Después de aprobar el uso en México como refuerzo de las vacunas Abdala, de Cuba, y Sputnik, de Rusia, la Comisión Federal para la Protección de Riesgos Sanitarios (Cofepris) anunció que necesita más tiempo para solventar la información técnica faltante para otorgar el registro sanitario a los inyectables de Moderna y Pfizer.
De manera que, pese a que las segundas tienen el aval para su uso masivo de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y las primeras no, ni Moderna y Pfizer podrán comercializarse en México.
"Las empresas solicitantes Pfizer, para la vacuna Comirnaty, y ModernaTx. Inc. (a través de su representante legal en México, Asofarma), para la vacuna Spikevax monovalente, requirieron mayor tiempo para solventar los elementos e información técnica faltante en el expediente que ingresaron para obtener el registro sanitario", precisó la Cofepris en un comunicado, citado por EFE.
Asimismo, el órgano regulador mexicano detalló que mantiene interés en evaluar de "manera prioritaria" estos inyectables, por lo que un grupo de dictaminadores permanece en espera de recibir los elementos que los laboratorios deberán entregar.
Por tanto, no dio una nueva fecha probable para el registro sanitario de estos biológicos.
Además, recordó a la población que la vacuna para prevenir Covid-19 es universal y gratuita, y que su uso indiscriminado representa riesgos a la salud.
El Gobierno de México tiene la meta de aplicar esta temporada de frío 35,2 millones de vacunas contra la influenza y 19,4 millones contra el Covid-19, enfermedad para la que usará Abdala y Sputnik.
Comirnaty es una vacuna para la prevención de la enfermedad por coronavirus en personas a partir de los 16 años, y recibió la autorización para su uso de emergencia por la OMS en 2020. Por su parte, la Spikevax, con similar utilidad, es recomendable para personas a partir de los seis meses de edad. Fue aprobada por el organismo mundial en 2021.
En cambio, la OMS no ha avalado el uso de Abdala y Sputnik como refuerzo contra el Covid-19. Pese a ello, en octubre pasado Andrés Manuel López Obrador aseguró su eficacia tras vacunarse en vivo por televisión con Abdala. Ni Miguel Díaz-Canel ni otro alto funcionario cubano han hecho gestos similares.
A fines de octubre, varios diputados mexicanos presentaron la primera de varias denuncias contra la Secretaría de Salud y la Cofepris por la aplicación de la vacuna Abdala contra el Covid-19, comprada por el Gobierno de López Obrador a su aliado cubano y usadas después de su fecha de vencimiento.
La denuncia fue interpuesta en la Secretaría de la Función Pública (SFP) por presunto manejo, aplicación o custodia irregular de recursos públicos federales asignados a la vacunación, así como aplicación de vacunas caducadas.
Recientemente, empleados del Instituto Mexicano de Seguridad Social (IMSS) del estado de Morelos denunciaron que las autoridades los obligan a aplicar dosis vencidas de la vacuna cubana Abdala. Los trabajadores, que pidieron no revelar sus nombres, dijeron al diario mexicano El Universal que la orientación es aplicar de manera discreta las vacunas vencidas en las 24 unidades del IMSS en Morelos, así como también en los centros de salud de ese estado.
Asimismo, el estado de Guanajuato rechazó la vacuna cubana, debido a que no protege contra esta enfermedad y por la posibilidad de generar un efecto secundario grave, según declaró el secretario de Salud, Daniel Díaz Martínez.
El funcionario dijo que las vacunas Abdala que tiene la Federación ya están caducadas y no inmunizan. Añadió que lo único que pide Guanajuato al Gobierno federal son vacunas que estén aprobadas por la Organización Mundial de la Salud (OMS), y aseguró ya se reunió con el nuevo subsecretario de Salud, Ruy López Ridaura, para abordar el tema.
"A esta vacuna sí nos negamos", declaró el secretario guanajuatense en una entrevista, donde dijo que apuestan por la vacuna de Pfizer, Moderna u otra que esté avalada por la OMS.
A finales de diciembre de 2022 trascendió que era pobre la afluencia de personas a los centros de vacunación habilitados por la Secretaría de Salud de la Ciudad de México para recibir dosis de Abdala. Ello, a pesar de que ese país vivía una sexta ola de contagios por Covid-19 en ese momento.
A principios de agosto pasado, el presidente de México defendió el uso de la vacuna Abdala desarrollada por el Gobierno cubano. AMLO calificó el rechazo del fármaco como "ignorancia" de sectores del bloque conservador de su país.