Un grupo de diputados europeos lamentó el viernes la falta de respuesta de la Unión Europea ante la violación de los derechos humanos en Cuba y el aumento de la represión a raíz de la protesta pacífica del Movimiento San Isidro.
El eurodiputado Javier Nart se mostró escandalizado porque la UE hable de diálogo con el Gobierno cubano cuando en la Constitución de la Isla establecen la defensa del socialismo hasta por las armas, como recoge el artículo cuatro. Nart también expresó la incongruencia de que la delegación de la UE en La Habana no permita el acceso de Berta Soler, ganadora del Premio Sájarov en 2005.
El acuerdo de la UE con Cuba no refleja el país donde se dispara la represión, sirve solo para financiar a la dictadura y deja solo a la oposición y la sociedad civil, apuntó el eurodiputado español Hermann Tertsch.
"Tenemos que reaccionar. O Cuba empieza a respetar los DDHH o suspendemos el acuerdo. No se está haciendo un seguimiento de la dictadura, como en el caso del Movimiento San Isidro, la cárcel de Denis Solís y el maltrato permanente que sufre la sociedad civil cubana", afirmó.
Tertsch manifestó "una profunda vergüenza", al igual que el eurodiputado Leopoldo López, también del Partido Popular de España.
"Hay un aire de hipocresía del tratamiento del acuerdo de la UE con Cuba. ¿Por qué no hay comunicados de la UE condenando las acciones contra el MSI? ¿Qué apoyo han recibido de la UE a partir de las acciones violentas en los últimos días? ¿Por qué no se respetan las condiciones de este acuerdo para no enfrentarse a la realidad que sufre la sociedad civil cubana?", cuestionó.
Solo la subcomisión de Derechos Humanos del Parlamento Europeo (PE) expresó su preocupación
Por su parte, el eurodiputado Marcos Ros Sempere apoyó el acuerdo de la UE con Cuba porque propicia el debate de temas de derechos humanos. Ros pertenece al Partido Socialista Obrero Español (PSOE), que gobierna en España con el partido de izquierda Podemos.
Tilly Mietz, presidenta de la Delegación del Parlamento Europeo (PE) para las relaciones con los países de América Central (DCAM), respondió que es fundamental tener abierto el canal de comunicación para resolver los problemas de DDHH y económicos en Cuba.
En la reunión extraordinaria de ese consejo del PE analizaron el Acuerdo de Diálogo Político y Cooperación (ADPC) entre Cuba y la UE. Desde la isla intervinieron varios activistas que pidieron más apoyo de la UE a la sociedad civil independiente, entre ellos Luis Manuel Otero Alcántara del Movimiento San Isidro.
Mietz agradeció a Berta Soler por defender la libertad de expresión y manifestó la preocupación por el arresto de activistas independientes.
Katja Afheldt, jefa de la División para México, América Central y el Caribe del Servicio Europeo de Acción Exterior (SEAE), defendió el acuerdo con Cuba para propiciar una mayor apertura económica, mejorar la estrategia empresarial y lograr alcanzar el respeto de los derechos humanos.
El próximo lunes los embajadores europeos en La Habana se reunirán con el canciller cubano, Bruno Rodríguez, para abordar temas de interés mutuo, entre ellos la preocupación por la persecución al Movimiento San Isidro, la condena de prisión del rapero contestatario Denis Solís y el llamado a un diálogo incluyente, adelantó Afheldt.
La Unión Europea es el principal socio comercial de Cuba. El bloque comunitario invierte más de 200 millones de euros en la Isla, aunque el trabajo común con la sociedad civil y el sector privado supone actualmente el 10% de la cartera, dijo Felice Zaccheo, jefe de Unidad de Operaciones Regionales para América Latina y el Caribe de la Comisión Europea.
La UE quiere aumentar esa cooperación con la sociedad civil y el sector privado, así como con los municipios de Cuba.