La Dirección Provincial de Salud de Las Tunas se escudó este lunes en el embargo estadounidense para justificar la falta de los equipos necesarios para atender a una cubana accidentada, luego de que la familia se quejara en las redes sociales de que a la joven no se le ha practicado una tomografía en la cabeza ni ha sido operada de la cadera, una semana después del siniestro del que fue víctima.
De acuerdo con la publicación en Facebook de Yener Baez, quien pidió ayuda este domingo para hacer llegar su post "al mundo", su hermana de 32 años y madre de dos niños, Yailen Izada Velázquez, fue impactada por una moto el pasado 26 de enero.
El impacto le provocó "diversas fracturas desde la cabeza, pelvis, cadera, clavícula, tabique, fémur, muñeca", relató Baez. La accidentada fue ingresada en el Cuerpo de Guardia del Hospital General Docente "Dr. Ernesto Guevara de la Serna" y "trasladada a la sala de ortopedia en espera de una operación de urgencia de cadera", explicó la usuaria.
De acuerdo con la usuaria, la cirugía debió realizarse entre las 24 y las 48 horas posteriores al impacto, pero en todo el oriente cubano no existe el equipo necesario para llevarla a cabo. Además, a Velázquez le fue detectada una fractura en la cabeza el día 27 de enero, por lo que fue trasladada a la sala de Neurología del hospital.
Hasta el momento en que Baez publicó su post, a su hermana no le habían hecho una tomografía "para ver qué tiene en la cabeza" y tampoco había sido llevada a La Habana, "donde único se puede operar", a pesar de que la dirección del hospital y de Salud de la provincia habían dicho que gestionarían su traslado.
Baez expresó el temor de la familia de que su hermana se quede sin caminar y contó que la familia tuvo que quejarse del personal de ortopedia que trataba a la accidentada, pues le habían dado el alta desde el miércoles.
"Solo exigimos su traslado al Hospital Frank País de La Habana para que sea operada lo más pronto posible", manifestó Baez en su publicación. "Sabemos que contamos con vehículo para su traslado, pero la Dirección de Salud y del hospital nos siguen peloteando, pues no acaban de resolver su problema", lamentó la usuaria y reiteró el pedido de ayuda para que su mensaje llegue lejos.
En reacción al post de la hermana de la accidentada, la Dirección de Salud de Las Tunas contó que la joven fue ingresada en el Hospital Ernesto Guevara y aseguró que fue "inmediatamente atendida, según los protocolos establecidos para este tipo de pacientes, quedando bajo sistema de atención médica y observación continua por las especialidades de Ortopedia y Traumatología, Neurocirugía y finalmente hospitalizada en el servicio de Ortopedia".
Sin mencionar directamente las quejas sobre el hecho de que no hubiera sido operada de la cadera una semana después del accidente, ni se le hubiera realizado la tomografía de la cabeza, el organismo se justificó con el embargo estadounidense, chivo expiatorio por excelencia del régimen cubano, pese a sus millonarias compras en EEUU.
"Al momento de redactar esta nota se coordinan acciones con alternativas locales y de provincias vecinas para dar solución a este caso, debido a la rotura de equipamientos médico-diagnósticos que no han podido ser resueltos, pues su solución depende de componentes y partes pendientes de adquisición en el mercado internacional, entorpecidos, además, por el impacto negativo del criminal bloqueo yanqui", alegó la entidad tunera.
"Por la sensibilidad de este y otros casos en similar situación, la Dirección General de Salud y del Hospital se mantiene en constante comunicación con la paciente y sus familiares, reafirma el humanismo y solidaridad del Sistema de Salud cubano, ratificando de ese modo el compromiso de que, a pesar de la difícil coyuntura económica, se buscarán todas las alternativas posibles para atender y solucionar esta y otras situaciones de salud", concluyó.
El argumento de la Dirección de Salud de Las Tunas choca con el hecho de que que, en 2024, las compras del régimen cubano en EEUU sumaron más de 400 millones en alimentos y otros productos básicos, así como una cifra superior a los 50 millones en carros, todas autorizadas por leyes estadounidenses.
A ello deben sumarse las donaciones humanitarias millonarias que cada año hace EEUU a Cuba, la cuales sumaron en casi diez años 153.821.102 dólares, según cifras divulgadas en septiembre pasado por el Consejo Económico y Comercial EEUU-Cuba, principal lobby a favor de los negocios con La Habana de la nación del norte.
Por otra parte, el "criminal bloqueo" no constituye un freno para la desmedida inversión del régimen cubano en turismo, mientras se deterioran servicios básicos como la salud, como demuestran las publicaciones de la estatal Oficina Nacional de Estadísticas e Información (ONEI).
Si levantan el embargo se les acaba la justificación