El humorista Lázaro Hernández, conocido como "El Flaco" o "Vititi" denunció la censura a la que fue sometido tras criticar a la Televisión Cubana, y el rechazo de la oficialista Unión Nacional de Escritores y Artistas de Cuba (UNEAC) por hacer un humor demasiado "fuerte" para el régimen.
En un primer video de una entrevista difundida por su cuenta de TikTok, Hernández dijo: "No fue una sola vez, fueron varias veces. Una de las que más recuerdo y la más dura fue en pleno espectáculo en la plaza de Bayamo ante miles de personas. Un chiste que decía: 'La Televisión Cubana la inventó Issac Newton'. Entonces me decían, '¿Cómo que Issac Newton? Él inventó la ley de la gravedad'. Y yo contestaba: '¿Y tú quieres cosa más grave que la Televisión Cubana?'".
"Eso me costó... nos citaron a una oficina y pusieron el video mío haciendo el chiste —continuó el humorista conocido como 'El flaco' o 'Vititi'—. Me costó meses (sin actuar), a mí y a otros colegas. Nos separamos. Y después de eso... en Pateando la lata (programa de televisión humorístico), me quitaron un chiste porque yo salía con una gorra que decía Yankees de Nueva York. En fin, barbaridades, tengo para hacer un libro."
En un segundo video compartido en TikTok, cuando una voz en off le preguntó por qué nunca había pertenecido a la UNEAC, Hernández añadió: "Llegó un momento en que sí me interesó (pertenecer a la UNEAC) porque veía tantos artistas ahí, amén de la política. Pero cuando me interesé por ella (la UNEAC) no me aceptaron porque la condición designada para ello... Muchos que ya están fallecidos plantearon que yo hacía un humor muy fuerte para ellos. Yo en teatro hacía un humor y en cabaret hacía otro, siempre fuerte, mi público lo sabe".
Sobre qué lo llevaba a hacer un show "más fuerte" en los cabarets, Hernández añadió: "Es que el público en Cuba (por eso siempre hay que rozar la política, aunque uno no quiera), el público que va a los lugares nocturnos hoy por hoy no es el mismo que iba antes. Antes podía ir el médico, el ingeniero, el panadero o cualquiera. Ahora no, el público que va a estos lugares es más de farándula, incluso de menos estudios, sin discriminar a nadie. Entonces, el humor tienes que hacerlo fuerte porque es lo que le gusta a la gente ahora. El otro humor, el inteligente, no funciona. Eso es lo que ellos (la UNEAC) no entendían. Pero bueno, nada, las cosas de Cuba".
Lázaro Hernández lleva más de dos décadas trabajando como humorista en Cuba. Espacios televisivos como Pateando la lata y A otro con ese cuento le otorgaron gran popularidad como comediante entre las últimas generaciones de cubanos.
En cuanto a la censura en el humor cubano, en abril pasado el director y guionista Iván Camejo dijo en el programa de DIARIO DE CUBA Los Puntos a las Íes: "Hacer humor en Cuba es una tarea difícil porque, sobre todo en los medios tradicionales, la censura es muy fuerte. Una de las cosas que nos prohibían en la Televisión Cubana era hablar del término censura. Hasta la palabra censura estaba censurada".
En cierto panfleto cubano durante uno de los tantos congresos de la Unión de Periodistas y Voceros del Régimen, el "Cenizas" manifestó que no existia la censura,sino el prejuicio. Una amistad se embulló y tiro una cosa crítica y naturalmente lo plancharon.Cuando viene al cubículo le preguntamos :" Bueno y qué vá o no ...? ,el con su gran sentido del humor dijo:"No me la prejuiciaron..." el chivato de turno corrió a informar a la dirección y el colega fue expulsado del libelo comunista y fue interrogado por esbirros de civil del G-2...