La organización pro derechos humanos Amnistía Internacional (AI) condenó el acoso y detención domiciliaria a los que está sometido a manos del régimen de la Isla el escritor, periodista y humorista cubano Jorge Fernández Era.
En los últimos meses, Fernández Era ha recibido ataques por parte de la Seguridad del Estado y de las autoridades de Cuba, que lo han detenido y sometido a un proceso penal por el que ahora se encuentra sujeto a medidas cautelares de libertad bajo fianza y reclusión domiciliaria.
Además, la policía política lo reguló para prohibirle salir de la Isla y se encuentra bajo vigilancia permanente.
"Nos unimos a la condena contra el acoso y la detención domiciliaria del intelectual Jorge Fernández Era, quien con su sátira ha reflejado la realidad cubana", indicó AI en un mensaje hecho público en Twitter por Erika Guevara Rosas, directora para las Américas de la organización.
"El Gobierno de Miguel Díaz-Canel sigue castigando el disenso y la crítica bajo su política sistemática de represión", agregó.
En una carta abierta titulada "Hay que reír para ver", que recoge firmas en la plataforma Change.org, cientos de creadores, entre humoristas, periodistas, escritores y cineastas de varios países, denuncian "la campaña de acoso y descrédito" impulsada por la dictadura contra Fernández Era, a quien se refieren como una "referencia para el humor cubano durante cuatro décadas".
Los firmantes, que llegan casi a los 400 desde el fin de semana, recuerdan que Fernández Era "ha sido editor y autor de varios libros" y "galardonado con numerosos premios nacionales e internacionales a lo largo de su carrera".
"Pese a lo anterior en los últimos tiempos el escritor ha sido excluido en todos los medios con los que colaboraba, se le ha prohibido viajar al exterior y encima se le ha condenado a un año de arresto domiciliario por el simple delito de satirizar la realidad cubana", denuncian.
Consideran que, "como cualquier humorista, Fernández Era está cumpliendo con su deber: satirizar las deficiencias de su sociedad" y que "las autoridades cubanas no están cumpliendo con el suyo persiguiéndolo".
"Disculpen por recordarles su contenido de trabajo, pero es deber de un gobierno arreglar lo que no funciona en su país, sin hostigar a los que intentan hacer reír con lo que funciona mal, tarea tan difícil que lo que merece es un premio", añaden.
"Se nos dirá que con la prisión domiciliaria se le evita a Fernández Era entrar en contacto con una realidad que tanto le incomoda, pero tenemos entendido que el escritor es mayor de edad y debe permitírsele salir de su casa si es su deseo, aunque sea para tropezarse con todo lo que no parece agradarle. Los humoristas son así de masoquistas, pero el masoquismo es una de las tantas opciones de las que disfrutamos los adultos. Por otra parte, creemos que, si los imperialistas y sus secuaces insisten en que en Cuba no hay derechos, está muy feo que la Policía y la Seguridad del Estado le den la razón al imperialismo", sostienen.
"Por todo lo anterior, exigimos públicamente que cese inmediatamente la persecución contra un colega que no ha hecho otra cosa que cumplir con su deber como humorista y ejercer sus derechos como ciudadano. Si no saben en lo que consisten los deberes de un humorista y los derechos de un ciudadano, prometemos explicárselo en una nueva carta, con muchas más firmas", concluyen.
Entre los firmantes están los humoristas Pepe Pelayo, Enrique Del Risco (Enrisco), Ulises Toirac, Leo Maslíah, Alexis Valdés, Rigoberto Ferrera, Évora Tamayo, Alen Lauzán, Ramón Fernández Larrea, Ana von Rebeur, Omar Franco, Andy Vázquez, Fermín Gabor (Antonio José Ponte) y Nelson Gudín (El Bacán de la Vida); los cineastas Pavel Giroud, Rolando Díaz, Ian Padrón y Juan Carlos Cremata, entre otros.