Mientras exporta el combustible que escasea en Cuba, el régimen exhibe sanciones por venta ilícita dentro de la Isla

El régimen juzgó a 15 cubanos por la venta ilícita de gasolina, informó el portal estatal Cubadebate citando una nota del Tribunal Provincial de La Habana, poco más de una quincena después de que un buque de petróleo partiera de la base de supertanqueros de Matanzas cargado del combustible que escasea en la Isla.

De acuerdo a Cubadebate, los 15 cubanos fueron procesados por la venta de gasolina a través de las redes sociales; por precios que oscilaban entre 350 y 600 pesos el litro.

El pasado 1ro de junio, el Tribunal Municipal Popular de Diez de octubre, celebró diez juicios orales, tras los cuales dos de los implicados fueron absueltos, ya que su actuación no fue considerada delictiva, mientras los otros 13 acusados fueron sancionados con penas de, entre un año y cuatro meses hasta dos años de privación de libertad (a 11 personas) y, en dos casos, la de trabajo correccional sin internamiento.

A los responsables también les fueron aplicadas sanciones de comiso del combustible ocupado, privación de derechos y prohibición de salida del territorio nacional.

De acuerdo a Cubadebate, el tribunal declaró que los hechos probados integraban el delito de especulación, previsto, en el Artículo 310 del Código Penal vigente, y que "teniendo en cuenta que estos se cometieron en un escenario complejo, matizado para la escasez de combustibles; determinante de la existencia de una situación excepcional en el país", se decidió "incrementar los marcos sancionadores previstos para la citada tipicidad delictiva".

Mientras el régimen desvía la atención de los cubanos sobre delitos de compraventa ilícita de gasolina e impone sanciones ejemplarizantes a los responsables, vende el combustible cuya falta provoca largas colas en las gasolineras.

A mediados de mayo pasado, el buque de petróleo Calida, con bandera de Malta, que había atracado en el puerto de la base de supertanqueros de Matanzas, procedente de EEUU, salió de ese punto rumbo al Canal de Suez cargado de combustible.

El sitio de monitoreo de buques Vessel Finder ubicó al Calida en un punto al norte de Cuba, entre Matanzas y Varadero, rumbo noreste.

El barco había llegado a Cuba en lo que los medios oficiales y autoridades de la estatal Unión Cuba Petróleo (CUPET) aseguraron falsamente que era una operación de importación de diésel. Sin embargo, como comprobó DIARIO DE CUBA, este salió vacío de Corpus Christi, en Texas, EEUU, su puerto de origen.

En Matanzas, según precisó a esta redacción Jorge Piñón, director del Programa de Energía para Latinoamérica y el Caribe de la Universidad de Texas, el Calida cargó una cifra estimada en alrededor de 750.000 barriles de petróleo, dado que "desconocemos la viscosidad del petróleo crudo o fuel oil" que lleva, aclaró.

"Asumiendo que es fuel oil, a 60 dólares el barril, el valor estimado del cargamento es aproximadamente 45 millones de dólares. No sabemos quién es el vendedor, si Cuba Metales o PDVSA", señaló el experto.

Piñón subrayó que el buque viajaba con un calado casi a su nivel máximo: 14,8 metros, de 15 que tiene esa embarcación. El tanquero llegó a Cuba con un calado de ocho metros.

La versión difundida por las autoridades de Cuba y los medios oficiales fue que el Calida, cuyo nombre y procedencia nunca fue informada por esos reportes, llegó a Matanzas para descargar 40.000 toneladas de diésel, equivalentes a 290.000 barriles de crudo y sus derivados, que vendrían a aliviar la dura escasez de combustible que se agravó en la Isla desde abril.

Sin embargo, al tratarse el Calida de un tanquero Aframax de 115.000 toneladas, con la capacidad de transportar 800.000 barriles, esa carga tan pequeña se hizo sospechosa.

Según un reporte del oficial Canal Caribe, desde el puerto de aguas profundas de Matanzas, donde estuvo atracado el Calida, el barco había comenzado en tiempo récord "la descarga hacia tierra y, al mismo tiempo, el trasiego en dirección a otro buque, este igualmente acoplado al muelle de aguas profundas".

Lidia Rodríguez Suárez, directora comercial de la Empresa Comercializadora de Combustibles de CUPET, dijo para el reporte que el presunto cargamento no implicaría el aumento de la venta de combustible en las gasolineras cubanas: "Siguen siendo limitados los consumos, dígase la distribución también estará limitada, teniendo en cuenta no llegar a cero, que es lo que hoy tenemos proyectado para mantener la vitalidad de los servicios".