormente, en agosto pasado, el régimen cubano había fijado una fecha para el juicio contra Martínez, después de tenerla un año y medio en prisión, pero fue suspendido por las autoridades sin dar explicación alguna a Martínez o a su familia.
Las autoridades están acusando a Sulmira Martínez Pérez, de 22 años, por instar a los cubanos a protestar en las calles contra el régimen y hacer un llamado a un nuevo estallido social, a partir de varias publicaciones que realizó la joven en sus redes sociales.
Martínez no tiene antecedentes penales, sin embargo la Fiscalía ha insistido durante el año y medio que la joven lleva presa en mantener contra ella una "medida cautelar de prisión provisional". En la petición fiscal se acusa además a la joven de "recolectar varias botellas" para supuestamente hacer "cócteles molotov" y lanzarlos contra la tienda Las Guásimas, pero el documento precisa que las botellas no fueron confiscadas durante el registro realizado en la vivienda.
En abril de 2023, Sulmira Martínez fue expuesta en el Noticiero Nacional de la Televisión, realizando una autoinculpación que, según explicó la madre de la joven, se realizó "bajo presión".
