Aunque la central termoeléctrica (CTE) Antonio Guiteras de Matanzas comenzó a generar el lunes después de una parada de más de cuatro días, otras nueve unidades de CTE permanecieron fuera de servicio y 45 centrales de generación distribuida dejaron de funcionar en la arrancada de la semana, cuando el déficit superó los 1.360MW y el ministro de Energía y Minas salió a hacer promesas en sus redes sociales.
"Comenzó el arribo de piezas de repuesto para la recuperación de la disponibilidad de grupos de generación distribuida", escribió en su cuenta en X, Vicente de la O Levy.
Según el ministro del sector, esta carga que llega al país forma parte de un "programa para restablecer capacidades de generación del Sistema Eléctrico".
Hasta mayo de 2025 tendrá que esperar el inicio de la rehabilitación de la caldera del bloque dos de la Central Termoeléctrica (CTE) Lidio Ramón Pérez, de Felton, fuera de servicio tras el incendio que la destruyó en julio de 2022. Más de dos años después del siniestro, autoridades han anunciado el cronograma ejecutivo de las reparaciones en la planta de Mayarí, Holguín, la de mayor capacidad instalada en Cuba.
Erick Milanés Quinzán, director general de la Felton, dijo al periodista Emilio Rodríguez Pupo, de la emisora Radio Mayarí, que el comienzo se prevé en el mes de mayo de 2025 y los trabajos se extenderán alrededor de dos años y medio, o sea, hasta casi 2028, si no ocurren imprevistos.
Mientras, el entra y sale de las termoeléctricas sigue pasando factura al sosiego de los cubanos. El mismo día que entró al SEN la Antonio Guiteras, el bloque unitario mayor generador del país, salió la unidad uno de la termoeléctrica de Santa Cruz del Norte.
Según el parte de la Unión Eléctrica, "se encuentran averiadas" la unidad 5 de la CTE Mariel, la unidad 1 de la CTE Santa Cruz, la unidad 5 de Nuevitas, la unidad 3 de la CTE Renté y la unidad 2 de la CTE Felton. En "mantenimiento" están la unidad 2 de la CTE Santa Cruz, las unidades 3 y 4 de la CTE Cienfuegos y la unidad 5 de la CTE Renté.
Entre las 45 centrales de generación distribuida fuera de servicio por escasez de combustible y la patana de Santiago de Cuba sin generar el total afectado por esta causa alcanzó los 300 MW.
La información cotidiana, lejos de apaciguar a los cubanos afectados, genera más desconfianza.
Josefa Góngora Perez escribió en la nota de la UNE: "Sinceramente, no puedo creer que pueda haber esa demanda tan grande (3.100MW), teniendo en cuenta que aquí en el oriente desde el sábado por la noche está lloviendo y con temperaturas frescas. Yo creo que se pasan".
Para Luis Moreno Cala, esa demanda reportada es cosa del verano. "Estamos en agosto, yo no lo sabía, me voy para la playa", dijo en tono irónico.
"¿Cómo es posible que Guiteras arranque y el déficit sea mayor? Por Dios, esta gente hasta las cuántas nos tendrá humillado al pueblo", añadió Yeter López.
Ernes Verdecia Leyva preguntó "dónde está todo el petróleo que está entrando".
Dos buques con cargamentos de diésel, por un valor de alrededor de 81,2 millones de dólares, llegaron el miércoles 20 de noviembre a la bahía de Matanzas, mientras Cuba sufre apagones récord y las autoridades consiguen generar energía para menos de la mitad de la demanda nacional.
De acuerdo con plataformas de seguimiento satelital, el tanquero Corossol, con bandera de Liberia, llegó a la base de supertanqueros de Matanzas con aproximadamente 88.000 toneladas (625.000 barriles) de diésel, basado en su calado, precisó a DIARIO DE CUBA Jorge Piñón, director del Programa de Energía para Latinoamérica y el Caribe de la Universidad de Texas.
El Corossol partió desde el puerto de Rotterdam, en Holanda, el pasado día 4. La Habana ha estado haciendo compras en ese país en los últimos meses.
Por su lado, el SeaMarlin, de bandera de Alemania, arribó también a Matanzas el miércoles, en su caso con unas 38.000 toneladas (250.000 barriles) de diésel. El buque habría cargado en alguna terminal del mar Báltico, donde permaneció durante todo el mes de octubre. Partió hacia la Isla desde el puerto de Southwold, en Reino Unido, punto en el que hizo una parada técnica de dos días.
"A un precio estimado de 645 dólares la tonelada, el costo total es de aproximadamente 81.2 millones de dólares", precisó Piñón.
Estos arribos se producen después que la semana pasada al menos otros cinco buques petroquímicos llevaron crudo y gas licuado de petróleo a la Isla desde México, Bélgica y Venezuela. Piñón estimó que el valor total del contenido de tres de ellos era aproximadamente 54 millones de dólares.
El diésel es necesario para la generación distribuida o grupos electrógenos, que generan energía en la Isla en apoyo a las ineficientes y sobrexplotadas centrales térmicas.