El viernes 20 de septiembre se efectuaron las sesiones anuales y semestrales de la Alta Cámara Masónica de Cuba, en las que fue elegido como nuevo Gran Maestro Mayker Filema Duarte, quien ocupaba el cargo de manera temporal desde agosto, tras la renuncia del Mario Urquía Carreño.
La elección marcó el fin de la crisis institucional en la masonería de la Isla, que se desató en enero con la denuncia del presunto robo de 19.000 dólares pertenecientes al Asilo Nacional Masónico, que se encontraban en la oficina del exlíder Urquía Carreño.
Para conocer detalles de las sesiones de la Alta Cámara, DIARIO DE CUBA recogió testimonios de representantes de distintas logias, que hablaron bajo la condición de anonimato. Uno de ellos ofrece información actualizada sobre la denuncia más reciente de la Gran Logia Masónica de Cuba, según la cual, el ex Gran Maestro y el ex Gran Tesorero, Airam Cervera Reigosa, presuntamente se apropiaron de millones de pesos.
"Sobre los detalles de la sesión no puedo decir nada porque es secreto masónico. Solo puedo compartir información pública, como, por ejemplo, que se realizó nuevamente la sesión anual de la Alta Cámara, porque la anterior fue anulada por el Ministerio de Justicia (MINJUS) en clara intromisión a los asuntos internos de la masonería", explicó un representante.
"También se celebró el mismo día la sesión semestral de la Serenísima Alta Cámara y en la misma se eligió como nuevo Muy Respetable Gran Maestro de la Gran Logia de Cuba a Mayker Filema Duarte, que era el Gran Maestro temporal, luego de que se obtuviera la renuncia del ladrón Mario Urquía", señaló el masón.
Otro representante de un taller masónico dijo estar "muy contento, porque la masonería cubana resolvió con dignidad la crisis interna, a pesar de la intromisión del Ministerio de Justicia y la Seguridad del Estado".
"Los masones no reconocimos al usurpador Mario Urquía y lo obligamos a renunciar", sentenció. "Ya sabíamos que Urquía estaba robando, pero en la sesión se rindieron informes asombrosos: Urquía y su cómplice, el ex Gran Tesorero, Ayram Cervera, malversaron casi cinco millones de pesos a la Gran Logia".
A inicios de mes, Filema Duarte firmó la "Circular Especial No. 127", que fue transmitida a las logias de Cuba, en la que se informaba sobre el presunto desfalco de más de dos millones de pesos a la Gran Logia Masónica por parte de Cervera Reigosa con la presunta complicidad de Urquía Carreño.
La cifra revelada por el segundo masón que habló con DIARIO DE CUBA superaría con creces esa suma. Este representante de una logia masónica afirmó que ya está comprobada la falsificación de documentos bancarios por parte de los dos presuntos responsables.
"Pronto se hará público "el informe de la auditoría interna, pero ya se comprobó por los auditores que Urquía y Cervera falsificaron documentos bancarios, estados de cuentas y transfirieron por banca remota grandes sumas de dinero a sus cuentas particulares y a la de cómplices", afirmó la fuente.
"Nada de esto debió pasar. Confiamos en la honestidad de nuestros líderes que en realidad eran unos corruptos y si no los echamos de sus cargos todavía estarían robando. Quedamos casi en bancarrota, pero somos libres otra vez. En cuanto a los ladrones tendrán que responder a la justicia por sus delitos. Ya Urquía se encuentra bajo fianza y tendrán que ir a juicio y reponer el dinero malversado", contó el masón.
La crisis que se desató en enero comenzó a escalar cuando las dos potencias masónicas cubanas —el Supremo Consejo del Grado 33 para la República de Cuba y la Gran Logia de Cuba — decretaron sanciones recíprocas para sus líderes, el entonces Gran Maestro Urquía y el Soberano Gran Comendador, José Ramón Viñas Alonso.
Viñas Alonso fue la única voz de la sociedad civil reconocida por el Gobierno que emitió un comunicado público condenando la represión gubernamental contra los cubanos que participaron en las protestas del 11 y el 12 de julio de 2021, conocidas como 11J.
La disputa interna masónica cobró tintes políticos por la intervención, a favor de Urquía Carreño, de la Seguridad del Estado, el Registro de Asociaciones del MINJUS y la Oficina de Atención a Asuntos Religiosos del Partido Comunista de Cuba.
El MINJUS incluso repuso en el cargo de Gran Maestro a Urquía Carreño y anuló la sesión anual, celebrada en marzo, en la que los masones lo habían expulsado.
Durante esta crisis, las dos potencias masónicas fueron intervenidas de hecho, al congelárseles sus cuentas bancarias y ser suspendidas en sus funcionamientos. Viñas Alonso fue interrogado e intimidado por la Seguridad del Estado. Uno de sus principales colaboradores, el escritor Ángel Santiesteban Prats, también fue detenido e interrogado en dos ocasiones por el órgano represivo.
El clímax de la crisis llegó el martes 23 de julio de 2024, cuando alrededor de dos centenares de masones, vestidos con sus atributos, protestaron ante la Gran Logia, exigiendo la expulsión de Urquía Carreño y el cese de la intromisión del MINJUS en los asuntos internos de la masonería cubana.
***
Llamadas -más la interacción siguiente por correo electrónico- a todas las embajadas cubanas en el mundo para comunicar el plan de movilización-puntual en el hemisferio.
Elegido? o puesto a dedo por la seguridad?....
El charco de agua sucia donde cayó la institución masónica en Cuba no se limpia con la elección de un nuevo Gran Maestro; ya está en el imaginario popular la degradación de lo que fue una institución honorable a través de la historia.