Las jóvenes artistas cubanas Adriana Arronte, Laura Lis, Lorena Gutiérrez y Yanelis Mora, radicadas desde hace años en Madrid, presentan en la ciudad española de Valladolid la exposición colectiva Vamos a nombrar las cosas, informó el periódico local Diario de Valladolid.
El poder y su ejercicio de control sobre el ciudadano, el suicidio, el cuerpo como objeto de devoción, la búsqueda de coordenadas y cómo enfrentar aquello que debe permanecer en silencio, son los temas de la exposición inaugurada en la Galería Javier Silva.
"Son retales que conforman mapas abstractos, representaciones de órganos vitales que hablan de lo que somos, antiguos útiles domésticos, complementos que esconden una historia de desesperación y nos revelan síntomas que definen nuestra historia personal, íntima y política como parte de una sociedad", advierten las artistas al referirse a sus obras.
Adriana Arronte pone el énfasis en "momentos de la comunicación entre países, políticas y generaciones, latentes en objetos epistolares"; Laura Lis explora "los ciclos vitales como motores que mueven la vida, los afectos y también las prácticas artísticas, convertidos en piezas rituales que hablan de lo silenciado"; Lorena Gutiérrez Camejo revisita "la historia a partir de la cultura de la cancelación y la censura" y Yanelis Mora investiga "la representación del mapa, como punto de partida, como observatorio y filtro de comprensión", dijo la galería en una nota de prensa.
Arronte presenta las series Política de datos y Expurgo. "Algunos de esos objetos pertenecieron a compañías como la Havana Coal Company, que fue expropiada por el Gobierno", dijo la artista al diario local. "En Cuba se silencian las comunicaciones. La historia la escriben los ganadores con sus políticas arbitrarias", dijo Arronte, que pretende evocar, a través de su obra, el férreo control de la Policía política.
Gutiérrez, por su parte, presenta Soga de seda, un proyecto iniciado a raíz de una investigación para una exposición en Miami que le llevó a indagar en el suicidio en las altas esferas de la sociedad. "La economía, la precariedad material, no constituye un problema, sino que entran en juego otro tipo de presiones psicológicas, como, a veces, las derivadas de la corrupción. La corbata se convierte en una especie de arma con la que atentar contra su propia vida", explica la artista.
"En la Cuba de los 50 se podía ver a la gente vestida de traje por la calle. Después del 59, al triunfar la Revolución, con la búsqueda de un hombre nuevo, de una sociedad igualitaria, se impuso una forma de vestir sin etiqueta, más sencilla. Los que mantuvieron esas formas estaban vinculados al poder", recordó.
Laura Lis presenta varias piezas de su serie Votiva. Sus esculturas, en bronce con un baño de oro de 24 quilates, y sus bocetos bordados buscan deconstruir lo que conocemos como mujer. Enfatiza en el autoconocimiento como un dispositivo de poder, se apega a los ciclos "femeninos" para transformarlos en ritual.
Yanelis Mora despliega un mapa textil donde emplea la técnica de tela teñida sobre fiselina de papel. Sus telas son paisajes cosidos por la memoria. Sus paisajes son fragmentos de geometrías fractales. Mapas que funcionan como terapia.
La Galería Javier Silva está ubicada en la calle Renedo, 8, en Valladolid, y permanece abierta de lunes a viernes de 10:30 am a 2:00 pm y de 7:00 pm a 9:00 pm. Los sábado permanece abierta en el horario de 11:00 am a 2:00 pm.
...maravilla de arte ese que aparece en la foto que ilustra el articulo...una pizca de politica y cualquier cosa se convierte en arte...