El Ministerio de Salud Pública (MINSAP) de Cuba se negó a emitir la carta necesaria para que el niño de diez años Damir Ortiz Ramírez, quien padece neurofibromatosis tipo 1 y tiene un tumor en el seno cavernoso, obtenga una visa humanitaria para ser tratado en el exterior, informó este jueves su madre, Eliannis Ramírez, a través de una directa en Facebook.
El argumento de la dirección del Hospital Pediátrico "Juan Manuel Márquez", donde está ingresado actualmente el menor, fue que cuenta con recursos para tratarlo, aunque la realidad del sistema de salud cubano parece mostrar lo contrario.
La neurofibromatosis tipo 1 (también denominada NF-1) es una enfermedad compleja multisistema causada por la mutación de un gen en el cromosoma 17, que es responsable de la producción de la proteína necesaria para el normal funcionamiento en muchos tipos de células humanas. Provoca tumores a lo largo del sistema nervioso que pueden crecer en cualquier parte del cuerpo.
Con la progresión de la enfermedad, pueden surgir pequeños tumores en la retina que finalmente pueden conducir a la ceguera. También pueden aparecer problemas de aprendizaje en niños en edad preescolar.
"Ya me reunieron con 25 médicos o más en la dirección del Hospital Juan Manuel Márquez", dijo en su directa Ramírez, quien explicó que había salido de la sala de terapia intensiva donde se encuentra su hijo para no hacer la directa delante de él, pues "está muy preocupado".
"No me dieron la carta, les imploré; les supliqué que me dieran la carta, que el sistema de salud pública cubano, hasta hoy, (con) mi hijo con diez años parapléjico, no ha hecho nada. Dicen que tienen recursos para agotar con Damir", contó la madre del menor.
Relató además que los médicos le aseguraron que este viernes le harían "otra resonancia con contraste", porque la que ya le hicieron mostró que el niño "tiene la columna llena de tumores" y eso no había salido en la resonancia que le hicieron en noviembre.
"Yo les pedí a los médicos que me hicieran la carta y me dijeron que no me van a dar la carta para presentar en la embajada. Yo pido auxilio, Dios mío, yo pido ayuda", clamó desesperada la madre del menor.
"Yo quiero sacar a mi hijo de Cuba, yo no confío, Dios mío. Le pido ayuda a cualquier representante, a cualquier congresista, al presidente de los Estados Unidos, que me ayude a sacar a Damir de Cuba, por favor", suplicó Ramírez y contó que al niño "ya lo trataron con quimioterapia, con radio terapia, y fue todo por gusto. Por favor, yo les pido ayuda a todos; la carta no me la van a dar".
Un hospital de Miami ya habría aceptado atender al menor, según una publicación en la página de Facebook "Revolico.com Pinar del Río", que informa sobre una campaña en GoFundMe organizada por la activista exiliada Diasniurka Salcedo Verdecia.
"La activista explicó que el niño ya fue aceptado en un hospital de Miami, para recibir tratamientos que no están disponibles en Cuba. El menor ha sido sometido a quimioterapia y radioterapia, pero su condición sigue deteriorándose, agravada por daño renal y la inflamación de ambos ojos", detalló el post.
En la red social, varios usuarios piden apoyo para presionar al titular del MINSAP, el doctor José Ángel Portal Miranda, y conseguir que la madre de Damir Ortiz reciba la carta.
La negativa de la dirección del Hospital Pediátrico Juan Manuel Márquez a emitir la carta para que Damir Ortiz reciba tratamiento fuera de Cuba contrasta con el supuesto reconocimiento del Gobierno del derecho de las familias a buscar soluciones para los problemas de salud de sus hijos fuera de la Isla.
En septiembre de 2024, el director del Instituto de Hematología e Inmunología, el doctor Wilfredo Roque García, reconoció en un reportaje del Noticiero de la Televisión Cubana que muchas familias buscan en el exterior tratamientos que no obtienen en Cuba y dijo que eso era un derecho.
"No tenemos nada en contra de estas posibilidades, de estas peticiones", sostuvo Roque García, quien afirmó que era "un derecho" de las familias recurrir a esas alternativas.
El reportaje para el que dio las declaraciones el director del Instituto de Hematología e Inmunología estaba dedicado a presentar como "manipulación" la difusión en redes sociales del caso del niño de siete años enfermo de leucemia Jorge Esteban Reina Llerena, una semana después de que el senador cubanoamericano Marco Rubio lograra que el Servicio de Ciudadanía e Inmigración de Estados Unidos (USCIS) diera prioridad a este paciente, para que recibiera una visa humanitaria y pudiera someterse a un trasplante de médula en ese país. Este procedimiento no se puede realizar en Cuba.
El director del Instituto de Hematología e Inmunología consideró que lo que, según él, era una politización del caso de Reina Llerena "realmente no debería ser" y recalcó que, si se trataba de una visa humanitaria y de "un niño al que quieren ayudar, como hacen otros países, dan la visa, el niño sale, se trata, sin ningún tipo de problema ni de intervención política".
Sin embargo, la presente negativa a otorgar la carta para que Damir Ortiz viaje a EEUU para recibir tratamiento parece un intento de no reconocer las carencias en materia de salud de Cuba, presentada por la propaganda gubernamental como "una potencia médica".
Sin embargo, cada vez son más los pacientes con cáncer y otras enfermedades que se ven obligados a recurrir a la solicitud de visas humanitarias para intentar salvar sus vidas, ante la falta de tratamientos e insumos en los hospitales de la Isla.
