La actual temporada del programa televisivo español MasterChef, titulada "MasterChef 11: Legends", cambió su esquema habitual para incluir nuevos retos que los concursantes enfrentarán semana tras semana, donde ha sobresalido el cubano Alejandro Valdivia, quien conversó al respecto con el diario San Diego Red.
Nacido en Cuba, Valdivia se mudó a Estados Unidos cuando tenía 15 años, tras pasar por muchas dificultades durante su crecimiento debido la precaria situación económica y social de la Isla.
Fascinado por los diferentes tipos de comida que había probado, la mezcla cultural, su historia y la procedencia de los ingredientes, comenzó a experimentar el mundo de la cocina cuando llegaba de la preparatoria y se encontraba solo en casa, contó al medio de prensa.
"Llegaba de la escuela, en mi refri tenía comida y mi mente comenzaba a volar. Me ponía a ver los shows de Food Network y practicaba con diferentes ingredientes. ¡Me salían bastante bien las cosas para no tener ningún entrenamiento ni nada! De ahí comencé a progresar y se generó mi interés en la cocina, intentando replicar las recetas y cosas que veía en la televisión", dijo.
El cubano calificó su participación en el concurso televisivo español como "un sueño", y agregó que "ha sido increíble poder conocer a todas las leyendas que antes veía en la televisión ¡Y ahora yo estoy en la televisión cocinándoles a ellos!".
Ante los conflictos que enfrena en cada uno de los desafíos, que van subiendo de nivel en cada capítulo, el cubano se mostró optimista y preparado para superarlos.
"Los retos son bien difíciles, pero yo siempre les doy la cara a ellos, tratando de tener el mejor humor y obtener una crítica para aprender y al día siguiente hacerlo mejor. He sabido cómo sobrevivir, luchar y ver las cosas positivas dentro de lo negativo", afirmó.
Cada episodio de la actual temporada cuenta con la participación un chef diferente que organiza los retos. En el casting de este año la producción fue más selectiva y escogió a personas con estilos de cocina y de comida distintos para generar un gran contraste.
Por primera vez, solo 15 de los mejores cocineros caseros de Estados Unidos recibirán el codiciado delantal blanco y harán frente a cuatro leyendas de la cocina con nuevos desafíos, incluido el más difícil hasta ahora, una batalla cara a cara con la propia leyenda culinaria de MasterChef, Gordon Ramsay, informó el medio estadounidense.
Sobre su relación con Ramsay, conocido por su carácter explosivo al señalar errores, el cubano dijo que estaba "emocionado" por cocinarle. "Al chef siempre lo había visto en Hell’s Kitchen o MasterChef con esa intensidad que lo caracteriza y por eso estaba algo intimidado, pero personalmente conmigo ha sido sensacional. Me ha dado los mejores consejos en la cocina, las mejores críticas y los mejores complementos", afirmó.
"Hemos tenido una relación increíble que nunca creía que fuera a pasar, estuvo interesado en mi historia desde el primer día, y en la historia de los latinos. Hicimos una conexión. Su manera de instruirme me da más ganas de cocinarle o hacerle frente, no sé cómo vaya a pasar", agregó.
Ante la eliminación próxima de cinco de los 15 participantes de la temporada, el cubano se mostró seguro al afirmar que una de sus mejores herramientas es "la innovación".
"Yo puedo abrir un refrigerador y ver ingredientes secos, mojados, cosas en caja, y en mi mente, en segundos yo pongo un plato junto. Mi desventaja es que trato de empujar mucho con poco tiempo ya que soy muy rápido, pero a veces hago más de lo que debo hacer. Nosotros como venimos de poco sabemos cómo hacer mucho con eso que tenemos a la mano", explicó.
Sobre los platos que más le gusta cocinar, el cubano señaló los relacionados con proteína animal como el faisán, la codorniz, el pulpo, el venado o el ciervo.
Valdivia también mandó un mensaje de apoyo a los cubanos, que se encuentran en medio de una severa crisis económica y sanitaria, además de una ola represiva tras las protestas del pasado 11 de julio.
"Por favor, apoyemos a la causa cubana. En cuanto podamos ir, yo personalmente y una banda de amigos chefs y voluntarios iremos y les vamos a cocinar a miles de familias cubanas que les hace falta un plato de comida", prometió.
Al finalizar la actual temporada de MasterChef solo uno de los cocineros caseros reclamará el título, acompañado por el gran premio de 250.000 euros, una cocina VIKING completa, utensilios de cocina y productos para hornear de OXO.